Morrowind - Análisis de la primera expansión de The Elder Scrolls Online

Todos los The Elder Scrolls tienen algo que enganchan y mucho, incluso a pesar de estar completamente en inglés. Su historia, sus diálogos, sus misiones y todo lo que los rodea (el mundo, sus personajes, sus escenarios...); todo tiene algo que se deja jugar muy bien, y aunque TESO podría considerar como un MMO, con sus pros y sus contras, la combinación entre MMO y The Elder Scrolls aquí es muy buena ya que han intentado que el jugador piense que está jugando al juego de Bethesda pero con muchos elementos de juego masivo online multijugador. El problema puede ser que en muchas ocasiones se queda en medio, y entrar en una zona donde ya hay muchos jugadores y verla casi vacía porque todos los enemigos han sido derrotados, y el objeto que buscamos está ahí esperando a ser recogido, hace que en muchas ocasiones no tengamos que hacer nada, salvo ir de un punto a otro, recoger el objeto y salir de allí tranquilamente, todo esto al no haber instancias de ninguna clase.

Las nuevas opciones le dan mucha vida al juego, como son el PvP o los Battlegrounds, combates de entre tres grupos de jugadores, y las nuevas zonas de juego, mazmorras, enemigos élite y el revisitar de nuevo Morrowind tras 15 años es muy atrayente para aquellos jugadores que jugaron en su momento al original de PC y Xbox 1 (la original). Esta expansión, si la queremos hacer por completo, serían al menos 40 horas de juego, lo que es suficiente para una expansión, aunque nos podemos quedar sin misiones muy pronto si vamos directos al grano y nos centramos en las misiones. Para el público español incluso puede ser menos, ya que si no entendemos el idioma tampoco es demasiado problemático, yéndonos derechos a los puntos de las misiones, pero perderemos gran parte de la gracia del juego.

Al ser una expansión, ha cambiado poco o nada la forma de controlar a los personajes, acceso a los menús y demás opciones del juego, lo que significa que si te gustaba antes te gustará ahora. Nosotros lo vemos un poco tosco, con un menú complicado más pensado quizás para el usuario de PC (que también es confuso), y al que hay que aprender a contrarlo, por lo que las primeras horas de juego pueden ser raras, incluso si has jugado antes a cualquier otro MMO. La idea ha sido hacerlo similar a los anteriores The Elder Scrolls, los cuales tampoco eran nada buenos dicho sea de paso, lo que consigue que en las primeras horas de juego nos cueste hacernos con los mandos o el ratón y teclado.

Gracias a la expansión se han añadido opciones de juego como el PvP o los campos de batalla, además del nuevo personaje, lo que ha ampliado ligeramente las posibilidades de juego en su conjunto. Si lo comparamos con otras expansiones de otros juegos, hay que decir que no está nada mal, ya que aporta muchas horas de juego y algunas nuevas opciones, pero creemos que hay que pedirle más a Bethesda, a pesar de ser un MMO de segunda fila que no ha conseguido enganchar a la comunidad de jugadores como otros MMOs en el mercado, ni tampoco a los jugadores de Skyrim o Oblivion (posiblemente la siguiente expansión, dicho sea de paso).

Al tratarse de una expansión o DLC del original (que necesita The Elder Scrolls Online para poder jugar), es difícil innovar o expandir el original con nuevas cosas originales. Como ya hemos dicho, contamos con un nuevo tipo de personaje, un nuevo territorio y nuevos modos de juego no añadidos al original, por lo que tampoco vemos que se haya inventado la rueda en este sentido si lo comparamos con cualquier otro juego en el mercado del mismo género. Obviamente, comparándolo con cualquier otro The Elder Scrolls sale ganando al contar con el jugador contra jugador en dos modalidades y también cuenta con un nuevo modo cooperativo para doce jugadores, una especie de RAID con mazmorras más difíciles, y hay que reconocerles haber añadido a 12 en lugar de 10 o de cualquier otro número que otros juegos similares tienen.

También tenemos que reconocerle el hecho de poder ver algunas de las zonas ya visitadas en un juego anterior, algo que nos ha hecho mucha ilusión, sobre todo porque es algo relativamente sencillo de hacer y que casi ninguna compañía se atreve, bien por miedo a que le digan que está reutilizando material ya visto por otros jugadores o bien porque, simplemente, consideran que no es necesario revisitar alguna zona ya vista. Esto es algo que nos ha gustado y que debería verse en más videojuegos actuales, sobre todo con tantas sagas que hay en el mercado.

Una verdadera lástima que no se haya aprovechado esta expansión para mejorar (al menos ligeramente) el conjunto global, como ya hemos visto en otras ocasiones en otros juegos similares. Y es una lástima porque mirando de lo que son capaces las consolas actuales y los PCs y viendo la baja calidad gráfica del juego en general, que nos parece incluso inferior a lo que ya vimos en 2006 con Oblivion, salgo porque carga más rápido y hay muchas zonas en las que entramos que no necesitan carga porque ya están cargadas en memoria. Los modelos no son nada buenos, y los escenarios son muy vacíos y falto de detalles en su mayor parte, lo que podría arreglarse fácilmente con algún que otro efecto, como ocurre con algunos interiores, cuevas y templos.
No estamos diciendo que sean malo, ni mucho menos, solo que el problema reside en que a día de hoy, casi todo lo que hay en el mercado en este género ya es mucho mejor que Morrowind, y que incluso en el momento en el que salió al mercado ESO ya era bastante inferior a otros muchos (salvo aquellos que imitan a posta WoW). Otra enorme pega es el encontrar el juego completamente en inglés, lo que era malo en el juego original pero que no ha sido corregido después de dos años en el mercado. Tampoco han intentado apoyar a algún proyecto de traducción en España, lo que demostraría que a Bethesda España les preocupa mínimamente. Mención aparte necesita la banda sonora del juego, posiblemente lo mejor de todo el conjunto que, sin ser mal, debería (obligatoriamente) ser mucho mejor que lo que encontramos.