Medal of Honor: European Assault

Corría el año 1999 cuando un nuevo FPS (First Person Shooter o juego de disparo en primera persona) irrumpía en el saturado catálogo de Playstation, donde además este tipo de juegos no terminaban de cuajar entre los usuarios. Pero sus creadores, los chicos de Dreamworks Interactive se habían preocupado de darle una seña de identidad propia al juego, de buscar el realismo y el rigor histórico sin descuidar el factor jugable... Y vaya si lo consiguieron.

Bajo nombre de ?Medal of Honor? se han lanzado distintos juegos para PC y toda la nueva generación. En PS2, GC y Xbox hemos podido ver ?MOH: Frontline? y ?MOH: Rising Sun? , mientras que los usuarios de PC han disfrutado de ?MOH: Allied Assault? (y sus expansiones) y más recientemente de ?MOH:
Pacific Assault?
Obviamente, en los casi 6 años que separan estos lanzamientos, mucho ha cambiado en la estructura de Medal of Honor , desde el sello que lo editaba hasta multitud de detalles jugables. Así, si queréis saber que queda en ?MOH: European Assault? del estupendo juego original, sólo tenéis que acompañarnos en este análisis.

El juego se queda corto en el modo de 1 jugador. Sólo gracias al modo multiplayer se salva un poco el apartado. Tampoco hay online.

Posiblemente el apartado más flojo del juego, por su corta duración . El juego se compone de tan sólo 11 misiones principales , lo que deja el modo principal de juego en unas 10 horas para un jugador medio ; excesivamente poco.

Las posibilidades de re-jugar dependen de nuestro afán de completismo y nuestra forma de jugar; en cada misión, además del objetivo principal, se añaden ?misiones ocultas? que desvelaremos al ir explorando la fase. Estas son muy distintas (van desde acabar con determinados enemigos a proteger un puente, robar unos documentos?) y ayudan a añadirle variedad y duración al juego. Completarlas todas nos dará mayor rango y más facilidades en las fases posteriores (botiquines, ?revives??)

El problema es que si en nuestro primer intento nos dedicamos a completarlo todo ?algo totalmente factible ? no hay razones para jugar más, más allá de probar los distintos niveles de dificultad. Ni siquiera mejorar nuestras puntuaciones en cada fase, ya que no las hay.

Por eso, una vez terminada la aventura principal, sólo nos queda el modo multijugador, que es sorprendentemente completo . Hablamos de 15 mapas distintos, la posibilidad de jugar en los 2 bandos (aliados o alemanes) y en distintas posiciones: infantería, francotirador, fusilero o artillería pesada , lo que dota al juego de mucha más variedad. Además, hay 8 modos de juego multijugador , desde el típico ?captura la bandera' a ?eliminación?, en el que ganará el que más enemigos elimine. No hay nada realmente novedoso ? incluso se puede quedar corto en este apartado, comparado con otros títulos como Timesplitters , pero si tenemos multitap y 3 amigos con los que jugar el juego gana muchos enteros .

Eso sí, para un solo jugador la cosa cojea bastante; entre la mediocre duración, la imposibilidad de jugar a ninguno de los modos de multijugador (algo también un poco incomprensible) y la falta de modo online, las horas de juego se quedan muy, muy cortas.

Una vez hechos al sistema de control, el juego se deja jugar perfectamente. Los nuevos elementos añadidos juegan a nuestro favor.

El estilo de juego de los FPS nunca ha sido especialmente cómodo en consola, al menos no tan intuitivo y fácil como usando un ratón. Con la incorporación del segundo stick analógico en todos los mandos de esta generación la cosa ha ganado bastante, y ya hay auténticos virtuosos del PAD. De todas formas, en este mundillo nunca llueve a gusto de todos, y cada uno se ha acostumbrado a jugar de una forma (disparar con los gatillos, con los botones, incluso a moverse con los botones, como en DC...). Aquí tenemos que pegarle el primer tirón de orejas a ?European Assault? , ya que no se puede personalizar el control a nuestro gusto . Es cierto que existen distintas posibilidades (incluyendo las más comunes), pero no tiene por qué coincidir ninguna de ellas con vuestra forma de jugar, y al ser un punto tan fácilmente subsanable, se convierte en un fallo considerable.

Una vez acostumbrados al control, el juego es bastante intuitivo; tendremos algunos problemillas al agacharnos / escondernos, ya que la cámara hace extraños giros que pueden despistar un poco a los jugadores menos experimentados en los FPS, pero nada que no se solucione en las primeras horas de juego. Además, los controles nos son repetidamente explicados en cada acción específica de las primeras misiones, con lo que todo se hace más fácil e intuitivo.

En esta entrega se han añadido nuevos elementos jugables, que hacen la acción más divertida, pero que también perjudican el estilo ?serio? e histórico del juego.

- ?Revive?: como si nuestro personaje tuviera distintas ?vidas?. En nuestra opinión, un nivel de dificultad mejor ajustado hubiera sido una mucha mejor elección.
- Némesis: elimina a un enemigo super-poderoso, capaz de aguantar muy bien el daño.
- ?Esconderse y disparar?: buscando un mayor realismo, en esta entrega las balas son mucho más letales, con lo que estos nuevos comandos para disparar agazapado son fundamentales.
- ?Batallón?: Nuestro personaje es el líder de un pequeño escuadrón de 3 personajes, a los que podemos dar órdenes simples (estilo avanza/escóndeos). La idea no es mala, pero la inteligencia artificial del grupo no es para tirar cohetes.
- ?Medidor de Adrenalina?: Utilizando esta nueva barra, nuestro personaje se convierte momentáneamente en toda una máquina de matar, mucho más precisa en sus disparos y menos vulnerable al fuego enemigo.

La ambientación ha sido soberbiamente cuidada. Lástima el incluir algunos elementos demasiado ?arcade? que contradicen esta atmósfera.

Las señas de identidad de ?Medal of Honor?, lo que lo diferencia del resto de FPS siguen vigentes en este título; su búsqueda del realismo histórico y la implicación del jugador en cada uno de los enfrentamientos . Para ello, y metidos en la piel de un soldado americano - ahora ya anciano y recordando todas estas batallas ? iremos reviviendo algunos de los capítulos más importantes de la segunda guerra mundial, intercalando algún video histórico para ambientar mejor. Hasta ahí, todo perfecto.

El problema viene cuando las novedades añadidas , pese a su ayuda en el apartado de jugabilidad, se convierten en una contradicción a ese espíritu.

Por estratégico o divertido que sea, un subidón de adrenalina no puede hacernos más resistentes a disparos; la aparición de enemigos que aguantan una cantidad imposible de disparos o los nuevos ?revives?? Todos chocan de lleno con la búsqueda de realismo del juego. Es difícil intentar sumergir al jugador en una batalla ?real? cuando el jugador tiene 3 vidas y su enemigo puede encajar fuego de un lanzagranadas y seguir intacto.

Ciertamente estos detalles son originales, también enriquecen la jugabilidad de un modo interesante, pero hubieran quedado mucho mejor integrados en un juego de corte menos serio o más fantástico. Además, hubiera bastando con que los ?revive? nos despertaran en un campamento de enfermeros, p.e., para que fuesen más creíbles.

El resto del juego, principalmente la ambientación si se ha cuidado de sobremanera, siendo lo mejor del apartado ; armas de época, vehículos (aviones, tanques y jeeps) perfectamente integrados, y toda una estética que remarca los oscuros años de la segunda guerra mundial, desde la presentación hasta los créditos.

La inclusión del batallón de apoyo, ya más en concordancia con el estilo de juego, nos parece una idea estupenda, porque el jugador tiene un elemento estratégico de apoyo y al mismo tiempo tiene que cuidar de la supervivencia del mismo. El único ?pero? es que la inteligencia artificial de este grupo está bastante por debajo de la de los enemigos. Esperamos que este punto se mejore en futuras versiones.

Estupendo, lo mejor del juego. El doblaje español es sobresaliente, los gráficos están muy a la altura y el engine es sólido. Lástima de cargas y algún efectillo por pulir.

Sin duda, lo mejor del juego. Si hay un elemento que enamore de los ?Medal of Honor? es la atmósfera que desprenden, un cierto tufillo histórico. Para llevar a cabo esta puesta en escena se ha explotado a conciencia el hardware de PS2.

Gráficamente el juego es una delicia por diseños de personajes y escenarios, superando ? por goleada - al anterior ?Rising Sun? . Soldados más detallados (especialmente las caras) y de diseños variopintos, más personajes en pantalla y una mayor suavidad a la hora de animarlos.
Los escenarios son estupendos, limitados en número pero mimados en variedad y detalle, con multitud de elementos destructibles (aunque lamentablemente no todos)

Los efectos de luz, desde los disparos (propios, de aliados o enemigos) hasta los focos que iluminan los escenarios (y que podemos destruir a nuestra conveniencia) están a un estupendo nivel. Lástima que a veces estos efectos de luz fuercen excesivamente el engine y provoquen alguna pequeña bajada en el framerate , nada alarmante pero que molestará a los más puristas.

La otra gran baza del juego es el estupendo doblaje al castellano del que goza , contando con un estupendo estudio a sus espaldas que ha sabido reflejar el estupendo trabajo original; las voces de los aliados, ingleses y rusos, o las de los enemigos alemanes quedan perfectamente adaptadas al español. Para quitarse el sombrero. El sonido FX también es sobresaliente, y ayuda a crear la tensión en los momentos críticos de las batallas, con centenares de sonidos de disparos, explosiones y voces distintos que podremos disfrutar gracias al THX incluido en el juego, y más si tenemos un equipo que soporte Dolby Prologic II . La música corre una suerte similar, ambienta estupendamente y tiene algunos momentos gloriosos, para pararse un poco, remolonear (en pausa) y disfrutar.

Completamos el apartado con tirón de orejas, ya que no se ha incluido un selector 50/60Hz, y aunque el resultado PAL no es malo seguimos sin entender que no se incluya en todos los juegos. Tampoco podemos dejar sin censurar las excesivas cargas antes de cada fase (en las fases no hay ninguna) y los lentísimos (y continuos) accesos a la Memory Card para grabar, que aunque no afectan a la jugabilidad son muy molestos.