Nintendo nos ofrece otra nueva visión del clásico juego de puzzle Tetris con el uso de la pantalla táctil. Su funcionamiento es relativamente sencillo de aprender, como la gran mayoría de títulos de este género. El objetivo es unir tres o más casillas del mismo color en horizontal o vertical moviendo de izquierda a derecha con el uso del stylus de la consola. Al contrario que Tetris, en esta ocasión las nuevas piezas van saliendo desde la parte inferior de la pantalla en hileras de a uno y contamos con un botón para que aparezca una nueva hilera. De esta forma, podremos ir formando combinaciones de tres o más piezas del mismo color, las cuales desaparecerán y cuyo hueco será rellenado por las piezas que en ese momento estén encima. Al caer las piezas pueden crearse nuevas líneas de a tres o más piezas del mismo color, lo que creará combos que además de reportarnos más puntos hará que las nuevas hileras de piezas procedentes de la zona inferior tarden más en aparecer. Éste será el funcionamiento básico del juego que nos puede proporcionar un rato divertido para pasar, sobretodo si somos fans de este tipo de juegos, aunque tampoco parece pretender innovarlo ni darle un nuevo rumbo.
En cuanto a modos de juego, contamos con los modos más clásicos vistos en el género, por tiempo, puzzle hasta que nos cansemos, modo versus contra la cpu o modo meta que tendremos que limpiar hasta cierto punto para pasar de nivel. También hay un modo que nos lanzará bloques sólidos desde la parte superior de la pantalla y que al conseguir limpiar tres piezas que toquen alguno de estos hará que se conviertan en piezas de colores. Aparte de estos modos bastante clásicos, sí encontramos algo que puede llamar la atención la primera vez que entramos y son los juegos diarios.
Como si de un ?Brain Training? se tratase, este tipo de pruebas nos ofrece la posibilidad de jugar a tres modos distintos una vez al día como máximo a cada uno de ellos y ver cómo vamos mejorando en nuestras puntuaciones gracias a un gráfico que aparecerá en pantalla. Con ello, lo que se pretende es que podamos ver nuestra evolución de juego y cómo vamos mejorando con respecto al día anterior. Esto modo resulta bastante interesante, puesto que siempre se pueden encontrar a ciertos jugadores (como en mi caso) que se consideran torpes en este género, por lo que jugar al modo un jugador tanto como queramos e intentar posteriormente la prueba diaria nos muestra nuestra verdadera evolución en el juego, por lo que no nos consideramos tan ?torpes? como parecíamos en un principio.
Aparte de estos modos de juego, y del clásico para un jugador, también contamos con la posibilidad de jugar multijugador tanto en red inalámbrica (hasta cuatro personas con un solo cartucho) como vía Wi-Fi con código de amigo o conectándose a la red de Nintendo, lo que sin duda añade un extra más al hecho de poder disfrutar de este título con otros jugadores en cualquier parte del mundo, aunque lo normal es jugar con algún conocido.