Fated: The Silent Oath cuenta la historia de un padre de familia vikingo un poco ateo, que a las puertas de la muerte tiene una visión de una valkyria, que a cambio de su voz le devuelve a la vida, interesante forma de justificar que en la realidad virtual no podemos hablar (aún). Estos acontecimientos le darán una nueva perspectiva de la vida, efectivamente, el Valhalla existe, nada como una experiencia cercana a la muerte para empezar a creer.La historia es interesante, muy apta para todos los públicos, tal vez para los más pequeños (si hablan inglés).
El juego es completamente lineal y muy predecible, es muy interesante vivirlo en VR,
y más teniendo en cuenta que no hay muchas experiencias similares, pero es una pena que no sea más interactivo. El hecho de mover las manos es casi anecdótico, no se le ha sacado partido apenas.