El Señor de los Anillos: La Batalla por la Tierra Media 2 - Análisis PC

Hace unos 15 meses tuvimos la suerte de que la leyenda se convirtiera en juego, y los fanáticos de El Señor de los Anillos pudimos disfrutar como locos de las campañas del bien y del mal de la primera parte del título que nos ocupa, recreando la licencia de Peter Jackson. Pudimos jugar en red y por Internet, pudimos bajar mapas y mods surrealistas que nos permitían elegir nuevas razas como los elfos o cantidades inagotables de unidades.
A los pocos meses de triunfar el juego nos llegó la noticia de una segunda parte, aderezada con la adquisición de los derechos de los libros que poseía Vivendi por parte de EA.

Ahora ante la impasible mirada fotorealísta de los Argonath podemos afirmar con rotundidad que la leyenda se ha convertido en mito. Las impresiones de este juego las definimos con la siguiente frase: Hay mucho que ver y mucho más que temer. Sí, he de reconocer que no es una frase muy original, puesto que está tomada directamente del vídeo de introducción de la demo. Pero refleja muy bién lo que representa este juego. Desde luego esta segunda parte viene mucho más cargada, cinco gigas y medio de nuestro disco duro son testigo de ello. Para empezar, todos los bandos han visto incrementado sus tipos de unidades, su número de héroes y algunas novedades que comentaremos a continuación.

La no demasiado efectiva Rohan se ha unido a la implacable Gondor, formando ahora el bando de Los humanos. Aragorn, Eowyn, Theodern y Eomer ya pueden luchar junto a Faramir, Boromir y Gandalf; desapareciendo de este bando los héroes de la comunidad que no son humanos.

A Mordor se le han unido los Corsarios; y los Haradrim ya no sólo irán a lomos de los olifantes. En cuanto a Héroes también es un bando importante, pues encontramos, a tres Nazgul, dos bestias aladas, la boca de Sauron y el rey Brujo.

Isengard ahora tiene la capacidad de Gondor de construir murallas, aunque más adelante hablaré de ello, ya que es un punto muy importante en este juego.

Hasta aquí todos los bandos conocidos de la primera parte de esta batalla por la tierra media. Vamos con las novedades:

Cuando echaron a Légolas de Rohan, este fue corriendo y llamó a sus amigos Elfos, entre ellos los siguientes héroes: Glorfindel, Haldir, Arwen, Thranduil y Elrond y con ellos sus construcciones delicadas, bellas y resistentes; y un modo de juego menos ofensivo pero que bién gestionado puede volverles una raza ganadora.

Gimli no podía ser menos y trajo a sus congéneres enanos, con unidades más pequeñas pero no menos destructivas, sobre todo ante estructuras enemigas (donde se encuentre un buen muro de piedra para picar ya sea de Gondor, Isengard o sobre todo Elfo?) y como no con sus héroes: Gloin (el padre de Gimli) y el rey de los enanos Dain.

Los goblins, hartos de ser personajes secundarios, llamaron a su rey Gorkil, quien rápidamente se puso en contacto con Shelob (Ella Laraña)) y Drogoth, el Señor de los Dragones (una de las unidades más impresionantes del juego). Este bando, al igual que Mordor, se queda sin poder construir murallas, aunque a cambio disfrutará, aparte de estos héroes, de otro tipo de alimañas, como las arañas, los goblins-araña y los gigantes ( más grandes que los Trolls).

En definitiva, tenemos 6 bandos, que en este juego se moverán principalmente en pos de un objetivo: El anillo único.

A todos los héroes tendremos que unir dos nuevos tipos de héroes, estos son los héroes personalizados, que podremos crear con el editor de héroes que encontraremos en el juego y por otro lado los héroes del anillo, que son sólo dos, uno para los bandos del bién y otro para los bandos del mal, en concreto Sauron y Galadriel finalmente no fue Isildur (no podía ser humano). Estas dos unidades son espectacularmente fuertes y sin duda pueden girar el desarrollo de una batalla con sus tremendos poderes.

Si, el juego nos promete que hay mucho más que temer, pero realmente debería decir que hay mucho más que admirar. Hay tanto, que aunque las campañas se acaban realmente rápido, tendremos para divertirnos con las batallas rápidas. La otra vez funcionó, y en esta funcionará.

El anterior título gozaba de una adicción envidiable, y no solo la han mantenido sino que con las nuevas adiciones han conseguido rozar la perfección. Las campañas del bién y del mal nos cuentan lo que pasó después del Concilio de Elrond, cuando se formó la comunidad del anillo, pero por la zona de las tierras del Norte. No son campañas demasiado largas y tampoco son demasiado difíciles, así que podremos acabarlas sin problema, cada campaña puede durar unas 10 o 12 horas.
Así que una vez terminadas las campañas toca disfrutar del verdadero aliciente del juego, que son las partidas multijugador, ya sea online o en red local; aunque ahora todo parece más equilibrado la sensación de que los bandos del bién son más poderosos persiste. Aunque todo es cuestión de estrategia y de una correcta administración de recursos; muy probablemente aparezca un parche dentro de poco donde estén solucionados este tipo de desequilibrios y algún que otro bug que comentaré en técnica.

En esta ocasión el anillo de poder juega un papel muy determinante en el desarrollo de las partidas, quién lo posea y sea capaz de mantenerlo tendrá una baza que puede girar la partida a su favor.
El anillo lo lleva Gollum, quien sigilosamente campará aleatoriamente por la zona de juego, es muy sigiloso, por lo tanto para poder verlo habrá que pasar muy cerca de él.

Si tras verlo no se te escabulle y consigues matarlo, aparecerá el anillo en pantalla. En ese momento, todos los jugadores de la partida podrán ver la posición del anillo en sus mapas y quién lo lleva. Os aseguro que se montan unas batallas en torno al anillo increíbles, puesto que en ese momento la mayoría de los jugadores lanzan todo su arsenal de batallones y héroes en busca del anillo. Bueno, quien se lleve el anillo a su fortaleza podrá crear a alguno de los dos ansiados héroes del anillo, como dije antes Sauron y Galadriel.
Puede pasar que nuestro héroe del anillo muera en batalla, entonces pasará igual que cuando Gollum muere, el anillo vuelve a quedar en el campo de juego visto por todos esperando a ser recogido. Sin duda un aliciente muy interesante que aumenta considerablemente la adicción

En el menú encontraremos otro tipo de juego totalmente novedoso y que nos recuerda bastante al Rome: Total War, es la Guerra del Anillo, en él podremos jugar a un sencillo juego de estrategia por turnos, muy similar al Risk con objetivos también muy similares:
Conquistar todos los territorios, conquistar un número determinado de territorios, conquistar el territorio principal del contrincante.

Durante cada turno tendremos tres fases, una primera de planificación táctica, otra de batalla y la tercera de retirada.
En un mapa viviente podremos ver los territorios y las unidades que vamos creando sobre él. Y podremos acercarnos más para ver los detalles de cada territorio, como las construcciones que vamos haciendo. Si si, construcciones, además de batallones podremos construir recursos para crear ejércitos, cuarteles de entrenamiento para mejorar las habilidades, fortalezas de la que podremos invocar héroes.

En la fase de batalla se nos dará la oportunidad de hacer la batalla en tiempo real, o dejar que se resuelva automáticamente. Si elegimos automáticamente, la partida se decidirá en función de las unidades que participen (y sobre todo los héroes). Y si elegimos la batalla en tiempo real jugaremos una escaramuza empezando con las unidades que teníamos, pudiendo invocar solamente al héroe que hubiera en dicho territorio y con dos constructores.

Una jugabilidad inmejorable que se ha mantenido intacta a pesar de ser la segunda parte, y además se ha visto reforzada gracias a muchas mejoras y novedades.

Puede que alguien tenga la sensación de estar jugando al primer juego, y en ese sentido aquí podríamos entrar en el debate de la cuestión ¿se debe cambiar algo que funciona?. En cualquier caso, y siguiendo el argumento de la frase de la que hablábamos antes. El juego no es distinto, es igual, pero con más cosas y por supuesto con innumerables mejoras. (hay mucho más que temer).
Para empezar, uno de los pilares de la jugabilidad, lo encontramos en la construcción de estructuras, ya no estamos limitados a los zócalos que tenía cada una de las fortalezas, ahora podremos construir granjas, serrerías y cuevas donde queramos, teniendo en cuenta que si situamos una granja cerca de otra, una le quitará los recursos a otra, bajando así el porcentaje de recursos obtenidos por ambas granjas.
Un número sobre la granja antes de colocarla nos indicará el porcentaje de recursos totales que obtendrá ésta si es construida en tal sitio. Las serrerías igualmente se limitarán a zonas con árboles.

Como ahora podremos construir estructuras donde queramos, las anteriores murallas en círculo o cuadrado pasarán al olvido; ahora podremos construir murallas donde queramos y donde el terreno nos lo permita, dando un grado más a la estrategia del juego.

Las murallas se unen por nodos de los cuales pueden salir murallas en cualquier dirección siempre que no se solapen entre ellas, permitiendo construir las fortalezas más enrevesadas que podamos imaginar.
Y según que bando tengamos podremos construir sobre las murallas torres de arqueros, catapultas o gigantescas torres de defensa.
Para equilibrar un poco esta posibilidad de poder construir murallas masivamente, aparecen unidades con la capacidad de treparlas y poderes especiales que pueden destruir todas las construcciones en un radio, como terremotos y lluvias de meteoritos.
Así mismo, las unidades de asedio se han vuelto ligeramente más fuertes contra las construcciones.

Otro de los elementos que ha cambiado considerablemente es la cantidad de unidades por batallón, y la gestión de las mejoras de batallones también ha variado ligeramente, sobre todo en precios, parece que han equilibrado un poco más la cosa. También se ha visto beneficiada la IA de los batallones, estos se desenvuelven mejor en batalla y tienen comportamientos más positivos, permitiéndonos gestionar más tranquilamente otras cosas mientras hay una batalla. Si antes hemos configurado su postura de ataque, defensa o intermedia, estos responderán a su configuración sin comportamientos extraños que podíamos ver en la primera parte.

Los Héroes
Muchos más héroes para todos los bandos, si en la primera parte ya nos parecieron importantes los héroes , no os quiero decir nada de qué pasa en esta; sobre todo porque en los modos de batalla rápida y partida online o red local tendremos que seleccionar a un héroe adicional.
Dicho héroe lo podremos crear a nuestro gusto en el apartado de Mis Héroes. Aunque el aspecto no se puede personalizar demasiado (en plan Sim) si que se pueden personalizar enormemente sus poderes.
Una interesante tabla con una lista de niveles con hasta 4 grados de potencia (no todos los poderes tienen cuatro grados de potencia, y algunos poderes sólo se pueden seleccionar en los grados más potentes por ser poderes de mayor nivel). Tendremos que seleccionar hasta un máximo de 5 poderes y tendremos 10 zócalos en total para subir de nivel un poder que ya tengamos.

Los poderes son muchos de los ya conocidos de los héroes ya existentes, aunque los podemos llevar al extremo si utilizamos bién nuestros 10 zócalos. Tenemos todo tipo de poderes, en nuestra mano está cómo gestionarlos, también podremos elegir entre 14 tipos diferentes de personajes: Capitán de Gondor, Doncella guerrera, arquera o arquero elfo, Vagabundo, Avatar, Ermitaño, Sabio o Capataz Enano, Troll, Saqueador orco, Uruk, Oriental y Haradrim.

Luego, además de los poderes también tendremos que repartir puntos de experiencia entre las habilidades básicas: Armadura, energía, campo de visión, velocidad de curación y salud. Si no nos aclaramos podemos pedir consejo para repartir dichos puntos automáticamente.
A lo largo de nuestra andadura por las partidas online o locales si habíamos empezado con un grotesco Troll ultrapoderoso o un apuesto capitán de Gondor parecido a Beckam; seguramente acabaremos con un mago, quienes tienen los poderes más devastadores que podemos encontrar entre todos los héroes, entre ellos están el poder cambiar de bando a todos los enemigos dentro del radio de acción, vital si lo usamos en mitad de una batalla decisiva. Poder teletransportarse a cualquier parte del mapa. Y el haz de luz de Gandalf podremos llevarlo a un nivel superior, pudiendo casi aniquilar a cualquier héroe que se nos cruce.

Podremos capturar instantáneas de nuestros héroes posando, para poder usarlas como tarjetas de presentación ante una inminente partida online. En la foto os presento a Epheroth, mi Avatar, combinándolo con Gandalf he logrado auténticas proezas.
Como detalle interesante, decir que cada uno de los héroes sólo podrá pertenecer a los bandos bueno o malo, excepto los magos, en este caso los: Vagabundos, Avatares y Ermitaños como magos podrán ser de los buenos o de los malos.

Se han añadido algunas acciones que tal vez afecten un poco a la jugabilidad, como por ejemplo, cuando destruimos una guarida de alimañas del mapa, tendremos que volver a destruir sus ruinas para que desaparezca completamente y así poder coger el valioso tesoro. Si un héroe se encuentra en posición de ataque y está cerca de una estructura irá a atacarla (sobre todo si es enano), sin embargo las ruinas de una guarida no serán atacadas, teniendo en cuenta los tesoros que esconden las ruinas no es una actitud muy favorecedora, así que tendremos que encargarnos de ello nosotros mismos.

Aunque hay más contenido y novedades, la sensación de estar jugando prácticamente al mismo juego está presente; si encima no nos gusta usar los barcos y apenas gastamos recursos para construir murallas así será.

Este tipo de juego ha sido trillado hasta la saciedad, la franquicia del señor de los anillos igualmente ha sido y será explotada hasta la saciedad. Aún así todos los fanáticos de ambas cosas soñábamos con este juego, tiene más calidad en todos sus aspectos, técnicamente es mejor, la IA está muy mejorada, tiene más bandos que ningún otro juego del género. Su jugabilidad y originalidad rozan la perfección. Todos estos elementos tan positivos nos dejan un producto lejos de la originalidad deseada.

En el difícil ámbito de las versiones de juegos para película encontramos un elemento que sin duda si que aporta originalidad o por lo menos no limita al producto.
En el juego podremos ver más cosas que no habían en la película, y sacadas directamente de los libros (licencia que era antes de Vivendi). Esto nos trae nuevas historias y batallas que de hecho son las que sirven de fundamento para las campañas del bien y del mal.

El control de estadísticas que ahora nos da información muy detallada en una línea de tiempo es genial, muy útil para mejorar nuestro modo de juego.
Poder ver las partidas guardadas (no las de las campañas), también es un elemento muy original y útil, aunque se echan mucho de menos controles de tiempo en las partidas guardadas, para poder avanzar más deprisa, rebobinar o parar la reproducción, ya que muy probablemente querremos ver después de una partida en red o online qué pasó en determinado momento con nuestro héroe cuando salió volando despedido unos 30 metros , o ver de dónde salió ese Avatar que nos atacó por la espalda destrozándonos las catapultas que aguardaban en retaguardia.

También podemos disponer de un potente editor de niveles (aunque en estado beta).Con este y un par de consejos sacados de la web oficial podremos hacer sin no muchos problemas nuestras propias arenas de juego.

Por último un elemento que me parece super original son la lista de logros que nuestro héroe puede conseguir, como matar a tal héroe o tal otro, etc. Y además, dichos logros los podemos comparar con el resto de jugadores por Internet.

El juego ofrece todo lo que estábamos esperando. Aunque nos estamos insensibilizando ante los avances técnicos, no podemos negar que el trabajo es impresionante, y gracias a las repeticiones de las partidas disfrutaremos de unos efectos, iluminación, texturas, dignos de ser contemplados.

Este apartado era la principal baza que esperábamos todos para esta segunda parte, y sin duda queda a la altura de las espectativas. El número de polígonos de los personajes es mucho mayor, lo que los dota de animaciones mucho más convincentes que la primera parte. Eso si, no son de demasiada calidad, más que nada porque en pantalla habrá cientos de elementos y los PC de ahora aún no alcanzan a las Xbox360.
Las texturas son de más calidad.

El efecto de agua es genial. Así como los fuegos, explosiones rayos. Si antes eran impresionantes, únele ahora la calidad que pueden ofrecer las tarjetas más modernas. Mala noticia, porque el juego necesitará una tarjeta potente si queremos poner al máximo todos los detalles del apartado gráfico.
La iluminación global es genial, y la sombra, aunque cuando nos acerquemos veamos los cuadros, es increíble. Todos los objetos lanzarán su sombra, incluso entre ellos.

Adivina quién pasa por encima mirando solo su sombra.

La construcción es genial, nuestras murallas se adaptarán al terreno siempre dentro de lo posible, los edificios son increíbles, con muy buenas animaciones de cómo se construyen, aunque parece que algunas animaciones se pasaron por alto, como las catapultas o las torres en los muros de los humanos.

Jugueteando con el editor de niveles me dí cuenta que se podía añadir factor de arder al terreno. Luego jugando comprobé que efectivamente las magias, o golpes de asedio , o poderes de dragones incendian todo lo que toca y sea propenso de arder. Así por ejemplo, un dragón en un bosque puede resultar fatal para las unidades que estén cerca.

No lo he dicho antes pero después de ver la imagen os aliviará saber que los constructores además de construir edificios pueden apagar incendios.

Algún que otro bug he encontrado en ese sentido , y es que según la morfología del terreno se puede dar el caso de que el fuego no se acabe nunca.
También algún error parecido he encontrado usando poderes de héroes especiales. Algunas unidades al cambiar de bando por influjo de una maldición quedan sueltas y pasan a no pertenecer a nadie, col lo cual su posición en el mapa será imperecedera hasta que mueran.

Del sonido ni hablamos, aunque eso si, la gran mayoría de los sonidos permanecen. ¿para qué cambiarlos?. Los nuevos bandos disfrutan de sonidos de la misma calidad a los ya existentes.
Los sonidos de ambiente están mucho mejor, ricos en detalles y perfectos para sumergirnos en la partida.
La banda sonora no ha cambiado en absoluto. Detalles estos que nos harán sentir estar con el mismo juego, hasta que nos dé por mirar la pantalla....