Análisis Death's Door - Una divertidísima puerta mortal a un mundo que mereces descubrir

Terminar Death's Door nos llevará en torno a las 6 horas de juego, un par más si queremos conseguir todos los secretos ocultos en los escenarios. La acción funciona muy bien y el juego nos engancha con facilidad desde el principio con varias armas: una estética muy cuidada, un desarollo original y diferente, pero sobre todo mucho sentido del humor (ácido y paródico), lo que ayuda a avanzar y disfrutar de la experiencia.

El problema viene con la rejugabilidad, que no es demasiado alta; no hay elementos de peso que justifiquen una segunda vuelta, y aunque el precio de lanzamiento es bastante competitivo (menos de 20 euros) nos hubiera gustado encontrar algún extra adicional para disfrutar de una segunda vuelta, aunque sea en un futuro.

Con un desarrollo de acción, aventura y puzle bien equilibrado, Death's Door puede presumir de ser un juego realmente entretenido y en el que se disfruta de cada paso en la exploración, aunque también hay que reconocer que no se ha conseguido la excelencia en ninguno de estos apartados. La exploración no es nada rompedor, los puzles son sencillotes (e incluso acaban haciéndose un tanto repetitivos) y si bien la mecánica de combate es muy sólida, la falta de variedad de los enemigos hace que muchos duelos se vean como algo obligatorio y repetitivo... salvo los jefes.

Los enfrentamiento contra los grandes enemigos del juego están entre los puntos más brillantes del título, y son otro de los reclamos para seguir avanzando (y disfrutando). Suponen un pico de dificultad, nos obligan a explotar las mecánicas de combate (como los esquives y golpes) y a esforzarnos para demostrar todo lo que hemos aprendido. No os vengáis abajo si os tumban algunas veces...

Otro de los puntos fuertes de Death's Door resultan lo original y sorprendente que resulta, desde su arranque hasta su emocionante final. El título consigue meternos de lleno en un mundo muy particular - con sus propias reglas y personajes - de una forma muy intuitiva, y sin entrar en spoilers, tanto la trama como los héroes saben desarrollarse muy inteligentemente, y engancharnos dejándonos ganas de más.

Por supuesto, el sentido del humor (y la genial dirección artística) ayudan muchísimo a darle personalidad e identidad al título, que tiene además elementos como diarios secretos, coleccionables, mejoras para nuestro héroe... Todas se han escondido muy bien gracias a un uso muy inteligente de la cámara isométrica del juego.

A nivel visual, Death's Door puede presumir de tener una brillante dirección artística y una gran puesta en escena, tan imaginativa como desbordante de personalidad. De esta manera, aunque no hablamos de un portento visual - el juego bien podría haber pasado por un título de la generación anterior - el aprovechamiento del arte, los efectos de combate y la total falta de problemas técnicos hacen que luzca mucho más (y mejor) que otras propuestas más ambiciosas, pero también más irregulares.

En el apartado sonoro nos encontramos también una gran banda sonora que redondea la acción y la exploración, de una forma muy inteligente, usando estupendas composiciones para cada situación. Los textos en castellano son la guinda perfecta para que todo tipo de jugadores puedan disfrutar de la experiencia (y sentido del humor del juego)