We Love Golf!. Análisis Wii

Camelot (los genios creativos que están detras de Golden Sun y Mario Golf, entre otras sagas) y Capcom unen fuerzas para traernos We Love Golf, un título deportivo tan divertido como colorista.

Sensiblemente mejorado para su lanzamiento occidental, el título apuesta muy fuerte por convertirse en el mejor título golfístico de Wii... ¿Lo habrá conseguido?

A nivel jugable We Love Golf se decanta por la mecánica arcade típica de la saga Mario Golf. En lugar de apostar por un control directo, un aprovechamiento de las capacidades únicas del mando para transformarse en 'palo de gol' se ha optado por adaptar el control de Mario Golf a un sistema de movimientos. Tenemos nuestra barrita de carga, que comenzará a cargar cuando le demos hacia atrás (el gesto de coger fuerza) y pararemos cuando 'disparemos'. No nos malinterpretéis, el sistema funciona estupendamente - de hecho, en muchos aspectos hablamos del título golfístico más divertido y jugable del catálogo de Wii -, pero no emula lo que sería jugar al golf, no hay una transformación 1:1 de nuestros movimientos (lo mismo tenemos que esperar a la segunda parte y al Wii MotionPlus...

We Love Golf no es un título corto ni falto de posibilidades; tenemos un buen montón de personajes que desbloquear (para lo que tendremos que vencerlos en el campo), 8 disfraces ocultos (que se obtienen completando retos), 8 circuitos largos y con 'trampas' exclusivas (y 3 mini-circuitos para otros modos, como el vs., de hasta cuatro jugadores), modos de juego distintos - como 'atravesar anillos'... Pero sin duda la gran baza a la hora de sumar horas de juego es el modo online, que funciona sorprendentemente bien; podremos jugar con un amigo vía Códigos de Amigo (y utilizar los personajes normales o Miis) o competir con usuarios de todo el mundo (a 9 hoyos) y 'ganar medallas' con cada victoria.

Los 'trajes' de personajes famosos de Capcom son un acierto por partida doble; por un lado atraen a los muchos fans de las franquicias de las compañías; y es, aunque no influya en el desarrollo de los juego, no es lo mismo golfear con personajes anónimos que con Ryu, Chun-Li, Jill Valentine, Apollo Justice, Sir Arthur... Además, esto sirve para darle una identidad propia al título y que destaque en la marejada de entregas golfísticas que estamos recibiendo (especialmente en la consola de Nintendo), donde si no fuera por esto el título naufragaría.

Así, la innovación es el punto más débil del juego; We Love Golf es un híbrido extraño entre Mario Golf y Pangya! - aunque con el enfoque arcade del título del fontanero - y aunque tiene sonoros aciertos, como ser el primer juego de golf de Wii en contar con modo online, no consigue destacar demasiado por ello.

A nivel técnico nos encontramos con un juego correcto con algunos momentos brillantes; el punto más fuerte son los escenarios y efectos para los golpes, mientras que los golfistas, aunque simpáticos, no pasarán a la historia por su modelado o animación.
Las melodías normales, ambientan a la perfección pero sin alardes ni composiciones para la historia; los FX son más correctos y simpáticos.

El aprovechamiento de Wii, notable (alto); es cierto que el control podría haberse adaptado más a las capacidades del mando, pero se ha optado por un sistema arcade y, sinceramente, funciona muy bien. El modo online - en una consola completamente desaprovechada en este aspecto - es digno de elogio.
Cierra una correcta edición PAL el selector de 50/60 Hz y el modo EDTV/HDTV, que junto a la traducción al castellano son siempre de agradecer.

Con un buen montón de cosas por desbloquear, 8 largos circuitos y múltiples posibilidades multijugador, We Love Golf! es posiblemente el juego más completo en su género en Wii, aunque no pueda con la competencia...

Apostando por el arcade los chicos de Camelot han construido un juego divertido, fácil de jugar y lleno de posibilidades. Vale, no es el mejor ejemplo de uso del mando de la consola, pero sí el juego de golf más entretenido hasta la fecha

Si no fuera por los disfraces y el distintivo Wi-Fi el juego no tendría identidad ninguna...

A nivel gráfico y sonoro el juego cumple sin alardes, presentando un acabado agradable, colorista y llamativo. El online está sorprendentemente bien implementado.