Cuando vimos por primera vez
Remember Me hace unos años se nos hizo la boca agua con el potencial del juego; la idea de una especie de
Assassin's Creed ambientado en un futuro donde la información ha dado un nuevo paso evolutivo y ahora permite
manipular las recuerdos era francamente tentadora. Ahora, tras haber probado a fondo el título estamos con una sensación un poco agridulce, porque no se han cumplido todas estas promesas...
Remember Me nos mete en la piel de
Nilin, la mejor
Cazadora de Recuerdos de
Neo Paris, que - irónicamente - comienza el juego amnésica, lo que nos permitirá ir
recordando con ella sus portentosas habilidades, tanto para el combate como a la hora de meterse en las cabezas de sus enemigos. La idea es muy buena y
funciona especialmente bien en el sistema de combate con combos editables, un pequeño
regalito para los fans de los juegos de acción con toques de lucha. Nuestra heroína puede tener varios tipos de combos editables activados, y con ellos causar un daño masivo a los enemigos, atacar a distancia, curarse... Hay opciones más arriesgadas y difíciles - pero también más efectivas - y otras más
seguras, y nosotros somos los que tenemos que elegir cómo luchar. Aunque puede parecer un poco lento y pobre en posibilidades al principio, el sistema de combos pronto da sus frutos, combinado con distintos tipos de enemigos con variados patrones de ataque.
Por contra, no está tan bien resuelta la mecánica de manipulación de recuerdos (obligatoria para avanzar, si no solucionamos un
puzle no podremos seguir con la aventura, ni encararlo de otra forma), que resulta bastante artificial. La idea es
cambiar pequeños detalles en un recuerdo concreto para llevarlo a otras conclusiones y engañar así a nuestra vícticma, y aunque sobre el papel suena genial - por ejemplo, hacerle pensar que lleva una pistola cargada en lugar de descargada, para que crea que ha matado a alguien al que solo amenazaba - en la práctica
acabamos viviendo una especie de vídeos mínimamente interactivos que tenemos que revivir una y otra vez experimentando con cada cambio, muchas veces sin demasiada lógica.
Entre los puntos menos
elaborados del juego también está la libertad de exploración en las distintas fases; lo que podría haber sido un título abierto y con un desarollo poco lineal (con la moderna ciudad de Neo Paris a nuestra disposición) se ha convertido en un juego muy lineal, en el que sólo tendremos algunas bifurcaciones del camino para encontrar mejoras para Nilin. No nos malinterpretéis, no tenemos nada en contra de los desarrollos arcades, pero con una ambientación y una puesta en escena tan cuidadas nos hubiera gustado tener al menos un nievel central / nexo de unión de fases que recorrer a nuestro gusto.
Sin llegar a ser un juego corto (ni largo, hablamos de unas 6-12 horas dependiendo de nuestra forma de jugar, si vamos
a saco o nos gusta explorar y disfrutar de la aventura),
Remember Me pincha un poco en cuanto a su vida dentro de nuestra consola. ¿El problema? Que cuando terminemos la aventura no hay elementos
de peso (más allá de niveles de dificultad alternativos) que justifiquen una segunda vuelta al juego. Tampoco se ha apostado por el soporte online, ni hay opciones
multi que sumen horas o posibilidades al juego... Esto puede hacer muy cuesta arriba a los posible compradores de
Remember Me el comprarlo en las primeras semanas de lanzamiento, a precio completo... Y muy tentador esperar algunas semanas para encontrarlo aun precio más ajustado y acorde a su oferta.
Para concluir, el apartado técnico coincide con el resto de la valoración del juego; luces y sombras, con ventaja para las primeras, pero siendo imposible olvidarnos de las segundas. Como estrellas tenemos buenos modelados, animaciones y una genial puesta en escena (potenciada por un doblaje en castellano), pero como pegas hay una texturación pobre, fallos de cámara, tirones en alguanas zonas, una IA enemiga más bien pobre...