El juego divide los tipos de coche en cinco categorías que son carrera, derrapes, todoterrenos, sprint y evasión. Cada uno fuerte en su terreno y bastante ineficaz fuera de él, así si nos metemos por caminos de tierra o el campo con un coche de otro tipo distinto al todoterreno notaremos que no tenemos agarre, o si intentamos hacer buenos derrapes con un vehículo no adecuado nos será bastante complicado. Siguiendo la filosofía de la saga, el carácter de juego es claramente arcade, premiando por encima de todo la espectacularidad y la diversión a la conducción real, los momentos de persecución son sin duda los más divertidos y las tomas a cámara lenta de la destrucción de los coches de policía o perseguidores son muy espectaculares.
El juego ofrece el modo historia y el multijugador como opciones de juego, y aunque ambos cumplen tienen una serie de problemas que deslucen el resultado final. El modo historia cae demasiado pronto en la monotonía y el multijugador no está bien planteado dando lugar a carreras muy descompensadas por la diferencia de nivel de los coches. El número de coches disponible ronda los 80, número inferior a lo que ofrecen la mayoría de la competencia.