Análisis The Last of Us Parte I - Revive un viaje increíble e inolvidable en PC y PS5

Si bien la duración base de The Last of Us: Parte 1 ronda las 15 horas (+ 3 con el contenido extra de Left Behind), igual que en el original, se han acortado las opciones jugables al eliminar el modo multijugador online, que era un añadido muy de agradecer y nos permitía experimentar más a fondo con el combate, con un competitivo de 8 jugadores. Naughty Dog está centrado en una experiencia multijugador competitiva basada en la franquicia que lanzará como juego en solitario, y se ha olvidado de adaptar el clásico, o de experimentar con un cooperativo, que podría haber funcionado muy bien...

Por contra, todo en la historia es ahora más interesante y atrayente, y se han hecho malabares para hacerla todavía más interesante y adictiva, añadiendo nuevos y mejores trofeos, más coleccionables y muchísimo contenido extra, incluyendo un modo con muerte permanente y otro preparado para speedrunners. Otro punto brillante es cómo se ha adaptado el juego para hacerlo accesible a todo tipo de jugadores, desde aquellos con diferenciación visual o auditiva a los que buscan más o menos violencia en el resultado... Sigue siendo un título para adultos (tanto en lo jugable como en lo impactante de la historia), pero se ha vuelto un referente a seguir en las opciones de personalización.

A nivel jugable The Last of Us: Parte 1 sigue siendo un título sobresaliente que auna con maestría acción, exploración y supervivencia en un mundo tan realista como hostil, en el que detrás el reinado de la violencia y el terror todavía hay lugar para la belleza y la esperanza (algo que podemos ver todavía más claro con el nuevo motor gráfico y el mejorado modo foto). Naughty Dog ha mantenido la base de los combates pero los ha pulido un poco más incorporando algunas de las novedades de Parte 2 (no queremos entrar en spoilers, son pequeñas sorpresas que encantarán a los fans), consiguiendo un resultado francamente sobresaliente. Incluso la IA aliada es ahora mucho más real, y aunque todavía hay algún fallito puntual en su actuación, el resultado es brillante.

Igualmente brillante es la inclusión del DualSense para transmitirnos la sensación de golpear o disparar a nuestros enemigos, aprovechando las posibilidades hápticas del mando, como la resistencia en los gatillos cuando disparamos con el arco o hacemos uso de un arma de fuego. Todo funciona a las mil maravillas, y el increíble diseño del original se ha respetado a la perfección para transmitir todas las emociones que nos desbordaron en 2013...

Hace casi 10 años Naughty Dog nos asombraba llevándonos - y metiéndonos de lleno - en el terrible mundo de The Last of Us, que se convirtió por méritos propios en una de las cabezas del TOP 10 de PS3. En el primer año de vida de PS4 Sony aprovechó la mayor potencia de la consola para remasterizar el ambicioso título con resultados excelentes. Ahora, aprovechando el motor gráfico de la secuela y con la mirada puesta en PS5 y PC nos llega The Last of Us: Parte 1, un re-remaster - o remastermake, si lo preferís - que hace todavía más espectacular y sorprendente la experiencia.

El juego base sigue siendo idéntico, la increíble y conmovedora aventura de Joel y Ellie no ha cambiado ni en una coma (gracias al cielo), pero es más espectacular y jugable que nunca; el peso está en el apartado gráfico, aunque hay un puñadito de mejoras jugables y, sobre todo, más contenido para que los fans disfruten todavía más de la experiencia. Es, sin duda, la mejor versión para jugar este título, aunque su precio ahoga un poco el que lo recomendemos a los más fanáticos, y hay que valorar también que el Remaster de PS4 está gratis para los usuarios de PS5 con el PS Plus Collection...

Sin duda el punto más brillante y sobresaliente de The Last of Us: Parte 1 ha sido el lavado de cara visual, aprovechando el motor - mucho más potente - de la secuela, multiplicando el nivel de detalle y puliendo todos los aspectos del original. El resultado es francamente sorprendente, con momentos absolutamente impactantes (la expresividad de las caras, desde la desesperanza en Joel a la inocencia en Ellie, o los escenarios, más vivos que nunca... La forma en la que reaccionan los enemigos, elementos como los desmembramientos...). Aunque el salto entre las versiones no sea tan grande, es toda una experiencia en lo visual al estilo de lo que han supuesto Resident Evil 2 o Final Fantasy Remake, y uno de los títulos más bonitos y espectaculares del catálogo de PS5.

La banda sonora sigue siendo espectacular, el trabajo de Gustavo Santaolalla suena tan bien como el primer día, y uno de los aspectos que criticamos del original (el uso del sonido envolvente, que nos hacía tener que perseguir a los NPC para no perdernos las conversaciones) funciona ahora mucho mejor, de una forma mucho más natural. Muy recomendable disfrutarlo con auriculares 5.1, y no perderse nada, desde el increíble sonido de las zonas abiertas al impresionante doblaje al castellano.