Quizá el punto más flojo de
Super Mario Maker 2 sea lo original que resulta, y no porque no sea una buena secuela (que lo es), si no porque falta un elemento que sea realmente sorprendente o revolucionario. La mayor novedad podría ser el multijguador - online -, pero a
Nintendo le ha faltado empuje y opciones en el lanzamiento, y tampoco ha sabido explotarlas en modo local (lo que también hubiera sido un gran acierto). Así que básicamente se ha apostado por el
más y mejor, sumando más elementos, opciones y estéticas (como la de
Super Mario 3D Word, aunque el desarrollo de los niveles siempre es 2D).
Con todo, como secuela hablamos de un título más que digno, y se añaden elementos más que suficientes para calmar las ansias de los jugadores más creativos, e incluso más opciones para los que disfrutan creando y compartiendo. En las primeras semanas hemos podido ver composiciones realmente asombrosas, y a esto ayuda también
el poder contar con un tutorial mucho más completo, y un interesante modo historia para hacernos con la mecánica
creativa.