A nivel jugable nos encontramos el corazón de
Street Fighter V, que ya era una bomba, enriquecido con nuevas opciones, nuevos personajes que dan mucho juego y un sutil - pero profundo - reequilibrado de la jugabilidad, que nos mantendrá muchas horas pegadas al mando: mejorando, aprendiendo combos, estudiando tiempos, perfeccionando ataque y defensa... Vamos, convirtiéndonos en auténticos maestros de la lucha virtual.
El único
pero que podemos poner son los
V-Triggers 2, que en lugar de sumarse a los ya disponibles (dándole todavía más profundidad y estrategia a los combates) son una opción frente a los habituales. Por supuesto, se agradecen las novedades, pero aquí nos hubiera gustado
sumar, en lugar de simplemente elegir.