La base de la saga sigue fuertemente asentada. Eso sí, sin novedades, y entre los pocos cambios introducidos no todos son aciertos.
Hay 2 formas de cambiar el sabor de un plato: cambiar los ingredientes, o cambiar al cocinero; y si bien es la primera la que da más variedad,
Namco se ha decantado por la segunda.
El sistema de control básico de la saga ?SoulCalibur? sigue estando vigente; el golpe lateral, el golpe rápido, la patada y la guardia (con posibilidad de contraataque) siguen siendo la clave para ganar todos los combates. Por supuesto, sigue habiendo numerosos agarres, combos y golpes especiales que enriquecen el sistema de ?piedra-papel-tijera? o ?golpe rápido ? golpe fuerte ? patada?.
Sin embargo, no hay cambios ?sustanciales? en la jugabilidad. No debe extrañarnos, porque en ?SoulCalibur II? se limitaron a añadir paredes; en esta entrega, las novedades jugables pasan por:
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Cambio en el manejo de muchos personajes: todo el elenco de personajes ha sufrido reformas, en mayor o menor medida y en busca de un mejor equilibrio. Sin embargo,
ciertos personajes (como
Taki o Ivy )
han sido totalmente ?remodelados?, por lo que los jugadores veteranos poco podrán hacer con ellas en sus primeras partidas. Estos cambios pueden ser un gran acierto, pero habrá un gran porcentaje de jugadores al que no le haga demasiada gracia unos cambios tan radicales. Sobre todo porque, si tanto había para cambiar, casi mejor haber creado más personajes nuevos y haber respetado algo más a los antiguos.
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Tres nuevos personajes :
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Setsuna, una chica armada con una sombrilla que esconde una peligrosa ?kodachi? (katana corta). No es un personaje intuitivo, pero sus combos son demoledores.
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Tira, una fiera asesina que compensa su falta de fuerza con una velocidad letal y especiales muy versátiles.
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Zasafel, un potente guerrero armado con una guadaña. El gran alcance de su arma y su resistencia lo convierten en un enemigo a evitar. Esconde un peligroso secreto?
A estos tres ?recién llegados? tenemos que añadirle el que sin duda es el mayor atractivo de esta entrega ? y del que hablaremos en el siguiente apartado -
, el generador de personajes , con lo que acaba siendo un juego de lucha con infinidad de personajes.
No hay más cambios ?de peso? en la jugabilidad; no hay ningún nuevo elemento que influya en los combates, manejo o posibilidades en batalla.
Namco ha seguido la premisa más vieja de este mundillo: si algo no está roto, ¿por qué arreglarlo?