No sabemos si es por la velocidad a la que suele moverse el erizo, pero los últimos tropezones en sus juegos han sido muy sonoros. Desde su salto a las 3D en
Dreamcast los juegos de
Sonic han resultado una mezcla extraña de plataformas y aventura que no terminan de convencer (salvo alguna excepción puntual como
Sonic Rush) a la crítica, y lo que es más importante, al gran público.
Por eso, cuando
SEGA anunció que el primer juego de su héroe azul para
Wii estaría centrado en la acción y la velocidad y tendría como protagonista sólo a Sonic, muchos nos alegramos; una trama totalmente nueva, partiendo de cero y volviendo a los orígenes del personaje es justo lo que el personaje necesitaba.
Ahora, por fin con la versión PAL en nuestro poder, es hora de aplaudir los aciertos y señalar los defectos de
Sonic and the Secret Rings. ¿Nos acompañas en este supersónico análisis?
A nivel jugable,
Sonic and the Secret Rings se basa completamente en el uso del wiimando, que cogeremos con las dos manos como si de un volante se tratase. Inclinándolo de derecha a izquierda
guiaremos a Sonic (que nunca para de correr), el botón 2 nos servirá para frenar y saltar y el 1 para dar pequeños saltos. Inclinarlo hacia delante prolonga el salto y sirve para atacar a los enemigos, y hacia atrás sirve para dar unos pasitos, por si nos hemos saltado algo.
El control no es demasiado intuitivo (cuesta algunas partidas dominar al erizo), pero una vez nos acostumbremos
y aprendamos a calcular las distancias (hay que saber exactamente el tamaño de enemigos y obstáculos, sobre todo cuando flotan en el aire) el juego funciona bien.
La otra gran novedad de entrega es
la posibilidad de ganar experiencia y mejorar nuestra habilidades - defensa, velocidad máxima, capacidad de frenado, altura del salto - así como conseguir nuevas habilidades especiales como ralentizar el tiempo o conseguir turbos. Mientras más rápido y mejor terminemos una fase
más puntos conseguiremos, más rápido evolucionaremos y podremos pulverizar nuestros antiguos récords. La idea es genial, el único problema es que no se ha llevado a cabo de forma intuitiva; el juego arranca lentamente con un pesado tutorial, pero nadie nos da demasiadas explicaciones de cómo funciona este modo, así que hay que recurrir al
ensayo y error.
A pesar de que la estrella del juego sea el modo historia,
SEGA ha incluido un simpático multijugador con decenas de juegos disponibles; como
party game palidece ante
Mario Party, pero como extra es todo un puntazo.
Uno de los aciertos más sonoros de esta entrega
es darle un giro a la trama, presentando nuevos enemigos y situaciones. No es que tengamos nada contra
Eggman / Robotnik, pero que se amplíe la galería de villanos siempre gusta.
En esta ocasión
Sonic se verá transportado a una versión del libro de las 1000 y una noches, encontrando nuevos enemigos? y aliados para salvar este mágico mundo.
Las novedades a la hora de afrontar las fases,
como el poder subir de nivel y equipar habilidades a Sonic también han enriquecido la forma de juego, incluyendose de forma lógica e intuitiva.
Técnicamente,
Sonic and the Secret Rings es uno de los juegos más sólidos del catálogo de
Wii; escenarios enormes y muy detallados, llenos de efectos (agua, fuego, columnas que surgen de la nada, estampidas de dinosaurios, espectaculares jefes finales?) se mueven rápidamente sin ningún problema importante. Destaca el buen hacer de los diseñadores del juego, que han conseguido localizaciones muy emblemáticas y que uno no se cansa de ver y recorrer; para poder disfrutar de los detalles sólo hay que
ralentizar el tiempo? Claro, todo tiene truco, y en esta ocasión es la cámara, que está fija, por lo que sólo hay que centrarse en modelar la parte del escenario que el jugador va a ver.
En cuanto al modo multijugador incluido su acabado es más mediocre (más un juego de
Gamecube no muy brillante), pero como extra no podemos pedir mucho más.
El apartado musical ya es más controvertido; la calidad de los temas en general no es mala, pero algunos se hacen muy machacones (como el de selección de fase), y las letras en inglés son muy tontas. Las voces y
FX sí que están a la altura.
Para concluir, destacar que el juego nos llega traducido (textos) y con selector 50/60Hz.