El Sniper Elite V2 original era un juego divertido que tenía algunos problemas debido a la mezcla de géneros sin llegar a ser ninguno de ellos. Como hemos dicho, tiene elementos de juego de infiltración y sigilo pero le faltan muchos de los estándares que tienen este género, y también cuenta con muchos otros elementos propios de shooters en tercera persona, con un sistema de cobertura, cambios de armas, o el tiempo bala cuando apuntamos con el rifle de francotirador. Sin embargo, después de varios años y de varias entregas de la saga ahora sí que se puede decir que resulta más divertido si has jugado anteriormente al mismo o si lo has hecho con algunas de las dos entregas anteriores (que, en este caso concreto, son posteriores porque hablamos del tercer y cuarto episodio). El problema es que sigue adoleciendo de esos elementos necesarios para hacer un juego accesible desde el primer momento, o para que jugadores de otros juegos similares se hagan rápidamente con él, pero ya sabemos cómo se juega y cuales son sus virtudes y sus defectos.

La misiones están basadas en hechos reales acontecidos en la Segunda Guerra Mundial, por lo que la historia es historia real aunque con una base fantástica también. Esto hace que queramos saber más del juego o de sus protagonistas para ver hasta qué punto es un juego realista. No es que pretenda dar una lección de historia (posiblemente sería muy aburrida en un juego de estas características), pero sí que le hace ser más divertido incluso si no te interesa demasiado. Su desarrollo es bastante dinámico y si bien le hacen falta muchos elementos para conseguir enganchar más, a estas alturas sabemos que se añadieron en posteriores juegos de la saga, por lo que está claro que iban por buen camino en su evolución.

Esta remasterización cumple con los estándares de hoy en día en cuanto a remasterizaciones se refiere, en el sentido de ofrecer lo mismo que teníamos en el original con todos sus DLCs (que en este caso es uno), un lavado de cara en texturas y algunos modelos y algunas opciones nuevas. Hablamos, por tanto, de 11 misiones que se pueden jugar en solitario con cuatro niveles de dificultad y que también se pueden jugar en cooperativo para dos jugadores online, lo cual incrementa mucho la diversión del juego. También incluyen un buen puñado de mapas multijugador competitivo hasta 16 jugadores (8 en Switch), que si bien quizás no sea el modo más utilizado de un juego como éste sí que estira su vida lo suficiente y le hacen tener más opciones para todo tipo de jugador. Son casi las mismas opciones que teníamos en el juego original, que no están nada mal .

A la hora de jugar en sí se comporta como el original, y quizás esta sea su mayor pega ya que no tiene los elementos necesarios para esta clase de juegos. Sus creadores se dieron cuenta de esto y los acabaron añadiendo en la tercera y la cuarta entrega de la saga, elementos como un minimapa que nos muestre dónde están los enemigos fijados, algún tipo de referencia cuando algún enemigo no esté escuchando o mirando, la distancia en la que estos nos ven o cualquier otro elemento propio de juegos de infiltración. A pesar de ser un shooter en tercera persona, gran parte del juego lo pasaremos intentando infiltrarnos para no gastar las pocas balas de pistola o ametralladora que tenemos, ya que en combate cercano nuestro rifle de francotirador no resulta demasiado efectivo.

Una remasterización con el DLC incluido, texturas en alta, algún mapa multijugador adicional y poco más. Si hablamos de la versión para Nintendo Switch sí que tendríamos que decir que estamos ante un juego original por no haber nada en la consola de Nintendo (aunque también apareció en Wii U), pero en PS4 y Xbox One (además de PC) ya hemos visto las dos entregas siguientes, Sniper Elite III y IV, con muchas mejoras y añadidos con respecto al original y a esta segunda parte. El ser una remasterización condiciona mucho este apartado, pero los chicos de Rebellion tampoco han intentado añadir nada que no estuviese en el original, y esto nos hubiese gustado mucho. Alguien podría decir que el contar con los personajes de Zombie Army Trilogy con los que incluso podremos jugar en misiones del modo historia es un gran añadido, pero está muy lejos de ser cierto ya que hablamos de skins del protagonista sin ninguna otra opción, cambio de armas o comportamiento, que sí que hubiese molado para aquellos jugadores que ya jugaron al original y quieran una experiencia distinta.

Las remasterizaciones deberían ser tomadas como una oportunidad por parte de la compañía de arreglar aquellos detalles jugables que no funcionasen en el original, o bien de añadir algún elemento que atraiga a los jugadores que jugaron al original, y en este caso lo que tenemos es lo mismo que ya teníamos con un lavado de cara a nivel técnico que se queda cortito.

Quizás hablamos de uno de los elementos más importantes si tenemos en cuenta que es una remasterización. Puede que muchos jugadores se piensen en volver a comprarse el juego para ver si la mejora técnica merece lo suficiente la pena al no haber cambiado casi nada de sus elementos jugables con respecto al original. Y la verdad es que te deja con un sabor agridulce todo el conjunto, el cual se ha mejorado ligeramente en muchos elementos dejando inalterados otros muchos que son los que más pesan. Vemos los mismos modelos de personajes y escenarios que en las versiones para Xbox 360 y PS3, que sin ser malos eran de una primera generación de la consola. A estos modelos se les han añadido texturas en alta calidad que cantan demasiado con los escenarios y personajes quedando un poco en evidencia, pero sin ser malo el resultado final al tratarse repetimos de una remasterización.

El problema principal le viene en la física del juego. Hablamos de un intento de ser un simulador de francotirador con una buena trayectoria de la bala, comportamiento realista del viento en la misma, el rozamiento o incluso la gravedad, y que están bastante bien implementados, lo que se contrapone con una física del personaje muy deficiente que le hacen quedarse enganchado en las esquinas, en las barandillas de las escaleras o incluso en un escalón el cual no es capaz de subir estando agachado (ya no digamos si nos estamos arrastrando, algo que hasta un niño puede hacer). Estos pequeños fallos afectan a la jugabilidad, ya que en ocasiones tendremos que ponernos de pie o incluso cambiar nuestra dirección para poder pasar por una piedra que no nos deja y que puede provocar (de hecho lo hace) que el enemigo nos detecte y de al traste con toda la misión. Esto no pasa en muchas ocasiones pero sí las suficientes para tenerlo en cuenta. La banda sonora del juego está muy bien conseguida y suena en los momentos adecuados cuando está sucediendo alguna escena cinemática o en medio de alguna persecución, y resulta de lo más emocionante. El doblaje al español sigue siendo también digno de elogio.

El género de los shooters en tercera persona (tipo Gears of War) está en auge y se ha convertido por derecho propio en uno de los que más adictos tiene en el mundo de los videojuegos, aunque aún sin alcanzar el rey de los géneros (los FPS). Por ello, muchas compañías intentan lanzar sus propios títulos de corte similar añadiéndole un, digamos, "toque personal" a la fórmula.

Los chicos de Rebellion han intentado crear algo así como este Sniper Elite v2, pero por el camino se han olvidado de todos los grandes elementos que un shooter en tercera persona debe tener. Es más, incluso sería difícil considerarlo como tal, ya que más parece un juego de infiltración (Splinter Cell, Metal Gear?) en el que el protagonista es un francotirador, y quizás en todo esto reside su verdadero problema; se queda a medias entre ambos géneros y no consigue enganchar a ninguno de los dos públicos.

Para definir el juego, diremos que encarnaremos a un francotirador al que se le encomienda una misión en pleno corazón de Berlín (ambientado en la Segunda Guerra Mundial) y que para realizar dicha misión nos encontraremos totalmente solos contra el ejército nazi y el ejército ruso. Las armas a nuestra disposición serán un rifle de francotirador (iremos encontrando distintos modelos según avancemos) con muchísima munición, una ametralladora con escasísima munición y una pistola también con bastante munición. Aparte de estas, contaremos con algunas otras "herramientas" como distintos tipos de granada, minas o detonadores que en su mayor parte también se encontrarán en un número escaso y que deberemos ir recogiendo de nuestros enemigos o cajas de munición repartidas por el escenario.

Las misiones se plantean casi siempre de la misma forma. Iniciamos el mapa, tenemos que acabar con uno o más objetivos repartidos por el escenario, y mientras los buscamos hay que sortear a otros enemigos (en ocasiones de generación infinita). Aquí es donde encontramos el primer problema serio, y es que la estrategia para el cumplimiento de las misiones son siempre las mismas, y acabaremos repitiéndolas una y otra vez hasta aburrirnos. Andar un poco en sigilo hasta encontrar un punto lo suficientemente bueno donde "acampar" (los jugadores de shooters online multijugador sabrán a lo que me refiero) e ir acabando con todos los enemigos posibles, y una vez hecho esto, pasar al siguiente punto de camping, y así hasta el final.

Pero éste no es el único problema. La curva de dificultad del juego es demasiado elevada como para atraer a los aficionados a los shooters más tradicionales ya que desde el principio del juego controlar al personaje y las armas es complicado (y la cantidad de enemigos y su puntería es alta), al menos hasta averiguar que no se puede jugar como cualquier otro shooter. Dicho de otro modo, hasta que no aprendamos a encontrar un buen punto para acampar y disparar colocando minas y trampas a nuestro alrededor para los enemigos que se nos escapen moriremos una y otra vez, y una vez aprendido será siempre igual, así que mejor no molestarse.
¿Y qué hay de los elementos de infiltración? Cualquier jugador puede caer en el error de pensar (como hice yo cuando comencé a jugar a esto) que quizás se pueda jugar a Sniper Elite V2 como si de un juego de infiltración se tratase. Andando en las sombras, matando a los enemigos por la espalda, acercándose en sigilo? Todo eso es posible en el juego, pero no tendremos a nuestra disposición ninguna de las herramientas que otros juegos de infiltración tienen, ni mini-mapas que nos indican la posición del enemigo, ni hacia donde están mirando, ni armas tranquilizantes, casi ni silenciadores para nuestras armas (la pistola lo tiene, pero tiene poquísimo alcance). Esto hace que desistamos rápidamente de intentar jugar así y volvamos a nuestro planteamiento inicial de tedio y aburrimiento.

Eso sí; hay un par de elementos en el juego que es digno de mención por ser positivo (uno de los únicos quizás), y uno de ellos es el denominado X-Ray Kill Cam. Se trata de una repetición a cámara lenta de nuestros disparos a larga distancia si conseguimos dar en algún punto mortal del enemigo, y lo que veremos será a nuestra bala atravesarlo (cabeza, corazón, huesos, músculos) como si de una radiografía se tratase. Hay que decir que siendo el elemento más destacable del juego no hace que todo el conjunto se salve de la quema, ya que una vez visto varias muertes de enemigos con esta "cámara de rayos X" querremos saltárnoslas para seguir jugando (el juego se pone en pausa mientras vemos la repetición y no podemos saltar la animación).

El otro elemento digno de mención es su modo cooperativo para dos jugadores. Sin ser perfecto, el juego nos permite seleccionar cualquier misión del modo campaña y jugarlo con otro jugador online, preferentemente un amigo con el que poder hablar con el micrófono para poder plantear estrategias. El juego se vuelve mucho más divertido y ameno si jugamos en modo cooperativo, pero no deja de ser muy imperfecto (incluso el cooperativo), ya que como en la mayoría de los juegos los dos jugadores saldrán desde el mismo punto y tendrán que hacer prácticamente lo mismo. Hubiese molado (y mucho) que cada jugador saliese de un punto distinto del mapa para poder hacer fuego cruzado o plantear estrategias antes y durante del juego.

Técnicamente, Sniper Elite V2 es bastante pobre. Parece un juego de primera generación de PS3 o 360 (sí, esos que parecían de PS2 en alta) con unos modelados bastante simples, texturas en baja y pocos detalles en pantalla. Y qué decir se la inteligencia artificial?Es totalmente inexistente hasta el punto de ver a los enemigos correr hacia el jugador como borregos sin preocuparles si les van a atravesar alguna bala. Al menos hay un punto positivo en la técnica, y es que gracias a 505 Games, Sniper Elite V2 está totalmente traducido y doblado al castellano, aunque no sea necesario.

La verdad es que es muy difícil recomendar este juego a alguien. No es un shooter en tercera persona, ni un juego de infiltración, casi ni siquiera un juego de la Segunda Guerra Mundial . Si esperas que baje de precio y convences a un amigo para que se lo compre y juguéis en cooperativo, puede ser una buena inversión.

La curva de dificultad es demasiado elevada al no seguir los patrones de ningún género. Una vez aprendes a jugar, las fases se vuelven monótonas. El modo cooperativo lo salva un poco de la quema y si eres de esos jugadores a los que les gusta acampar en los modos online, igual hasta te apasiona Sniper Elite V2.

No tenemos demasiadas opciones a nuestra disposición. Los modos online no estiran demasiado la vida de este título. Encima es difícil aprender a jugar.

Hay que reconocer que al menos no hay muchos juegos como éste. Mezcla de shooter en tercera persona, juego de infiltración y campamento de verano para francotiradores, así como otros elementos como la cámara de rayos X o la física de la bala.

Es un juego muy pobre. Parece de los primeros que aparecieron en PS3 y 360 y eso hace seis años estaba muy bien, pero no hoy en día. La IA del juego es para verla en acción, por lo mala que es. Al menos está doblado al castellano y no tiene fallos graves.