Sin duda, el
punto más fuerte de Sea of Stars es lo original y refrescante que resulta. Es toda una oda a los juegos de rol clásicos de 16-32 bits, con historias más coloridas y desenfadas en las que priman la amistad, los
buenos capaces de todo para salvar al mundo, y los villanos un tanto
tontorrones; clásicos como
Illusion of Time,
Secret of Mana,
Soleil... Aquí volvemos a encontrar esa combinación de factores pero con una vuelta de tuerca, personajes bien desarrollados, relaciones y dinámicas de grupo interesantes, y un mundo realmente imaginativo para descubrir.
Por supuesto, más allá de su historia hay elementos muy refrescantes en la fórmula del juego, especialmente a nivel de combate, y también en las opciones que nos da el RPG para que la aventura se adapte a nuestra forma de jugar (y no al revés), desde ayudas en las batallas a la gestión de inventario o comidas... Todo se ha hecho con mucho mimo y cuidado, y se ha creado un
mini-universo que merece la pena descubrir, explorar al dedillo. Detalles como la aparición de una
contadora de cuentos en nuestra hoguera, cuentos que a veces nos tocará protagonizar, son puntos que nos han enamorado.