A diferencia de otras entregas o de otros juegos de estilo
musou la cantidad de opciones de juego es muy limitada, solo disponemos del modo historia y ninguna opción online. Cierto es que el desarrollo de la historia es posiblemente el mejor realizado hasta la fecha, rico en hechos , conversaciones y personajes interesantes y que
la jugabilidad mostrada en Samurai Warrior 4 II se mantiene, con la combinación de los ataques normales, los
híper-rápidos ideales para atravesar lineas enemigas y el modo
rage que nos potencia los ataques y que combinado con el musou realizamos el ataque definitivo.
En esta entrega los castillos son la fase previa a las batallas, donde podremos mejorar y comprar armas, abastecernos de medicinas o realizar minijuegos de pesca o siembra que tampoco aportan gran cosa. En ellos también podremos hablar con otros personajes que nos darán misiones secundarias o que al aumentar su afinidad con nosotros por medio de regalos los podremos desbloquear para usarlos en las misiones de exploración. El elenco de personajes estará compuesto por viejos conocidos y unos pocos nuevos, pero el número es inferior a lo que estamos acostumbrados, pero es defendible ya que el juego se centra en una época muy concreta de la historia y sobre las casas implicadas.