Sam & Max Save the World - Análisis Xbox Live Arcade

Aquellos que llevan muchos años en esto de los videojuegos recordarán una aventura gráfica aparecida en PC en 1993 de nombre Sam & Max: Hit the Road, basada en unas viñetas cómicas y cuyos dos protagonistas eran de lo más bestia (en el sentido divertido de la expresión) que se podía encontrar en el videojuego. Este título fue uno de los últimos en utilizar el sistema de juego SCUMM para aventura gráfica creado por Lucasarts y tuvo el dudoso honor de ser una de las últimas grandes aventuras gráficas clásicas de éxito aparecidas en el mercado (siguen apareciendo a día de hoy, pero sin tanta repercusión como antaño). Ahora nos llega a Xbox Live una especie de continuación en 3D vía Xbox Live en formato episodios (recopilación de los episodios vistos en PC y Wii) que siguen un planteamiento muy similar al título original, es decir, es una aventura gráfica de tipo ´point and click´, lo que significa que controlaremos un cursor en pantalla que moveremos sobre ciertos objetos que nos darán información y con los que tendremos que intarctuar, moviéndolos, cogiéndolos y utilizándolos con otros objetos.

Por tanto, sigue teniendo casi todos los mismos aciertos y fallos que la mayoría de títulos clásicos que hemos visto desde su inicio con Maniac Mansion y compañía. Esto quiere decir que resolver los puzzles en muchas ocasiones será cuestión de ingenio e imaginación, aunque cuando nos quedemos atrancados nada mejor que probar todos los objetos con todos los posibles usos y combinaciones hasta dar con el adecuado. Es más, en muchos títulos recientes encontramos que los objetos con los que podremos interactuar tienen un cierto brillo o borde resplandeciente que nos indica que podemos hacer algo con ellos, y que aquí no existe, por lo que cada vez que lleguemos a un nuevo escenario tendremos que hacer un barrido con el cursor para buscarlos. Aún así, el juego ha perdido algo de dificultad con respecto a los grandes clásicos como los primeros Monkey Island o incluso el primer Sam & Max, y ahora los puzzles son mucho más accesibles, por lo que suponemos que el formato Live Arcade y el intento por parte de Microsoft de acercar este soporte al jugador casual tiene mucho que ver.

A nivel técnico, el juego ha sufrido una transformación a las tres dimensiones, aunque sigue manteniendo la misma estética que su antecesor en 2D, con una cámara fija y movimientos laterales que siguen cumpliendo su cometido. La pega en este apartado la encontramos en las voces, todas en inglés aunque perfectamente subtituladas al castellano. Tienen una buena entonación y resultan muy divertidas en acento y expresividad (igual que las de la versión original de PC en CD-ROM), pero nos hubiese gustado escucharlas en español, entre otras cosas porque así no notaríamos tanto que la traducción ha sido un poco libre (no es mala ni mucho menos, pero sí que no ha sido literal y pierde algunos chistes incluso).

El resumen, si sigues disfrutando de aventuras clásicas en PC u otros formatos, este Sam & Max: Save the World es una buena apuesta, muy divertida, bien hecha, y muy accesible (con un coste de 1600 puntos) actualmente. No debemos esperar nada nuevo en el género, ni siquiera el uso de algunas técnicas que lo evolucionaron hace unos años, pero aún así y teniendo en cuenta el catálogo actual de Live Arcade, es una de las mejores referencias para próximas obras.