Análisis Red Dead Redemption - Conviértete en una leyenda del Viejo Oeste

Posiblemente el punto más fuerte de Red Dead Redemption es la multitud de horas que podremos invertir en este Oeste virtual; completar el modo historia principal nos llevará alrededor de 10 horas, pero si queremos exprimir al máximo el juego - desbloquear nuevas ropas, mejorar nuestras habilidades, cazar a todos los forajidos - y conseguir el 100% ese tiempo se multiplica por 5. Si a eso le sumamos los modos de juego online, cooperativos y competitivos... Tenemos diversión garantizada para mucho tiempo.

Enriqueciendo la mecánica sandbox (o juego de estilo libre) de GTA , los chicos de Rockstar han creado un título realmente jugable. Montar a caballo y cazar o tirar el lazo es un placer, aunque lo mejor son las peleas de bar y los tiroteos (estos mejorados con el Dead Eye, una especie de tiempo bala letal y divertido de utilizar). Los minijuegos - desde el póker al lanzamiento de herraduras - son un aliciente más para invertir horas en la aventura de John Marston.

Tomando como punto de partida la mecánica de GTA nos encontramos trasladados a un Oeste Americano con una increíble atmósfera de juego; el hacernos viajar al pasado y crear un mundo vivo con personajes y situaciones inolvidables es el mayor acierto del título. Donde resultan más sorprendentes las nuevas ideas es en los modos multijugador, y es que la posibilidad de formar nuestra banda de forajidos no tiene precio...

Aunque esté un poco más pulido en X360, Red Dead Redemption es un juego sobresaliente a nivel técnico en ambas versiones, destacando la excelente ambientación, los modelados (los caballos son obras de arte virtuales) y el tamaño y variedad de los escenarios del Oeste, junto a sus ecosistemas propios o clima. El modo online es un ejemplo de buen hacer, tanto en cooperativo como en versus. Eso sí, pequeños bugs puntuales y el doblaje en inglés - sobresaliente, eso sí - le impiden llegar a la perfección.