Los orcos (acompañados de legiones de otros monstruos, no penséis que vamos a luchar sólo contra los pieles verdes) han invadido el reino y quieren acabar con los portales mágicos para dominarlo; afortunadamente nosotros, un
chulesco mago-guerrero puede darle la vuelta a la situación. ¿Y cómo se enfrenta un sólo hombre a todo un ejército? Pues con magia, espada, una ballesta... Y muchas trampas.
Orcs Must Die! es una versión de los típicos
Tower Defense, pero con 3 interesantes añadidos:
- Nosotros nos implicamos en la batalla con nuestro
mago guerrero que puede acribillar a sus enemigos a distancia, golpearlos de cerca con una espada arcana o acribillarlos con hechizos. Según nuestra forma de jugar, unas trampas (y estrategias) serán mejores que otras; por ejemplo, ralentizar a los enemigos con trampas de arena al principio de la fase se combina bien con flechas mágicas...
- Las etapas de combate / gestión se van alternando con descansos entre las hordas, aunque nosotros podremos construir (o invocar ayudantes) en cualquier momento, lo que le da flexibilidad a la estrategia de cada fase.
- Tener que elegir un número máximo de hechizos/trampas y
centrarnos en mejorarlos (cada vez se van haciendo más eficientes, y aumenta su poder / baja el precio de creación) también es un interesante elemento táctico que nos
obliga a ver qué trampa / hechizo trabaja mejor contra cada monstruo.
Con estos tres pilares, las 24 fases del juego se hacen intensas y muy interesantes, enganchando al jugador con continuas novedades y mejoras (algo al estilo
Plantas Vs. Zombies, aunque no tan elaborado).
Orcs Must Die! nos llega a 1200 Microsoft Points, lo que es una inversión segura para los amantes del género (si queremos conseguir todos los retos el juego nos puede durar perfectamente 15-20 horas), aunque puede ser un poco arriesgado para los que sólo quieran experimentar... Os recomendamos que probéis la demo, un estupendo adelanto de la mecánica de juego.