Análisis Nintendo Land - Wii U

Tras el E3 2012, y el anuncio del pack de consola con Nintendo Land, estaba claro que este título iba a ser una de las estrellas en el lanzamiento de Wii U, y sobre todo, una medida de sus posibilidades (como Wii Sports lo fue de Wii)... Y no nos equivocábamos. La ventaja sobre el título que hizo tan popular a la anterior consola de Nintendo es que esta vez hablamos de un juego de verdad (y no una demo glorificada de las posibilidades del mando... Aunque también hay algunas desventajas.

Obviamente las claves del título se resumen en 2 aspectos:

- El uso del mando con pantalla en distintos tipos de prueba. El sensor de movimiento, la pantalla adicional, la interfaz táctil, su ergonomía... Algunas de sus posibilidades más importantes se han puesto a prueba en las 12 atracciones que representan distintas franquicias y etapas del mundo de Nintendo de una forma muy correcta. La respuesta del control principal es muy, muy buena y abre un enorme abanico de posibilidades; es cierto que se podrían haber pulido algunos aspectos más y mejor en los minijuegos, pero no hay fallos graves.



- La jugabilidad asimétrica. Desde que conocimos el precio del mando sabíamos que la idea de reunir 4 mandos con pantalla sería imposible... ¿Iba a perder Ninty su reclamo multijugador? Pues no, gracias a una inteligente división de responsabilidades, un jugador disfrutando con el mando con pantalla y una misión principal y el resto con los mandos tradicionales de Wii (motion plus), y diferentes misiones, bien competitivas o bien cooperativas.

En esta experiencia de juego vamos a encontrar de todo; hay títulos realmente divertidos y muy elaborados - como Pikmin -, mientras que otros se convierten en experiencias un poco más tontorronas, como Animal Crossing. Otro punto que afecta es que hay juegos que no terminan de resultar realmente divertidos (o compensados) a menos que tengamos un mínimo de jugadores. Por ejemplo, perseguir a Mario con 2 rivales es una prueba muy compleja - con muchas partidas jugadas, no lo hemos conseguido nunca -, o que el jugador que controla a Link con el arco venza al que lucha con espada es también un reto titánico...

Con todo, al contar con 12 atracciones (algunas con distintos tipos de retos cooperativos/competitivos) vamos a encontrar siempre un reto seamos los que seamos, incluyendo 6 pruebas en modo 1 jugador para que también nosotros podamos experimentar en solitario.



La sensación final, tras haber experimentado el juego con todo tipo de jugadores - ocasionales, veteranos, más o menos interesados en la experiencia, en grupos de 2 o hasta 5 - es que Nintendo ha vuelto a sorprender y a crear nuevas experiencias de juego; cierto que no son tan intuitivas como lo era el tenis o golf de Wii Sports y que tenemos que sufrir una serie de tutoriales iniciales un poco desesperante, pero cuando las cosas empiezan a rodar nos encontramos con un título realmente divertido y con un gran potencial... Al que sólo le ha faltado un pequeño hervor.

A muchos quizá le interese más la pregunta... ¿Justifica la compra de la consola? Pues en nuestra opinión no, al igual que Kinect Adventures no lo hacía con la cámara... Pero sí que justifica que, si nos interesa la experiencia, nos hagamos con la versión negra Premium, mucho más completa y divertida. Nintendo Land es el punto de partida de una máquina llena de posibilidades... Ya veeremos hasta dónde llega.

El título divide su acción en 12 atracciones (algunas con distintos tipos de pruebas), 6 en experiencia un jugador y 6 multi (que pueden ser cooperativas, competitivas o una extraña mezcla de ambas). Exprimir sus posibilidades sin soporte online depende en gran medida de nuestra capacidad para juntar gente en nuestra casa. Nintendo ha tenido una buena idea añadiendo logros y desafíos dentro de los juegos, pero no son demasiado intuitivos para descubrirlos... Hay que pulir el sistema, y no hubiera venido mal equilibrar también la duración de los minijuegos.

Creado al servicio del nuevo mando de la consola, NintendoLand nos permite explorar todo tipo de funcionalidades de la misma: pantalla táctil, girómetro, segunda pantalla, cámara... El resultado, en líneas generales, es muy bueno (aunque con algunos aspectos mejorables, especialmente en la sensibilidad táctil) en casi todas las pruebas, aunque también puede verse como un poco tontorrón y forzado en otras, como explicamos en el análisis detallado. Con todo, la respuesta y opciones que aporta nos dan una puntuación de notable alto.

Sin duda, el punto más fuerte de la experiencia NintendoLand es lo sorprendente que resulta para el jugador, tanto por los inteligentes usos del nuevo mando como por las capacidades de juego asimétrico. Ver a nuestros amigos/familiares intentando coordinarse en los juegos a grito pelado mientras el jugador con el nuevo mando tiene otras misiones es una experiencia única a día de hoy. Aún así, la idea podía haberse pulido todavía más con más pruebas y desafíos, y no dejar fuera sagas como Starfox.

Gráficamente muy correcto, NintendoLand solventa el estreno de la consola en HD con un acabado vistoso de los Miis y las atracciones, que funcionan como un reloj y sirven para uso y lucimiento del mando; el único pero lo podemos ver en la plaza principal (mejorable y con algún tironcillo ocasional). Los disfraces para los Miis - y algunos momentos de juego - están muy logrados. La banda sonora, con remasterizaciones de clásicos de Nintendo, es una delicia. Nos llega completamente traducido al castellano.