Análisis Monster Hunter 3 Ultimate - Nintendo 3DS

Con una duración a prueba de bombas, Monster Hunter 3 Ultimate tiene decenas de gigantescas criaturas a capturar, cada una con su forma particular de luchar y estrategias que tendremos que estudiar al dedillo, más si queremos conseguir sus partes más valiosas y crearnos armas y armaduras a la altura. Sin embargo, hay un punto donde la versión 3DS cojea, y es en la falta de online; si no tenemos la versión de Wii U como puente, el multijugador se limita al modo local, y es una pena, porque cazando en grupo el juego se hace mucho más divertido.

Aunque en un principio las cacerías del juego puedan parecer muy limitadas, poco a poco se abren ante nosotros enormes opciones gracias a las distintas armas (que cambian nuestra forma de jugar: ligeras, pesadas, defensivas, ofensivas...) y a las peculiaridades de cada monstruo. El título sigue siendo tan divertido como el resto de entregas de la saga, aunque en 3DS se echan en falta un stick adicional (si no tenemos el circle pad pro) y algunos botones, pese a los esfuerzos de Capcom por incorporar botones táctiles.

Aunque MH3 Ultimate supone el estreno de la saga en Nintendo 3DS y no hay juegos de este tipo en la consola, estamos hablando de una versión mejorada y aumentada de MH Tri, así que si hemos quemado mucho el juego original las sopresas aquí van a ser muchas menos... Por otra parte hay que valorar el esfuerzo de los desarrolladores para aprovechar la consola, aunque realmente no hay funciones muy innovadoras más allá de los menús táctiles.

Quizá el punto más fuerte del juego, el título de Capcom es uno de los juegos que más y mejor aprovecha el hardware de Nintendo 3DS, dando vida a criaturas francamente impactantes, a un mundo vivo y a cazadores llenos de detalle y muy bien animados. Las melodías son excelentes, y los FX sobresalientes, y nos llega traducido al castellano. El único pero que podemos poner es un sistema de cámaras francamente mejorable, que cojea y se hace bastante incómodo si no tenemos el circle pad pro.