De sobra es conocida la jugabilidad que atesora a la saga, que en esta parte se ve mejorada gracias a una disminución de la dificultad. Si le añadimos una gran variedad de armas y poderes, junto con el buen hacer de Capcom, obtenemos un gran juego.
Como todos sabemos las anteriores entregas no se han caracterizado precisamente por su escasa dificultad, desde los comienzos de esta saga ha sido todo un logro poder pasar de nivel, en Maximo Ghosts to Glory esto y la criticada cámara hicieron que más de uno se pensara continuar la aventura, pero en este caso no será así,
Capcom ha conseguido una perfecta curva de aprendizaje y ha mermado la dificultad.
En la mayoría de los aspectos la jugabilidad es muy parecida al primer Maximo pero solventando algunos problemas, se ha mejorado algo el control en general del personaje, pero sobre todo se ha hecho hincapié en los saltos, haciéndolos más exactos gracias a una buena cámara, sin apenas ángulos muertos.
El número de movimientos especiales que podremos llegar a realizar se ha incrementado drásticamente, sobre unos
30, nos los venderá un luchador vejete que salvaremos a menudo, por un puñado de monedas. Aunque quizás la mejor habilidad con la que nos encontraremos será la posibilidad de invocar y controlar a
Girm Reaper, durante un periodo de tiempo que podremos ampliar, su poder inmortal destruirá a todo malo viviente que se nos acerque y gracias a la posibilidad de volar cuando estamos transformados podremos llegar a lugares de otra forma inaccesibles.
Dispondremos de tres armas que iremos consiguiendo durante el transcurso del juego y que iremos ampliando con poderes. La primera será la ya conocida
espada larga, la segunda un tremendo
martillo que nos será muy útil para machacar a las pesadas arañas y la tercera, una
rápida espada forjada con el poder del fuego que conseguiremos cerca del final de nuestra aventura.
Aparte de todo esto podremos comprar por el camino nuevos
calzoncillos, que nos darán la habilidad, por ejemplo, de descubrir cofres ocultos e incluso conseguir más cantidad de dinero.