Mario Kart se estrena en
Nintendo 3DS con la séptima entrega de la saga;
Mario Kart 7 ha sido diseñado pensando en el potencial de la consola, tanto en sus opciones gráficas (el 3D está muy bien conseguido, suave pero inmersivo) como en sus capacidades de juego o posibilidades online, y eso se nota desde la primera partida. Además,
se han añadido cambios interesantes y nuevas opciones de juego... ¿Para crear el mejor título de la saga? Bueno, no, pero sí para dar vida
a un juego sobresaliente.
Los fans de la saga recordarán con especial cariño la versión de DS, primera en incluir online y
que sumaba muchos enteros en la experiencia para un jugador añadiendo retos; pues bien, la versión 3DS no tiene estos retos, de hecho
el menú es muy minimalista, y las opciones las justas y necesarias.
- Grand Prix. El modo central del juego, 4 copas completamente nuevas y 4 remasterizadas (16 circuitos con nuevos atajos y elementos que se aprovechan de los vehículos anfibios o la posibilidad de planear).
- Contrarreloj. Aquí se elimina el factor suerte, y hay que conseguir reducir al máximo nuestro tiempo en cada escenario utilizando sólo 3 turbos por carrera. Para hacerlo más competitivo hay fantasmas con tiempos similares a los nuestros que nos enseñarán trucos y atajos para mejorar. Estos fantasmas pueden intercambiarse vía
StreetPass o descargarse online.
- Batalla de Globos. Más adictiva que nunca gracias a un excelente diseño de escenarios (el panal nos ha cautivado).
- Batalla de Monedas. Lucha por mantener 10 monedas mientras atacas a los demás corredores. Los escenarios son 6, los mismos que en
Batalla de Globos.
Lo bueno es que hay
un montón de piezas a desbloquear que compraremos con monedas, lo que implica muchas horas de juego en estos modos si queremos conseguirlo todo (o los mejores elementos, ya que se desbloquean aleatoriamente).
Por supuesto, la sal de
Mario Kart sigue estando en sus opciones multijugador, y esta séptima entrega no es una excepción. Tenemos tanto las carreras como los dos tipos de batalla accesibles en
partidas locales y online de hasta 8 jugadores; no son los 12 de Wii, pero se hacen mucho más intensas que los enfrentamientos para 4 de DS. ¿La gran novedad?
La aparición de comunidades, que permiten personalizar la experiencia. Las comunidades ofrecen
carreras personalizadas en circuitos concretos donde se eliminan determinados objetos (o son temáticos, sólo hay uno). Es cierto que podrían añadirse muchas más opciones - más
cuando por fin haya un editor de pistas - pero es un añadido que suma muchas posibilidades. Las comunidades con más jugadores pueden encontrarse conectándonos online, aunque podemos hacer una con amigos/conocidos simplemente intercambiando un código.
Por contra,
la novedad más prometedora de Mario Kart 7 nos ha sabido a poco; es cierto que contar con un editor de vehículos y opciones para planear/movernos bajo el agua refrescan la fórmula jugable (especialmente en circuitos retro), pero uno se queda con la impresión de que lo que hemos visto es poco más que una
demo de todo lo que se podría hacer. Se podrían haber creado vehículos realmente preparados para el agua que cogieran ventaja allí, al igual que mejorar más los ala-delta para poder
volar y atajar, en lugar de que todos estén más o menos compensados, y las diferencias sean mínimas (o sólo salgan a la luz en algún momento puntual). Mucho más completo es el editor de vehículos, aunque se limita a tres aspectos: carrocería, ruedas y tipo de planeador, lo que influye en 5 aspectos del kart (
aceleración, velocidad, peso, manejo y todo-terreno).
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la conducción en primera persona (con girómetro, aunque también puede ser manual), que aunque espectacular y divertida a nuestro gusto se ha quedado en una simple curiosidad, ya que no es competitiva... Eso sí, es una buena idea con la que experimentar en otras entregas de la saga.