Sorprendente. Gratamente sorprendido por un juego tan bien hecho de principio a fin. Hay muchos elementos muy bien hilados y tanto la historia, como la puesta en escena y narrativa, técnica, diseño de personajes o mecánicas de juego son más que sobresalientes. El juego no es demasiado sencillo especialmente porque todo se tiene que hacer al ritmo de la melodía que suena de fondo, y para los que no tengan demasiado ritmo esto puede ser un verdadero incordio. Aún así, a mi me ha resultado muy fácil de seguir e incluso sencillo de aprender la mayoría de combos, golpes y bloqueos que el personaje protagonista puede hacer, lo que ha hecho que me enganche de principio a fin.
En cuanto a su duración no es excesiva, lo que puede ser algo bueno o malo según se mire. Yo soy del tipo de jugador que va mirando por huecos y esquivas en busca de coleccionables, pero que no gasta su salud en ello, por lo que si los encuentra genial y si no sigue adelante. Aún así, la primera partida me ha llevado
algo más de doce horas y con el modo de juego en difícil (que los combates sean desafiantes), aunque luego podemos echar más intentando buscar esas puertas secretas y coleccionables repartidos por todas partes. Con este juego Microsoft ha querido abrir la veda de
juegos de estilo Nintendo, que son los ideales para su Game Pass. con esto quiero decir que en lugar de gastarse enormes presupuestos como Sony en hacer superproducciones que son difícilmente rentables por el Game Pass,
lo ideal es crear un juego corto, divertido y relativamente fácil de hacer para que millones de jugadores se lo bajen, se diviertan y les salga rentable, y eso es lo que vamos a encontrar. Es divertido, es corto, y una vez finalizado podemos rejugarlo o pasar a por el siguiente, lo que lo hace ideal para este catálogo.