-¡Bienvenidos a Hogwarts!, ya estáis en tercer curso, sois unos magos maduros, con mayor poder y mayores responsabilidades, así que apretaos el cinturón y calentad vuestras varitas mágicas, porque este año os pediremos que deis menos.
-¿?. ¿Cómo? ¿Menos?
-Si si, menos, mucho menos. Para empezar olvidaos del torneo de Quidditch. Este año no habrá Quidditch, así que olvidad las preocupaciones de practicar durante horas con vuestras Nimbus.
-Pero si nos gustaba?
-Ya, bueno, pero ¿y el tiempo que os ahorramos?, si al final vais a ganar los de Gryffindor. Es más, tampoco os preocupéis por los puntos de las casas, tampoco habrá competición entre las casas.
-Pero? ¿y las ganas que le tengo a Draco Malfoy? ¡¡Mi sueño durante todo este invierno era vencer a los Slitherin!! ¡Eso es casi lo que más me motiva de venir a Hogwarts!
-Tranquilo, que para motivarte tenemos una colección de cromos y las jugosas grageas Bertie Bott de todos los sabores.
-Pero?. Si ya tengo todos los cromos de los dos primeros años y casi cinco mil grageas que espero que no caduquen? ¿no me podéis dar algo nuevo?
-Bueeeeeno, venga, te voy a dar nuevos y temibles enemigos. Incluido??.
El prisionero de Azkaban.
-No esta mal, quiero pasar miedo.
-Y también te voy a dar una mascota fantástica con la que podrás surcar los cielos, te voy a dar un
Hipogrifo.
-Vaya, también suena bien, espero que haya variedad de enemigos temibles (y no solamente uno que se repita hasta la saciedad). Y también espero poder volar libremente con mi hipogrifo y no siempre por el mismo recorrido una y otra vez.
-ge, ¿has probado la gragea con sabor a nada?
-no?. ¿está buena?
Pues para que os hagáis una idea de a lo que sabe una gragea con sabor a nada, os vamos a dar este videojuego, cuando lo acabéis en unas pocas horas os sentiréis como si os hubierais comido una de esas grageas. Os lo aseguro.