Visualmente
Greedfall tiene una cuidada ambientación y una elaborada puesta en escena, aunque se echan en falta más recursos técnicos para redondear la experiencia a la altura de los mejores, ya que hay ideas muy buenas y elaboradas por encima de algunos de
los grandes. Así, el motor gráfico, sin tener fallos destacados, sí que nos puede dar más de un quebradero de cabeza dejando
atorado al personaje, posicionando mal la cámara o con algún bug puntual que nos haga tener que reiniciar... Igualmente vamos a encontrar animaciones un tanto mecánicas, escenarios
reutilizados y algún problema de IA, pero por contra hay mucho cuidado artístico en los detalles, se ven realmente los cambios de equipo en nuestro personaje, y la dificultad está bien medida.
La banda sonora corre a cargo de
Olivier Deriviere (A Plague Tale: Innocence, Vampyr, Remember Me...), con temas que ambientan a la perfección este mundo mágico, pero con tintes realistas y tecnológicas. Las voces en inglés también funcionan a la perfección, y los textos en castellano son imprescindibles para disfrutar de la aventura al 100% si no estamos muy fuertes en inglés.