Un gran comienzo de 2017 para los juegos exclusivos de PS4

Personalmente considero la primera parte como el mejor juego que tiene el catálogo de PS Vita (por encima de Killzone o Uncharted) por su innovación, estilo de juego, apartado técnico y opciones, y esta secuela no se queda nada atrás y mejora en mucho al original. Ofrece una enorme cantidad de movimientos para la protagonista, un buen puñado de tipos de misiones distintas y un buen puñado de escenarios distintos entre sí y muy variados a nivel estético. Todo ello crea un gran conjunto, sí, pero además es que resulta que es realmente divertido de jugar y nos encantará movernos por todas partes, volar y explorar y realizar las misiones. Hay algunas que son un poco sosas como aquellas que tenemos que recolectar mena, pero aún así suficientes tipos de misiones como para tener juego para rato (solo el las misiones principales nos pueden llevar más de 15 horas, y hay decenas de secundarias).

Le vemos algunos puntos negativos que le restan ser perfecto, como la difícil combinación de opciones y movimientos que tiene Kat y que no todo el mundo podrá controlar, o que el juego es tan largo que acaba repitiendo tipos de misiones, lo que es algo muy habitual en todos los juegos de open world, aunque éste cuente con muchísimas. También nos hubiese gustado poder ver una mayor mejora del personaje, y es que aunque lo mejoramos y mucho con nuevas habilidades, realmente no son necesarias y tampoco se notan demasiado. Uno de los puntos fuertes de cualquier juego es ver cómo evoluciona nuestro personaje y se hace cada vez más fuerte y aquí casi pasa inadvertido, y es una lástima porque aunque sí que mejoramos a Kat, la mayor parte de las misiones se podrían hacer con los poderes estándar, y no da la sensación de mejora.

Gravity Rush 2 cuenta con un buen puñado de movimientos de la protagonista que iremos aprendiendo conforme avanzamos el juego, ya que contamos con una lista de mejoras para le protagonista que se van comprando con la mena (gemas rosas) que veremos repartidas por el escenario y que sueltan los enemigos al morir. Esto tiene un lado bueno y un lado malo, ya que si jugaste a la primera parte o se te dan bien los juegos en los que debes controlar muchos botones, éste se te dará bien y verás enormes posibilidades de juego. El problema es que aunque la curva de dificultad no es elevada, podemos caer en el error de hacer una y otra vez los mismos movimientos, volviéndose el juego un poco monótono y repetitivo. Sin embargo, si te acostumbras a su control y realizas toda clase de movimientos para acabar con los enemigos, te darás cuenta de que es realmente divertido y variado, y las posibilidades son enormes. No es que sea difícil porque no lo es (salvo algunos enfrentamientos en contados momentos) pero sus creadores han querido darle a Kat tantas posibilidades que algunas de ellas son complejas de hacer.

Por lo demás, estamos ante un juego con un buen puñado de misiones de distinto tipo, como acabar con los enemigos de forma normal, infiltrarse en una zona, hacer una carrera, transportar un objeto o a unas personas por el aire hasta un punto, repartir periódicos y otros objetos, sacar fotos de ciertos objetos concretos o simplemente luchar cuerpo a cuerpo sin poder usar ninguno de nuestros poderes. Cada misión se realizará de una forma distinta y entre medias podremos ganar nuevos poderes, explorar la multitud de islas del juego o hablar con algunos personajes, lo que nos da una idea de las posibilidades del juego.

Juegos como Gravity Rush 2 no existen, salvo obviamente si primera parte. Hablamos de un juego donde con la pulsación de un botón eliminamos la gravedad alrededor de nuestro personaje y con la pulsación del mismo botón nuevamente (apuntando la cámara donde queramos) crearemos la gravedad en dicha dirección, moviéndonos rápidamente hacia allí como si estuviésemos volando (y transportando todo lo que estuviese a nuestro lado). Con esa premisa, todo el juego se plantea como un juego de mundo abierto y total libertad de movimientos donde podremos ir haciendo misiones principales y secundarias repartidas por el escenario pero con la gravedad como elemento principal. El corte manga también le da un toque realmente bonito y original, por lo que todo el conjunto es muy fresco.

Sí es cierto que nos hubiese gustado ver algo que no se hubiese visto antes. Tenemos más de todo (escenarios, movimientos, tipos de misiones, personajes?) y aún así si has jugado a la primera entrega te encuentras demasiado en casa, lo que no es malo en absoluto pero sí dice que podría haberse apostado un poquito más. Ni siquiera el hecho de tener que hacer fotos para ciertas misiones le libran de esto, ya que es algo totalmente secundario. Para esta segunda parte todavía lo vemos muy original, pero para una siguiente entrega sí que querremos ver algo que vaya en otra dirección o que ofrezca un camino distinto.

Cuenta con unos gráficos estilo cell-shading realmente bonitos, con unos diseños de personajes (sobre todo Kat y Raven) muy trabajados y algunos escenarios realmente coloristas y dignos de cualquier otro juego de primera fila. Sin embargo, es un poco irregular con algunos escenarios como las minas de mena (realmente vacías) los personajes secundarios (son demasiado parecidos entre sí) o la reutilización de texturas en los edificios. Como decimos, no es nada malo, al contrario, es realmente bonito y espectacular en algunos casos pero tiene el problema de la mayoría de juegos en cell-shading que vemos a día de hoy (cell-shading no debería significar menos detalle).

Hay un punto negativo que se ha trabajado con respecto a la primera entrega pero que aún así nos encontramos en esta segunda parte como es la cámara del juego, que se vuelve loca en ocasiones y no apunta a donde debiese. Y es que a veces queremos actuar tan rápidamente que la cámara no se sitúa donde debe y acabamos saliendo disparados al vacío. Pasa en muy pocas ocasiones, pero cuando pasa joroba. Mención especial a la espectacular banda sonora del juego creada por Kohei Tanaka y que nos encanta escuchar dentro y fuera del juego.