Análisis - GTA Liberty City Stories

Nacida en 1998 para PC de la mano de Rockstar North, la saga GTA, Grand Theft Auto (que podríamos traducir como distinguido ladrón de coches) nos metía en el papel de un joven ladrón que tenía que cumplir determinadas misiones y ascender en la escala criminal de la ciudad. Muchos de los detalles incluidos (la posibilidad de robar cualquier vehículo, las misiones a pie o en coche, una conseguida trama... se convertirían en las indiscutibles señas de identidad de la saga-

Pese a ser un juego de culto en muchos países (incluso tuvo una versión especial en U.K. con Londres como escenario) y recibir una rapidísima segunda versión, la saga no consiguió la fama de la que hoy goza hasta el lanzamiento de la tercera entrega en Playstation 2, a finales de 2001. Pocas veces el salto a las 3D le ha sentado tan fabulosamente bien a un juego, y en este caso el cambio gráfico fue espectacular, aunque se siguieron conservando (e incluso aumentaron) las posibilidades jugables, la enorme variedad de misiones y vehículos disponibles e incluso se aumentó la libertad del jugador, dejándonos hacer casi de todo.

Después de eso la saga continuó con 2 entregas del mismo corte, GTA: Vice City y GTA: San Andreas, que siguieron ampliando las posibilidades del jugador y aumentando la variedad de situaciones, y sus correspondientes versiones para Xbox y PC, incluyendo hasta una portátil para GBA (en 2D, más parecida a las primeras).

El año pasado, los chicos de Rockstar decidieron poner a prueba el potencial de PSP y crear un juego exclusivo para la portátil de Sony que exprimiera a conciencia su sorprendente potencia; nacía así GTA: Liberty City Stories, uno de los juegos más interesantes del catálogo de la consola. El juego nos ponía en el papel de Tony Cipriani, el brazo ejecutor de una familia mafiosa que se ve relegado a un segundo puesto y tiene que volver a recuperar el respeto y el puesto que le pertenecen... e incluso darle alguna que otra vuelta a la situación.

A menos de un año de su lanzamiento en PSP, Playstation 2 recibe una versión del juego y con un precio más que interesante, pero... ¿está a la altura de la saga?

Bastante largo y con muchísimas posibilidades, estamos ante una de las claves de la saga, bien desarrollada en esta entrega.

Si hay un punto en el que destaquen los juegos de Rockstar es en sus posibilidades jugables; centenares de misiones y miles de cosas que hacer a lo largo y ancho de una enorme ciudad (en este caso, de dos).

Completar todas las misiones de Liberty City Stories nos llevará alrededor de las 12 horas (además, todas son re-jugables), pero las misiones lineales son sólo una parte del todo que supone el juego.
Una vez completemos el juego (o paralelamente), podemos embarcarnos en decenas y decenas de sub-misiones; podemos buscar determinados coches, hacer de taxistas, pizzeros o conductores de ambulancia, llegar a determinadas localizaciones, participar en carreras ilegales o simplemente dedicarnos a causar un caos lo más grande posible... sacando nuestro lado más salvaje.

El juego incluye un contador de porcentaje para ver cuánto hemos hecho y llenar el 100% nos mantendrá ocupados muchísimo tiempo.

A lo largo de la aventura iremos consiguiendo también letales armas (desde bates y cuchillos hasta ametralladoras pasando por lanzallamas) y nuevos vehículos, que podemos conservar en nuestra guarida. Utilizar esas nuevas armas y vehículos, además de divertido permite realizar más fácilmente muchas misiones.

En el punto negativo, extras incluidos en otras entregas no están disponibles aquí; ahora no podremos cambiar nuestra constitución, no podemos comprar una casa, no podemos nadar (el agua vuelve a ser tan letal como en GTA III...) y armas y vehículos han desaparecido (como la bici). También se elimina el modo multijugador presente en la versión de PSP, que pese a no ser la panacea era bastante divertido y podría haberse incorporado fácilmente dada la mayor potencia de PS2 (y más teniendo en cuenta que San Andreas tenía). Al menos encontramos una búsqueda de 100 objetos ocultos a lo largo del juego que disparará las horas de los más completistas...

El estilo GTA sigue funcionando muy bien, y aunque se hayan reducido las misiones el título incluso mejora al original con un control muy preciso.

El paso de PSP a PS2 se traduce en una considerable mejora en el control del juego, ya que el analógico de Playstation 2 resulta bastante más preciso (y cómodo), algo que destaca claramente en ciertas misiones (principalmente en la conducción). El segundo analógico nos permite un mejor control sobre la cámara del juego, haciendo más intuitivo el desarrollo del juego.

Hacernos con el control de Tony Cipriani es realmente sencillo; tenemos nuestro salto, un botón para usar el arma y otro para correr; a la hora de los tiroteos tenemos un botón para fijar los blancos y un montón de posibilidades gracias al arsenal de armas que podemos conseguir, desde armas de fuego hasta bates y cuchillos pasando por la siempre útil paliza luchando cuerpo a cuerpo.

Pero sin duda, el punto más fuerte en este apartado es la conducción y las misiones que la implican; dado que vamos a encontrar tráfico real a lo largo y ancho de la ciudad el desarrollo de una misma misión puede cambiar mucho según nuestra pericia al volante. Podemos ser respetuosos con el tráfico, ir despacio y respetando señales y semáforos, mostrar una conducción más agresiva (o temeraria) y conducir libremente esquivando al resto de coches con toda la ciudad como nuestro patio de juegos, o directamente pillar un vehículo de gran peso y provocar el caos... eso sí, cuidado con la policía, que no va a quedarse con las manos cruzadas y que pronto nos pondrá en busca y captura (más agresivamente según vayamos subiendo la barra de caos). Las posibilidades jugables, el poder cambiar de coche o moto libremente (robando lo que veamos) se convierten rápidamente en la sal de este juego.

El desarrollo de las misiones incluye objetivos muy variados (conducción, asalto, protección de un personaje), y a veces nos ofrece incluso colaboración de otros mafiosos fieles a la familia, que nos apoyarán en determinadas acciones. Y aunque en términos generales las misiones no son tan largas (ni completas) como en otras entregas, sí que sorprenderán a los recién llegados a la saga (y más de una vez, a los veteranos).

Nada nuevo bajo el sol; por una parte, estamos ante un remake y por otra el juego no tiene nada que no hayamos visto en otras entregas.

Para bien o para mal, Libery City Stories es un digno exponente de la saga GTA. Esto supone una total fidelidad a la saga, pero también una preocupante falta de novedades.

En su concepción para PSP, Liberty City Stories era el primer GTA portátil, y pese a no incluir novedades ?reales?, esto parecía suficiente como para justificar el título y perdonarle su excesivo parecido a la tercera entrega; pero claro, ahora hablamos de una consola que ha recibido las 3 entregas anteriores...

Los detalles más valorables de GTA (y que no son nuevos) son una estupenda puesta en escena, incluyendo una trama muy trabajada y una ciudad que parece viva.

Para los aficionados que han jugado a la saga esto supone un interesante aliciente, ya que en esta entrega se conectan muchos personajes con los que luego serán piezas fundamentales de GTA III, convirtiendo este juego en una precuela (y muy bien hilada) del juego original. Este ?viaje al pasado? es más que interesante para los veteranos del juego, que verán como ciertos personajes del juego se convertirán (por nuestra influencia) en los personajes que ya conocen. Sin embargo, y para ser justos las tramas y personajes de otras entregas están más trabajadas, presentando figuras más realistas y un desarrollo más profundo e interesante.

Destacan detalles como la música presente en los coches, la radio (que permite cambiar de emisora y tiene divertidas bromas ? en inglés ? e incluso locutores) y el mimo puesto a la hora de recrear una ciudad, incluyendo tráfico real y patrones de conducta de los personajes, que ayudan a salvar al juego de una nota aún más baja.

Además de no alcanzar la calidad de otras entregas, el juego tiene problemillas con el engine gráfico. Incomprensible.

En el apartado gráfico, el resultado es muy mejorable. Pese al mimo de grafistas y diseñadores, queda meridianamente claro desde el principio que estamos ante un port de una consola inferior, adaptado de 16:9 a 4:3. Juegos como GTA Vice City o San Andreas superan a esta entrega en todos y cada uno de los aspectos; cantidad de polígonos, suavidad de movimiento, física, engine...

Nuestro personaje, aunque personalizable en vestimenta, es un poco pobre en cuanto a su acabado, necesita urgentemente más polígonos; esto se agrava en determinados modelos, un poco pobres y muy repetidos (no es raro ver 5 veces la misma ?persona? a lo largo de una calle). En los vehículos la cosa mejora, presentando todos numerosos efectos de deformación; lamentablemente, la variedad no es tan alta como en otras entregas.

En cuanto al engine, algo mejor; la carga poligonal no es tan alta como en otras entregas, y eso reduce las ralentizaciones y tirones del juego, aunque desgraciada ? e incomprensiblemente ? los problemas de pérdida de velocidad y popping siguen estando presentes en determinados momentos del juego.

La I.A. del juego, buena pero mejorable; es cierto que los enemigos son bastante inteligentes (no tanto los peatones) y que vamos a tener misiones con apoyo de personajes aliados, pero ni tenemos posibilidad de darles órdenes (como en San Andreas) ni son tan efectivos.

En el apartado sonoro, la cosa mejora, sobre todo por la cantidad y variedad de melodías incluidas. A la banda sonora principal, que ambienta perfectamente las misiones hay que sumarle la que suena al subirse a cada vehículo (y que podemos cambiar gracias a la radio), incluyendo ópera, pop, rock, rap y hasta un comentarista. El remix principal de temas corre a cargo de DJ Clue , y el resultado es notable, aunque no se consigue alcanzar -por muy poco- la calidad de las últimas entregas. Por su parte, el doblaje del juego es genial, pero está completamente en inglés (subtitulado en las escenas principales). Los efectos sonoros (explosiones, tiroteos, golpes, sirenas...) muy buenos, a la altura de la saga.

Por último, nuevo tirón de orejas para la versión PAL del juego, que viene sin selector 50/60 Hz, y van ya...