GOTCHA FORCE

Prepárate, porque el destino de nuestro planeta de nuevo se encuentra en tus manos? Bueno, exactamente no en las tuyas, sino en la de los borgs, una raza de pequeños robots (del tamaño de un juguete) cuyo poder no hace justicia a su tamaño. Nuestro protagonista, Kou, es un niño que acaba de llegar a un barrio nuevo donde va a conocer a uno de los integrantes de los Gotcha Borgs, G-Red. Este le cuenta que la Tierra está en peligro, ya que la fuerza que destruyó su planeta - los Death Borgs ? acaban de llegar al nuestro con la intención de dominarlo, y le propone la creación de una nueva fuerza de combate para la eliminación de los borgs malvados: ¡GOTCHA FORCE!

Junto a Kou iremos derrotando a los distintos comandos que han llegado al barrio, mientras descubrimos que la mayoría de los niños de la ciudad han conseguido también su propia fuerza de borgs, y después de explicarles la situación (y derrotarlos en combate) se irán uniendo a nuestra fuerza, sirviéndonos de aliados en las batallas.
Con este juego, CAPCOM nos presenta su nuevo juego de lucha. Basta ser un poco aficionado a este mundillo para recordar que, junto a SNK, CAPCOM es la reina del género (Street Fighter, Power Stone, CAPCOM vs? y un largísimo etcétera) y ahora viene dispuesta a mantener su corona. ¿Lo logrará?

El no poder elegir claramente nuestro equipo daña muy severamente el modo versus, aunque sabemos agradecer el modo cooperativo incluido (y las fusiones).

CAPCOM va directa al grano en este campo y nos propone una enorme cantidad de personajes para añadir a nuestra colección: 200 borgs. Obviamente, conseguir dicha meta nos costará una tremenda cantidad de horas de combate inmersos en el modo historia, y nos obligará a rejugarlo varias veces (eso sí, hacerlo con los robots conseguidos en partidas anteriores es mucho más divertido). Además, en ciertos combates encontraremos piezas de los modelos de borgs más potentes (y raros), y tendremos que buscar todos sus restos para ensamblarlos. Claro que, si queremos facilitarnos la tarea de colección, la mejor forma es buscar a un amigo que tenga el juego y esté dispuesto al intercambio.
Sin embargo, aquí tenemos que tocar uno de los puntos más raros de Gotcha Force; su modo multijugador. Por un lado, CAPCOM se marca un puntazo e incluye un modo ?Desafío?, paralelo al modo principal y en el que podremos cooperar con un amigo para vencer al ordenador, al mando de distintas configuraciones de borgs. Aquí es mucho más importante el uso simultáneo del turbo, que nos hará maquinas de matar durante un corto tiempo, y que incluso (depende de los personajes que llevemos) nos permitirá fusionarnos, manejando uno de nosotros el borg fusionado y otro su artillería.

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Y por otra parte, el que quizás sea el punto más negro del apartado, el modo ?versus?. Aquí podemos enfrentarnos en batallas de hasta cuatro jugadores, a pantalla partida y con todo tipo de combinaciones: todos contra todos, por equipos, con ayuda de la consola? El problema viene dado a la hora de elegir nuestras fuerzas, y es que tal elección no existe. Al empezar, se cargará la fuerza que el primer player haya editado en la primera memory card, y luego se irán cargando las de los demás jugadores (en las consecutivas). Claro, normalmente los otros jugadores no van a tener el juego, así que por defecto cargarán la misma que el primer player. Esta fuerza no se puede editar, así que los combates se tienen que realizar con los mismos personajes para los cuatro jugadores. La única solución que nos dan los programadores es la de elegir aleatoriamente, o la de editar previamente tantas fuerzas como jugadores vayan a enfrentarse y guardarlas en la memory (aunque habrá que repetir todo el proceso cuando alguien quiera cambiar de personaje). Sin duda el punto más flojo de este apartado.

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El sistema, aunque simple, ofrece un gran número de posibilidades al configurar nuestro grupo de ataque.

Sin dudar, este es el juego de lucha más sencillo de controlar al que CAPCOM nos ha enfrentado nunca. Sólo 2 botones de ataque (y uno de salto) bastarán para desatar todo el poder de nuestro borg, dividiendo nuestro abanico de golpes en cercanos y lejanos. Añadid un botón de turbo y otro para fijar blanco, y ¡listos para el combate!

Seguro que algunos fans de SEGA recordaréis ?Virtua On?, el juego de enfrentamientos entre robots en 3D con la cámara fija en nuestra espalda. Pues bien, este Gotcha Force viene a ser un primo hermano de ese sistema; no dejes de disparar ni un segundo mientras esquivas el fuego enemigo, y utilizas los elementos del escenario como cobertura, esperando la oportunidad de acercarte al enemigo y destrozarlo cuerpo a cuerpo con un combo. Dada la tremenda simplicidad de control (no hay magias, ni complicadas combinaciones de botones) los combates uno contra uno pueden aburrirnos muy pronto, así que? ¿por qué enfrentarnos a un solo enemigo si podemos hacerlo con un batallón? Así, el 90 % del tiempo estaremos luchando contra una fuerza muy superior numéricamente, aunque sus soldados van a ser más débiles que nosotros y será su comandante el que nos ponga en apuros. Para equilibrar un poco las cosas, podremos añadir a un compañero manejado por la consola, y cuya personalidad influirá terriblemente en el combate; puede ser estratégico, de fuerza bruta, con borgs de apoyo (que nos curan o nos mejoran), que nos de fuego de cobertura? hay para todos los gustos.

Todos los comandos del juego (incluido el nuestro) vienen definidos por un concepto muy importante, los puntos GF. Estos puntos condicionan la cantidad (y calidad) de borgs que podemos añadir a nuestra fuerza. En principio empezamos con una fuerza de 300 puntos, la justa para tener a nuestro primer borg, G-Red. Conforme vayamos ganando combates, esta fuerza irá creciendo hasta llegar a algunos miles de puntos y podremos aumentar nuestro comando con los borgs que hayamos conseguido peleando; así, nosotros (y nuestros aliados) iremos añadiendo más personajes según nuestras preferencias; pocos de gran poder o una fuerza de gran numero pero pequeño poder. Y cuando un borg caiga en combate, el siguiente en nuestra lista irá a sustituirlo.

Sin llegar a ser un juego innovador, destaca en el género por bastantes aspectos, principalmente por historia y personajes.

Como ya hemos dicho en otro apartado, el sistema principal de lucha entre robots es un heredero de ?Virtua On?, enriquecido por ciertos aspectos como el modo cooperativo, o los múltiples rivales y enemigos finales enormes, pero que no brilla por su originalidad.

Los puntos que más nos han gustado son, por un lado la ambientación del juego, destacando la intro con dibujos animados al más puro estilo anime. Cada fase del juego está estructurada como un episodio de una serie, dónde primero conoceremos a todos los niños de nuestro barrio que tienen un borg (todos con un aspecto muy manga) y luego se nos unirán en distintas misiones del estilo: ?peligro, el colegio es un campo de batalla? o ?mi cuarto ha sido conquistado por la death force?. Antes y después de cada uno de estas misiones, tendremos una conversación entre nuestros protagonistas, lo que hace que el juego se haga mucho menos monótono.
Por otra parte, el enorme numero de borgs para obtener incluye algunos diseños realmente geniales: ninjas, caballeros vampiro, dragones, valkirias voladoras? Algunos de los diseños son absolutamente geniales, y las diferencias entre ellos a la hora de manejarlos enormes, por lo que componer la fuerza perfecta requerirá grandes dosis de estrategia.

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El nivel gráfico está trabajado, pero no consigue brillar. El sonoro está aún más bajo, y el juego viene sin traducción alguna.

Si bien es cierto que CAPCOM es experta en conseguir cosas impresionantes en este apartado con algunos títulos, exprimiendo al máximo el hardware, no es menos cierto que para otros títulos simplemente se limitan a crear un engine sólido y efectista y se centran en otros aspectos. Este Gotcha Force es un claro exponente del segundo grupo, y aunque muestra algunos aspectos muy trabajados (principalmente los pequeños robots) no resulta demasiado espectacular.
Los combates se van a desarrollar en unos escenarios bastante grandes, que representan zonas del barrio o partes de la casa, y que están perfectamente reproducidos según la escala de nuestros personajes (en el cuarto de nuestro protagonista podemos luchar entre la colección de mangas que tiene desparramados por el suelo). Y aunque suelen ser bastante parecidos entre sí, incorporar elementos interesantes, como la posibilidad de destruir algunas áreas o la de incorporar distintas alturas.

Claro, si alejamos mucho los personajes el zoom hará que podamos perdernos gran parte del trabajo de los diseñadores. Basta utilizar un borg que ataque de cerca para comprobar el lujo de detalles incorporados, como los tornillos, sus pequeñas armas, capas, espadas?

El punto más negro del aspecto gráfico lo ponen las cámaras. A veces, principalmente cerca de objetos muy grandes (incluidos los enormes monstruos gigantes) la cámara principal se ?despista? un poco, y podemos encontrarnos totalmente perdidos. Una vez hechos al sistema de juego, te das cuenta que bastan un par de clics en el botón de ?cambio de objetivo? para que todo vuelva a estar en su lugar.
Aún así el fallo es bastante grave y puede penalizarnos mucho en batalla, ya que los ataques de nuestros enemigos pueden encadenarse, y mientras nosotros saltamos de una explosión a otra sin ver apenas nada, la cámara es incapaz de ofrecernos una vista mínimamente coherente de la situación.
El otro punto que flojea es el sonoro. Por un lado, el juego no está doblado, ni siquiera traducido, y esto le puede pesar a los más pequeños, que no van a entender nada de las múltiples conversaciones que tienen lugar, y pueden aburrirse (aunque también pueden pasarlas). Por otro, las músicas son bastante sosas, y aunque encontramos algunas melodías que ambientan bastante, el nivel general está bastante bajo.