Si contamos todas las supuestas novedades que la compañía desarrolladora, Turn 10 Studios, afirma que tiene Forza 6 podríamos decir que estamos ante una auténtica revolución en el mundo de la conducción. Sin embargo, para todos aquellos que hayamos jugado a Forza 5 (la anterior entrega de la saga aparecida hace 2 años en esta misma consola, Xbox One) no notaremos que a la hora de conducir, de correr en los circuitos, de configurar los coches, o de las posibilidades que ofrece el juego en cualquiera de sus modos, no vemos una gran diferencia como para justificar gastarse los 60? que cuesta el día de su lanzamiento (sí que está bien si nos queremos gastar el dinero si el juego se baja de precio meses después de su lanzamiento). Como decimos,
hay muchas novedades, pero son tan mínimas que casi no se aprecian a menos que seas de ese tipo de jugador que solo se compra un juego al año, o bien que solo te gusten los juegos de coches, y quiera tener coches nuevos, circuitos nuevos, una interfaz distintas, nuevas posibilidades de configurar tu coche, o de pequeños cambios en la jugabilidad (como el sistema de cartas, la configuración de las partidas multijugador, o los nuevos circuitos). Ya hemos dicho en otras ocasiones que en juegos donde hay historia, o un sistema de juego distinto tiene ciertos sentido hacer una franquicia que cada poco tiempo lance un nuevo juego con ciertos retoques para contentar a su legión de fans, pero no creemos que una franquicia como Forza lo necesite y cuyo resultado puede, perfectamente, quemar a sus seguidores y hacerles que no se compren una nueva entrega hasta que, al menos, baje de precio. Quizás con la excusa de ser el décimo aniversario de la saga en 2015 se han visto obligados a sacar este Forza 6, pero para nosotros si se hubiesen esperado un año y hubiesen incluído muchas novedades a nivel de jugabilidad (y alguna que otra a nivel técnico si lo comparamos con Project Cars lanzado también este mismo año), hubiese sido un mejor juego. ¡Ojo! Forza 6 no es para nada un juego malo, pero el camino de ser una franquicia que lanza un nuevo juego cada dos años le va a hacer más daño que beneficio.