Posiblemente el punto más flojo de
Fate/Samurai Remnant es el apartado visual, que viene un poco atado por las versiones de Switch y PS4 (siendo, en líneas generales, un juego más de la anterior generación que de la actual), y que no consigue deslumbrar en PC o PS5. Afortunadamente tenemos un gran trabajo de diseñadores de personajes y artistas gráficos, dando lugar a un consistente estilo visual con un elaborado
cel-shading, que además se complementa muy bien con los elaborados escenarios. Hay que destacar también que el juego no presenta fallos visuales de ningún tipo, y que la IA de los enemigos es más alta de lo que solemos encontrarnos en los
hack'n slash habituales; no hay toneladas de enemigos en pantalla y combos de centenares de muertos, pero tampoco se echan en falta.
La banda sonora también alcanza un buen nivel, gracias a un gran trabajo de
Keita Haga y Daisuke Shinoda, que alternan a la perfección temas muy cañeros para las batallas, pero también otros tranquilos y muy ambientales para las partes de
visual novel, consiguiendo un equilibrio muy consistente. En cuanto a las voces, se agradece la opción de contar con las originales japonesas (nuestra elección) junto al doblaje al inglés; lo que le pasa factura al juego es la falta de traducción al castellano.