FaceBreaker K.O. Party

Para la primera sesión con este juego quise hacer un experimento sociológico, dado que el juego lleva como subtítulo K.O. Party, no quise afrontar en solitario la toma de contacto con este juego, así que elegí a un sujeto bastante representativo de más de la mitad de usuarios de wii, el señor Pepe. Jugador incansable de wii sports, fiero lanzador de bolos y con la capacidad innata de tumbar a un mii en el boxeo en menos de 10 segundos.
Al ver la carátula del juego su rostro se iluminó, y no tardó una milésima de segundo en aferrarse a su wiimote con su nunchuck, tan rápido fue que le tocó ser el player 1 en la wii. Así que le dije - bueno, ve cargando el juego mientras cojo mi mando. Mientras sacaba mi wiimote de color naranja de la funda de cuero y lo encendía me percaté de la mirada del señor Pepe clavada en mi. -Pero, ¿este juego está en inglés? -me dijo con un leve atisbo de decepción. ?¡Ups!, me temo que si ?le dije ?pero puedes leer el manual que está en perfecto castellano- y él con rostro perplejo me preguntó -¿manual? ¿eso que és?
En resumen, acabé indicándole dónde y qué pulsar en cada momento. Labor nada agradable para mi incipiente úlcera.


Una de las opciones que nos ofrece el menú principal es el Fighter's Corner, donde podremos crear perfiles (eligiendo un gracioso avatar) para todas las personas que vayan a jugar, en una partida podrán jugar hasta cuatro personas con 2 wiimotes y sus respectivos nunchucks. Y muy importante también es la opción How to play, la que explica cómo se juega y que yo después de habersela traducido al señor Pepe paso a resumiros.
Para empezar olvidaros del juego de boxeo de wii sports por completo, es más, olvidaros de cualquier juego de boxeo que haya existido nunca. El único movimiento que haréis parecido al boxeo será mover rápidamente los mandos hacia adelante, cada mando corresponde a un brazo. Así se hacen los Jabs (golpes directos o crochets). Si hacéis lo mismo con B pulsado los daréis agachados. Si lo haceis con la A pulsada, será un HayBreaker (uppercut).
También se pueden cargar los golpes inclinando los mandos hacia atrás y con el joystick del nunchaco podremos mover a nuestro personaje, mientras que podremos usar la cruceta del wiimote para zafarnos de las cuerdas o empujar al contrincante para acorralarlo contra las cuerdas.

Sistema de Combos
El sistema de combos es simple, hay 4 recuadros que se van cargando cada vez que hagamos bien un golpe directo, si en el siguiente golpe pulsamos A, conseguiremos ejecutar el golpe especial. Y el golpe más fuerte de todos, con los cuatro recuadros encendidos será un FaceBreaker, golpe que terminará el encuentro y que reventará la cara a nuestro rival. Cada personaje tiene su estilo personal de hacerlos.

Defensa
La defensa es simple, aunque bastante difícil de usar, y prácticamente cuestión de suerte, ya que tendremos que adivinar qué golpe va a hacer el contrario para que esta sea efectiva. La IA de la máquina sin embargo no tiene problema en bloquear nuestros mejores golpes.
En las instrucciones veremos una gráfica que lo detalla todo claramente. Los golpes directos se bloquean con una defensa simple (pulsando Z). Y Los golpes especiales se bloquean con golpes directos.
También podremos defendernos esquivando los golpes levantando los puños al mismo tiempo que nos atacan, y si justo en ese instante pulsamos Z pararemos el golpe sujetando el puño del contrario, lo que nos permitirá contraatacar con un ataque fuerte.

Otra de las opciones en la que pueden jugar de 2 a 4 personas es el insulso Punch-o-matic. Un modo de juego en el que una máquina tragaperras aleatoriamente eligirá pruebas en las que compiten los jugadores. Al principio pensé que iba a ser hasta divertido, pero cuando descubres de qué tratan los minijuegos te sientes como poco estafado. Encontraremos juegos en los que hay que dar una serie de golpes al contrincante, por ejemplo: golpea 5 Haybreakers, el primero que propine 5 de esos golpes gana. Pues todos los minijuegos son así, pero con diferentes tipos de golpes o movimientos defensivos, es como si fuera una sesión de entrenamiento. Y como postre un minijuego especial, el minijuego de los minijuegos, ¡tiembla wii-play, nos referimos a ¡¡Tiro al buitre!!.(en el manual pone patos y pajaritos, pero que no os engañen, son buitres y además son feos). El juego es bién simple, hay que apuntar con el wiimote a los pájaros de nuestro color, quienes impertérritos cruzan la pantalla con un gracioso vuelo senoidal. ¿Material de relleno? No lo creo.
El señor Pepe me miraba fijamente, presentía que algo no iba bién. -¿probamos otro modo de juego? ?me dijo justo cuando mi dedo pulgar buscaban un modo de volver al menú principal.
Así que fuimos directamente al modo Arcade, en el que puedes jugar una partida rápida sin complicaciones. El señor Pepe eligió a Ice, y yo elegí a Molotov, pensé que si salía en la portada en primer plano debía ser por algo... además me venía de escándalo para ilustrar el análisis con la siguiente captura en la que aparecen ambos contrincantes.


El señor Pepe, pensando que iba a repetir su proeza de tumbar a un mii en 10 segundos, comenzó a lanzar crochets de izquierda y derecha, con una contundencia tal, que me asustaba pensar qué pasaría si se le escapara el mando. Yo simplemente bloqueé, luego le tumbé con un uppercut, cargé mis cuadros de combo empalmando 4 golpes seguidos y propiné un tremendo FaceBreaker que destrozó a Ice sin contemplaciones. Muy violento todo si no fuera por el aspecto cómico de los personajes. Ante su enfado, que iba creciendo por momentos, volví a explicarle al señor pepe cómo funcionaba el juego. Lo volví a destrozar un par de veces y la siguiente me dejé ganar, pero estaba claro, este juego con aspecto cómico no es tan casual como el señor Pepe esperaba. Quitó el juego y cargó el Wii Sports diciendo, -venga, ¿quieres que tumbe a tu mii en 10 segundos?, atrévete.

Para esta segunda sesión precisé la ayuda de mi vecinito Tomás, que a sus 13 años ya apunta maneras. Terminamos de probar el resto de opciones del juego y ya he podido sacar mis conclusiones del juego.
La opción TKO, combate por equipos, la más entretenida del juego, permite jugar entre dos y cuatro jugadores, quienes irán seleccionando luchadores uno a uno y por turnos, para crear un equipo de tres. Y luego (también por turnos) deben elegir cuál de sus luchadores luchará contra otro luchador rival, y es que con las partidas Tomás y yo nos dimos cuenta que hay luchadores que son más efectivos contra otros, así que este modo de juego entre jugadores de nivel parecido acabará siendo lo más socorrido del juego.

Por último, la opción para un solo jugador, Brawl for it all, consiste en 4 torneos, en los que tendremos que luchar un determinado número de veces para finalmente luchar contra un jefe final y conseguir el cinturón. Sólo hay jefe final en los 3 últimos torneos, y dichos jefes pondrán a prueba nuestros reflejos, o más bién nuestra suerte para bloquear sus ataques, ya que ellos se lo montan bastante bién, de hecho fue en el segundo torneo donde Tomás se fue a su casa diciendo nosequé de una úlcera que le iba a salir.

Las batallas con los jefes finales tienen una particularidad y es que cuando nos tumben tendremos que jugar al juego de los pájaros; cuantos más pájaros matemos más vida recuperaremos al despertarnos.
Lo último que vale la pena reseñar de este juego es el sistema de deformación de caras, que resulta curioso, si jugamos en modo Arcade contra otro jugador y hacemos un FaceBreaker podremos deformar su cara a placer apuntando con el wiimote.


En este video podreis ver un combate íntegro, donde Kiriko se enfrenta a Kekoa. ¿quién ganará?.

Los elementos que se han añadido para alargar la vida al juego no convencen en absoluto, disparar a los pájaros es una experiencia dolorosa.

No está equilibrada en absoluto, algunos luchadores son demasiado efectivos contra otros, y la IA resulta un poco desesperante contra algunos jefes finales.

El proyecto original nos vende un juego de boxeo orientado a jugar en grupo, la idea no es mala, pero no consigue su finalidad, tal vez por culpa de un desarrollo demasiado arriesgado.

Un juego técnicamente funcional, pero que no destaca en nada, tal vez el sistema de deformación de caras es lo único que puede resultar interesante.