Dynasty Warriors 5 - Análisis PlayStation 2

¿A estas alturas, a qué usuario de Ps2 no le suena ?El romance de los 3 reinos?? Esta obra, históricamente la más importante jamás escrita en Oriente, es la base de Kessen y todos los Dynasty Warriors . La historia (que intercala hechos históricos comprobados y otros ?inventados?) cuenta como China se ve fraccionada en 3 ?reinos? ( Wu, Shu y Wei ) tras la muerte del emperador, y como cada uno de los 3 señores de la guerra pertenecientes a cada reino intenta reunificarla bajo su propio poder. En cada uno de los bandos encontraremos guerreros portentosos, estrategas divinos y un sinfín de personajes de gran nobleza.

Este ha sido el punto de partida de cada uno de los Dynasty Warriors que, año tras año, la desarrolladora Omega Force nos ha ido trayendo bajo el sello de Koei . Lo que empezó en PSOne como un juego de lucha (y mediocre, además) se ha acabado convirtiendo en un beat´em up en el que nuestro personaje irá acabando con centenares de soldados de los ejércitos enemigos hasta dar cuenta de los generales del bando contrario . Sin duda, el cambio le ha sentado bien a la saga... ¿pero estamos ante la entrega definitiva?

48 personajes, todos distintos y con su propia historia. Sin duda, el punto fuerte del juego.

Sin duda este es el punto más fuerte del juego de Koei . Englobados en los ejércitos de los 3 reinos( Wu, Shu y Wei ) nos vamos a encontrar la friolera de 48 personajes , aunque más de la mitad no están disponibles desde un principio. Eso sí, en referencia a ?Dynasty Warriors 4? sólo hay 6 nuevas apariciones.

Cada uno de estos personajes tiene sus propias características físicas, su historia, personajes relacionados... Así como su arma preferida, su forma de luchar y sus especiales distintos. Y aunque ciertos patrones de personaje tienden a repetirse (espadachines, lanceros...) el resultado final es bastante bueno, y hay algunas diferencias a la hora de jugar con cada uno de ellos, que obviamente, crecen con personajes de distinta constitución.

Cada personaje tiene una historia propia dividida en capítulos de aproximadamente unas 2 horas de duración (depende de nuestra forma de jugar y del nivel de dificultad elegido). Además, cada personaje tiene un reto especial, el conseguir un ?arma? especial única, para lo que tendremos que cumplir algunas condiciones especiales. Esto hace que, para los completistas, las horas de juego se disparen y se superen (sin demasiado problema) las 100 horas. Eso sí, vamos a participar un buen número de veces en las mismas batallas, aunque desde ángulos distintos, unas veces en un bando y otras en otro, aunque la misión principal siempre suele ser la misma: derrotar al general contrario. Ciertamente, se podía haber añadido algo más de diversidad.

Además del modo principal, el juego presenta algunos modos alternativos para aquellos que no quieran complicarse la vida con la historia y sólo quieran jugar un rato en plan arcade. Dentro del modo ?Challenge? (Desafío) encontramos

- Time Trial : o a ver cuantos enemigos puedes despachar en un tiempo fijo.
- Rampage : o modo furia, donde la barra especial está siempre al límite.
- Bridge Melee : dónde tendremos que despachar a todos los enemigos que podamos en mitad de un puente. Básicamente, un ?survival?.

Además de eso, tenemos un modo Free Battle , dónde cualquier personaje puede librar cualquier batalla, y una Enciclopedia , que documenta todos los hechos históricos y la vida de cada uno de los personajes del juego.

Acción arcade pura y dura. Combos fáciles y destructivos, pero total falta de componente estratégico en las batallas.

Ser un destructor de ejércitos es una tarea relativamente muy sencilla, gracias al intuitivo control que usan los chicos de Koei. Sin posibilidad de cubrirnos, tendremos que utilizar al máximo las posibilidades que nuestros personajes tienen para hacer combos. Tenemos 2 ataques, uno ?rápido? y otro ?potente?, que tendremos que combinar de distintas formas para hacer demoledores ataques. Eso sí, los combos suelen ser fáciles, intuitivos pero limitados.

Al mismo tiempo tenemos un ?medidor de energía especial? (, que una vez cargado nos permite lanzar un devastador ataque contra un batallón de enemigos. Este ataque tiene una segunda forma, aún más útil, cuando estamos heridos de gravedad, y que suele mucho más potente y efectiva.

Para añadir algo más de variedad al elenco de ataques, tenemos un salto fácilmente combinable con combos aéreos y la ayuda de un guardaespaldas, que incluso puede combinar sus ataques con los nuestros. Cada personaje tiene un elenco de varios guardaespaldas (normalmente 8) que irán evolucionando con nosotros en el campo de batalla y aprendiendo nuevas habilidades, llegando hasta el punto de poder ejecutar ataques especiales combinados con nuestro personaje.

Otro extra que sirve para darle ?vidilla? al juego es la aparición de armas (equipables sólo al principio de cada misión) que tienen distintos efectos en la batalla, liberan nuevos especiales y hacen que variemos nuestra forma de jugar. Cada personaje tiene distintas armas de su propio tipo (espadas, lanzas, chakras...). Básicamente estas armas se dividen en 2 grupos: las ?rápidas? y las ?poderosas?, cada una con sus ventajas e inconvenientes.

Por último, y como no todo podía ser pinchar y cortar, hay un pequeño (demasiado pequeño, en realidad) componente estratégico, relacionado con la moral de las tropas . Si en batalla ayudamos a las tropas y acabamos con los capitanes de los distintos campamentos enemigos, la moral de nuestras tropas subirá, con lo que la batalla será más fácil para nosotros. Desgraciadamente, este hecho no es demasiado relevante, y es perfectamente posible salvar una batalla totalmente perdida si acabamos con el general contrario.

No hay novedades apreciables en este apartado respecto con respecto a sus antecesores.

Después de 5 episodios ?oficiales? y algunos paralelos (y más enfocados a la estrategia, como el 4 Xtreme), la saga ha llegado a un punto muerto en este apartado. Es cierto que hay pequeñas novedades (que vamos a comentar), pero la estructura general de una a otra entrega es prácticamente idéntica.

Hay pequeñas mejoras en distintos apartados; la jugabilidad se ve enriquecida por el nuevo sistema de guardaespaldas (aunque las armas ya estaban) y por combos combinados. La adicción tiene 1 modo nuevo (la batalla en el puente) y nuevos personajes, y la historia ha sido relegada a un segundo plano para centrarnos en las batallas , lo cual a nuestro juicio no ha sido tan buena idea.

El problema es que, con tantos personajes, y tratados de una forma tan superficial, uno se lía con los nombres y se pierde completamente en la historia, acabando con las raíces históricas que pudiera tener el título y convirtiéndolo en un mata-mata. Básicamente acabaremos matando soldados de uno u otro bando con alegría y sin importarnos que en absoluto que sean soldados de Wu, Shu y Wei , zombies o robots.
Una lástima echar por tierra el trabajo hecho en el apartado histórico por este sistema, pero...

También hay novedades en el apartado técnico, aunque se limitan a las mejoras de los elementos climáticos añadidos a las batallas: niebla, lluvia... Sin embargo, siguen sin llegar a convencernos (aunque llueva no hay barro, ni charcos...)

El apartado técnico cojea, principalmente en el apartado sonoro. Sin traducción y sin selector 50/60Hz.

La primera vez que vimos Dynasty Warriors 2 en PS2 en movimiento fue todo un espectáculo; enormes ejércitos, decenas de personajes en pantalla, escenarios muy detallados... Cierto es que había detalles por pulir, y básicamente a eso es a lo que se ha dedicado Koei en cada una de las entregas; a pulir defectillos.

Así que, en este Dynasty Warriors 5 han tenido tiempo y oportunidades de pulir hasta dejar brillante. Sin embargo no hemos llegado a la perfección.

Los personajes principales (protagonistas y generales) son lo mejor del apartado; bien animados, sólidos y con un nivel de detalle alto. Los soldados enemigos, son otro cantar... aunque tienen un nivel de detalle mayor que en las primeras entregas, siguen siendo absolutamente clónicos y poco distintos entre sí. En una batalla es raro llegar a encontrar más de 4 o 5 modelos de enemigos distintos.

Los escenarios presentan más y mejores efectos atmosféricos, pero siguen siendo pobres en variedad. Sabemos que el juego está basado en elementos históricos, pero no hay por qué pensar que todos los escenarios dónde se desarrollaron las batallas eran tan parecidos entre sí. Además, encontramos pocos elementos que interactúen con el jugador, y encontrarnos a estas alturas el ?truquito? de poner paredes invisibles para no seguir desarrollando el escenario por determinados sitios es bastante estúpido.

Eso sí, los escenarios son enormes, no se presentan cargas intermedias en toda la batalla y somos interrumpidos en nuestra misión en numerosas ocasiones para enseñarnos como va el enfrentamiento en otras zonas.

Por último, a efectos sonoros, el resultado es mediocre. Todas las voces se han dejado en inglés (y los americanos han hecho un trabajo regular, lleno de altibajos), no hay posibilidad alguna de ponerlas en el japonés original, y durante la batalla no encontraremos demasiadas voces de enemigos o aliados. Eso sí, las voces de nuestro personaje acaban siendo absolutamente rayantes después de escucharlas por centésima vez. Casi mejor que fuesen mudos, o al menos que cada uno tuviera una decena de frases distintas, en lugar de 2.
Las melodías siguen la estela de las voces; acompañan pero no llegan a ambientar lo suficiente. Simplemente están ahí.

Y como remate de un apartado deficiente encontramos que no se han molestado en traducir los textos del juego ni en ponerle un selector . No hay problemas de framerate y el resultado de la versión PAL no es malo, pero seguimos sin entender por qué tenemos que jugar más lento que el resto del mundo, máxime en los juegos de acción.