?
Tras sufrir una larga guerra contra el malvado Deathbringer y su ejército oscuro Avalonia vuelve a estar en paz? Un misterioso héroe, armado con una espada mágica acabó con el monstruo y comenzó un periodo de prosperidad. Desgraciadamente, 5 años después de la batalla han vuelto a aparecer criaturas oscuras ?¿Quién las envía? ¿Ha vuelto DeathBringer? ¿Y qué maleficio ha atacado a la noble reina, cuya personalidad ha cambiado drásticamente?
Así arranca Dragon Quest Swords ? La Reina Enmascarada y la Torre de los espejos, un spin-off (o juego paralelo a la saga) de Dragon Quest VIII que nos propone convertir nuestro mando en una espada; el título, la primera producción de
Square Enix para
Wii muestra un claro esfuerzo de la compañía por explotar las capacidades ? tanto técnicas como jugables ? de la nueva consola de
Nintendo. Acompañadnos en nuestro completo análisis y descubrid en qué han acertado y en qué se han equivocado sus desarrolladores, los chicos de
Genius Sonority.
A nivel jugable,
Dragon Quest Swords se desarrolla en primera persona y cambia los turnos por un original sistema de combate. Con el wiimando como espada,
nuestra mayor preocupación será dar mandobles con rapidez y precisión a nuestros enemigos. También podremos cubrirnos convirtiendo el puntero en un escudo, mejorar nuestras habilidades forjando nuevas espadas y escudos con habilidades únicas o pedir ayuda a nuestros aliados (sólo llevaremos un acompañante) para que nos apoyen con su magia. El hacer combos con los enemigos, bloquear sus ataques
y lanzar golpes especiales a golpe de wiimando es, sin duda, uno de los grandes aciertos del juego, aunque a la larga puede cansar y el mando presente problemillas muy puntuales para reconocer algún movimiento concreto.
Desgraciadamente el juego arrastra un incomodísimo fallo:
la falta de soporte para el nunchuk; no vamos a entrar en cómo se podría haber enriquecido la mecánica de juego haciendo uso de ambos mandos, ni lo incomprensible que resulta renunciar a las posibilidades de un accesorio que se vende con la consola? Lo que realmente es imperdonable
es que a estas alturas alguien nos obligue a movernos en primera persona con la cruceta del wiimote, además cogido en posición vertical (como un mando de TV). En cuanto hay que moverse un poco por la ciudad empiezan las incomodidades, y el movimiento en el mapa tampoco es automático?
Completar la aventura de forma lineal no debería de llevarnos más de una decena de horas, bastante poco para el género? Afortunadamente
hay elementos que disparan la re-jugabilidad, como monstruos alternativos, la posibilidad de mejorar nuestro equipo (espadas y escudos) o un
Modo + para repetir la aventura con un arma legendaria que nos convertirá en un auténtico dios?
Al haber dejado la mayor parte del peso del juego a los combates
la historia puede resultar algo típica e incluso un poquito sosa si lo comparamos con otros títulos de la saga
Dragon Quest. De todas formas, a nivel personal no esperábamos demasiado en este aspecto, y nos ha parecido simplona pero con momentos entrañables; la palabra es ?entretenida?.
Para añadir horas
se han implementado algunos minijuegos que permiten hasta 4 jugadores, pero son bastante básicos y no pasan de una mera curiosidad.
Con la innovadora mecánica de juego como estandarte,
Dragon Quest Swords consigue brillar tanto en el catálogo de
Wii como en el difícil género de los RPG nipones. Además, hay detalles de genialidad (como utilizar el escudo para ?abanicar? los ataques enemigos, y otros que no queremos desvelar) que demuestran el buen hacer de la compañía.
El re-utilizado de enemigos ? típico de la saga ? es un arma de doble filo; por una parte tenemos la genial sensación de la ?vuelta a casa?, y el interés de ver a nuestros monstruos favoritos y sus nuevos patrones de ataque, pero por otra? es más sencillo perder la capacidad de sorpresa. Menos mal que
encontraremos criaturas únicas, personajes con mucho carisma y algunas localizaciones completamente nuevas.
A nivel técnico nos encontramos con un juego correcto, que convence pero no sorprende. El apartado gráfico es sólido y cumple, presentando algunos momentos brillantes; buenos modelados, escenarios convincentes, magias espectaculares? Lo mejor se lo llevan los 4 protagonistas (que además son los diseños más frescos de
Toriyama que hemos visto en años).
El apartado sonoro también está a la altura; melodías típicas de la saga y nuevas composiciones ambientan a las mil maravillas nuestro periplo. Las voces ? en inglés ? no están demasiado mal, y el uso del altavoz del mando durante el combate es un buen detalle.
En el lado negativo,
el aprovechamiento de las posibilidades de la consola, mejorable; por una parte, como ya hemos dicho, se echa en falta el nunchuk. Por otra, la respuesta del mando no es tan precisa como desearíamos?
Destacar ? como siempre ? la correcta traducción del título y una digna edición PAL, con soporte para 480p y 60 Hz.