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Dark Souls III - El mundo de pesadilla, se hace más accesible, aunque siga siendo demencial

por José M. Martínez (@elderlas)
Reseña de Dark Souls III publicada el 11 de Mayo de 2016Pertenece a la saga de juegos Dark SoulsClasificación global: #1018 Clasificación en Xbox One: #239 Clasificación en PC: #390 Clasificación en PlayStation 4: #327Estilo de juego: Action RPG Juego recomendado para mayores de 16 años

Entretenimiento y duración

Casi cualquier jugador que se ponga a los mandos de un juego como éste verá que le costará muchísimo trabajo soltar los mandos, ni siquiera para irse a dormir. Incluso, la desesperación de haber pasado por el mismo sitio muchas veces, y tener que volver a repetir todo otra vez como si fuese la primera vez tiene su morbo (y es lo que a muchos fanboys les gusta de esta franquicia, dicho sea de paso). Cuando apagas la consola (o el PC) pensando en que nunca más volverás a jugar a un juego, y unos minutos más tarde la vuelves a encender diciendo que tienes que volver a intentarlo, y que ya sabes cómo vencer a ese enemigo, es cuando te das cuenta que el juego te ha enganchado irremediablemente, y ese juego es Dark Souls III. El ser ligerísimamente más accesible que sus antecesores, el tener más cosas que hacer que en anteriores entregas, en la imaginación derrochada por sus creadores en escenarios y enemigos, en la ambientación de todo el juego que nos meterá de lleno en este universo, en que las clases de personajes estén más compensadas, en poder invocar a un amigo (o a un desconocido) para que nos ayude contra un enemigo al que no podemos vencer, e incluso en que invada nuestro reino otro jugador para darnos caza... Hay muchísimos elementos que hacen que alguien empiece a jugar y no quiera soltar los mandos hasta finalizarlo, y hablamos de un juego de como mínimo 30 horas, que no está nada mal, y de más del doble si quieres conseguirlo todo. Lo único mencionable a nivel negativo sigue siendo el comportamiento enemigo, que incluso a veces da igual hacerlo todo perfecto, que acabamos muriendo porque una vez iniciado un ataque acabemos muertos (hay veces que recibir un golpe enemigo atonta a nuestro personaje, y en ese momento nada más podemos hacer salvo ver cómo morimos, incluso si llegamos con todos los frascos de estus llenos). Tampoco nos gusta que subir de nivel nuestro personaje sirva de tan poco, y aunque nos haga ligeramente más poderosos, no lo vemos reflejado en el juego hasta que no hemos subido muchísimo de nivel, lo que hace que pierda ese componente adictivo que engancha a los jugadores de rol por el simple hecho de crear al personaje más potente posible.

Control y opciones de juego

El sistema de control es casi idéntico que en anteriores entregas, lo que hará que cualquier jugador que ya tenga dominado los mandos de estos, se sentirá cómo desde el inicio. Quizás, si lo comparamos con otros hack'n slash, el mapeado de botones sea distinto, pero no es algo que sea malo, ya que acaba funcionando muy bien cuando llevamos alguna que otra hora. En cuanto a opciones de juego, no estamos ante un juego típico, con un menú donde tendremos multijugador, modo cooperativo, desafíos ni nada por el estilo. En Dark Souls III está todo integrado dentro del juego, y si queremos cooperativo tendremos que encontrar el objeto concreto para poder llamar a otros jugadores, y si queremos multijugador competitivo también (aunque a partir de cierto nivel, cualquier otro jugador podrá invadir tu partida). Todo esto es algo muy bueno, por la inmersión y la sensación de estar de verdad en un mundo como éste, pero pierde la posibilidad de disfrutar con quien queremos y a lo que queremos, al no haber un lobby o pantalla de encuentro donde poder conectarnos. En cuanto a la dificultad del juego, a pesar de ser ligerísimamente más accesible que anteriores entregas, sigue siendo un juego muy difícil que echará para atrás a muchos jugadores, y ya no solo por ver cómo morimos una vez tras otra, si no por el hecho de tener que volver a repetir toda la zona desde el inicio, lo que puede llegar a desesperar en las primeras horas de juego. Una vez que aprendemos cómo se juega, y evolucionamos a nuestro personaje (que también tiene su complegidad averiguarlo mediante ensayo y error, o tirar de alguna guía), las muertes no serán tan continuas y podremos avanzar entre zonas mientras encontramos las hogueras que nos regeneran la salud y los objetos (también hay más hogueras que antes). En definitiva, estamos ante un juego que no es para toda clase de jugadores, ya que si eres de los que lo has probado alguna entrega anterior y no te ha gustado, éste tampoco lo hará, y si te gustaron, éste te encantará. Si no lo has probado, deberías echarle un intento a alguno anterior antes que a éste para descubrir de forma más barata si es tu clase de juego.

Creatividad e innovación

Como es de suponer, si un jugador de Dark Souls (cualquiera de sus entregas) coge este Dark Souls III y en seguida se poner a avanzar sin necesidad de leer nada más, es porque el juego es casi idéntico en todo a los anteriores. Se puede decir que coge algunos elementos de todas las entregas, incluso de Bloodborne, y da al fan lo que realmente espera de un juego como éste. Sin embargo, y salvo lo originalísimo de las criaturas y entornos que encontraremos, o incluso del comportamiento de muchos de ellos (donde sus creadores han echado el resto), no veremos nada que realmente no hayamos visto antes. Las primeras entregas de una franquicia como esta tenían la innovación por bandera, y hoy en día vemos como otros juegos parecidos de la competencia intentan reinventar la fórmula, añadiendo nuevos elementos y cosas que no habíamos visto antes. Sin embargo, el dar al fan lo que espera hace que muchos de ellos se queden con ganas de más, de alguna sorpresa, de algo que de verdad les haga pensar que es un salto hacia delante. Ni tal salto existe, ni a nivel técnico lo vamos a encontrar, ni siquiera a nivel de la historia (que tampoco tiene como tal, ya que básicamente el juego se irá narrando conforme el jugador descubre nuevas zonas y mata a todo bicho viviente que encuentra a su paso). Como decimos, es realmente llamativo a nivel artístico, la imaginación que los creadores han utilizado para crear esas criaturas que (de verdad) parecen sacadas del mismísimo infierno, o de la peor de las pesadillas. Nosotros esperamos algo más de una saga que empieza a estar estancada, y que debería empezar a ofrecernos otras cosas, en su sistema de combate, en la historia, en la exploración o en la evolución del personaje, por no decir en nuevos elementos de juego. Y es que sería tan sencillo que nuestro personaje tuviese que realizar alguna acción más que no fuese explorar y matar (utilización de objetos, puzles, mecanimos que necesitan de ciertas piezas...) Hay cientos de juegos que ofrecen algo más al jugador, pero parece que en FromSoftware, la política es que si algo funciona, no lo toques más. El problema es que empieza a dar signos de agotamiento, y una cuarta entrega igual...

Gráficos, sonidos, IA

Después de haber visto las versiones de Dark Souls III, hay que decir que nos sentimos muy deceptionados con el resultado gráfico. A nivel de texturas y modelados de escenarios, parece que estemos ante la versión de Xbox One y PS4 de Dark Souls II (Scholar of the First Sin), eso sí, con algo más de detalle. Durante el desarrollo, existen como dos tipos de escenarios distintos; los que están muy abiertos, a los que les falta gran cantidad de detalle, y los que están más cerrados, que estos sí que están a un buen nivel. Sin embargo, después de haber visto lo que la misma compañía es capaz de hacer en Bloodborne, tanto en enemigos, como escenarios, como animaciones, como efectos de luces, nos quedamos con ganas de más.Tampoco las texturas están demasiado bien conseguidas, y en algunas zonas parece que les falte color e intensidad (no hablamos del aspecto tétrico que pretende dar, si no de la calidad de la propia textura). Eso sí, hay que alabar la enorme imaginación de sus desarrolladores a la hora de crear escenarios y, sobre todo, enemigos, ya que es casi imposible que dos modelos se parezcan entre sí, presentando un aspecto fabuloso y realmente bien detallados (a la altura de Bloodborne). El juego corre a 1080p y 60FPS aunque la versión Xbox One baja mucho la tasa de frames con bastante asiduidad (la de PS4 menos, pero también pega algún que otro tirón). A nivel sonoro, cumple con lo esperado y estará a un nivel sobresaliente, con algunos sonidos realmente espeluznantes que salen de las gargantas de algunos enemigos, y una gran ambientación que consiguen las melodías en los enfrentamientos contra los jefes finales (no hay música durante el desarrollo normal). Está perfectamente traducido, aunque no está doblado, algo que empieza a ser molesto para un juego con una demanda tan alta.

Conclusión

7.75

Así analizamos en Ultimagame

Los que hayáis jugado a alguno de los anteriores (incluyendo Bloodborne o Demon's Souls) ya sabéis lo que vais a encontrar en Dark Souls III. Y esto es bueno y malo al mismo tiempo, ya que muchos de sus fans esperan lo mismo pero con otros paisajes y enemigos, mientras que otros esperamos siempre algo distinto, algo que no fuese posible en una expansión o DLC. Obviamente, Dark Souls 3 ofrece la misma experiencia que Dark Souls 1, con algunos toques del 2 y algunos detalles de Bloodborne, es decir, un universo donde no sabemos qué está pasando a nuestro alrededor y todo lo averiguaremos explorando los distintos escenarios (enormes), combatiendo contra toda clase de enemigos imaginativos (y muy difíciles de vencer todos ellos), y mejorando a nuestro personaje poco a poco para que cada vez nos cueste menos trabajo hacer las dos primeras acciones (explorar y luchar). ¿Es esto lo que esperaban sus fans? Obviamente sí, aunque también deja fuera a unos cuantos usuarios que esperaban otra cosa, como nuevos elementos que narrasen la historia, un acabado técnico más a la altura de las consolas actuales (por no hablar de los PCs), escenarios más abiertos (en DS2 eran más abiertos que en este DS3, que son algo más lineales), o una selección de diferentes niveles de dificultad, para que los jugadores con menos experiencia pudieran hacerse más fácilmente con el control.

Por nombrar algunos ejemplos de mejora, decir que es cierto que la dificultad ha bajado notablemente con respecto al 1 y al 2, y ahora avanzar es algo más sencillo, pero seguimos teniendo que aprendernos de memoria los movimientos de los enemigos para no sucumbir una y otra vez ante ellos. También las clases de personajes están más compensadas entre sí (ahora el mago no es un patata desde el inicio y en PvP desde casi el principio puede competir contra los mejores guerreros). Obviamente, el diseño y la imaginación de todo el equipo detrás del juego (FromSoftware) sigue siendo uno de los elementos clave para todo el desarrollo, y siguen contando con una capacidad de enganchar tal, que es casi imposible soltar el mando incluso muriendo tantas veces. La verdadera pega de un juego como Dark Souls 3 es que parezca que está diseñado como un juego clásico, de hace muchos años, donde cada enemigo tiene una estrategia para ser vencido, y que de igual tu habilidad con los mandos (excepto en el PvP, donde es imposible aprenderse el comportamiento de todos los jugadores).

Puntúa este juego

Datos de Dark Souls III

Nombre

Dark Souls III
Compańía

FromSoftware
Género

- Action RPG
- 3D

Juego conocido como

Dark Souls 3

Opciones

- Juego competitivo: Competitivo online para 2 jugadores
- Ambientación: Fantasía medieval
- Juego cooperativo: Modo adicional para 3 jugadores online
- Otros detalles: Dificultad muy alta
- Todos los jugadores: Excelente experiencia en solitario
- Opciones de juego: Misiones descargables

Fecha de lanzamiento

en España el 12 de Abril de 2016 (para PC, PlayStation 4 y Xbox One)

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