¡Bienvenido, nuevo recluta de la
Agencia! Elige uno de los 4 rostros disponibles - uaau -, el color de tu traje - en varias tonalidades, doble uaaau - y salta a la acción en
Pacific City. La jugabilidad,
típica de los juegos sandbox te permitirá
luchar armado o con brutales combos, a pie o en distintos tipos de vehículo, y lo más interesante,
ir mejorando con cada acción que realizas. Lo que empieza siendo una capacidad de salto de atleta olímpico acaba con la capacidad de saltar de azotea de edificio a azotea de edificio... Y más allá. Como veis, suena muy divertido. Y lo es cuando no lo fastidia la mecánica de juego. Al unir
conducción, plataformas y acción (cuerpo a cuerpo / tiroteos), los chicos de
Rufian Games no han sabido mantener una calidad intermedia, y nos encontramos una línea claramente descendente con momentos brillantes... Y otros muy oscuros; por ejemplo, el sistema de apuntado automático (en lo bajo de esa pirámide) tiende a fallar continuamente, y muchas veces nos impide disparar donde queremos, algo imperdonable en un título de acción.
Completar la
salvación de la ciudad no nos llevará más de 6-8 horas, repitiendo una y otra vez misiones de asalto (con objetivos muy similares) en distintas áreas - aquí juega el factor nostalgia - contra los distintos bandos.
Así, el mejor reclamo para seguir jugando son
los orbes que encontraremos repartidos por distintas partes de Pacific City; más de
500 orbes de agilidad nos esperan en posiciones estratéticas de Pacific City, 300 están ocultos, hay un nuevo tipo que tendremos que perseguir, y también encontraremos otros exclusivos para los jugadores online. La mejora que iremos viendo - y viviendo - en nuestro agente es un reclamo poderoso e interesante para exprimir
las carreras en coche o provocar muertes masivas, haciéndonos cada vez más fuertes y eficientes.
Si jugaste al primer
Crackdown ya sabes lo que vas a encontrarte en esta segunda parte, con las novedades relevantes de que
Pacific City está en crisis, invadida por una especie de zombies y una resistencia ciudadana a
La Agencia, y que el desarrollo de las misiones se ha abierto al modo multijugador,
con cuatro jugadores pudiendo cooperar en todas las misiones. Vuelve a ser esta faceta donde encontramos
más innovación, y es que además de la opción de sumar jugadores a nuestra partida (o sumarnos nosotros a las suyas) hay
3 modos para 16 jugadores compitiendo entre sí, a saber: Caza de Cohetes, Duelo a Muerte y Duelo a Muerte por Equipos, que prometen un buen número de horas de juego.
A nivel técnico
si bien es verdad que en un primer vistazo el juego no sorprende - no parece haber una gran evolución con respecto a la primera entrega - cuando nos damos cuenta
del tamaño y posibilidades de Pacific City la cosa cambia; ya no hay niebla, hay una considerable cantidad de modelados para enemigos, ciudadanos y coches, el caos que podemos causar es enorme... Y todo esto funciona a las mil maravillas con 4 jugadores conectados simultáneamente. Es cierto que esto no nos hace olvidarnos de una física mejorable, algunos efectos pobretones o una IA de risa, pero ayuda a sobrellevarlo con una sonrisa en la cara.
El doblaje de un título siempre es motivo de celebración... Pero es difícil que un solo doblador - que, además, no está muy motivado con su trabajo, pese a que la técnica con la que interpreta sea excelente - consiga mantener nuestro interés con una historia que pierde fuerza en cada capítulo. Con todo, la voz de
Ramon Langa - doblador habitual de
Bruce Willis - ayuda a que el desarrollo no sea tan frío, y nos da algunos de los momentos más divertidos de
Crackdown 2.