Cuando me enteré que el Call of Duty de este 2019 iba a ser otra nueva versión de un juego de 2007, tengo que reconocer que me sorprendió bastante, positiva y negativamente. Por un lado, hablamos de uno de los mejores FPS que existen y que marcó un antes y un después en el género y en la forma de contar historias dentro de los videojuegos. Sus creadores evolucionario después la fórmula con Modern Warfare 2 y 3, y finalmente consiguieron nuevamente un nuevo salto cualitativo con Infinite Warfare en cuanto a forma de contar la historia se refiere (aunque el juego en sí no era lo que queríamos ni esperábamos).

Por el lado negativo, podría sentar un curioso precedente. Y es que hablamos de un juego de 2007 que ya fue remasterizado en 2016, y que 3 años más tarde ha vuelto a ser remasterizado. Sus creadores dicen que no es un remaster, sino un juego totalmente nuevo que coge elementos, misiones, situaciones y personajes del original y lo llevan en una nueva dirección, y como decimos esto puede estar bien. El problema es como decir que si la historia de un juego está bien, para qué vamos a escribir otra, ya que lo único que hay que hacer es retocarla y añadirle mejores gráficos, una y otra vez, lo que no tiene mucho sentido.

A pesar de esto, las reacciones en la comunidad de jugadores han sido increiblemente positivas, demostrando una vez más que todo el mundo quiere lo que ya conoce y que no experimenten con lo que ya saben que funciona, hasta que se cansan y quieren otra cosa totalmente distinta. Ese momento llegó en la saga Call of Duty, y los jugadores pedíamos más cada vez y cosas originales y frescas, pero después de tantos experimentos (Infinite Warfare con su juego de naves y personajes poco carismáticos, Black Ops 4 sin modo historia, Advanced Warfare que se quedaba a la mitad de lo que tendría que haber sido...) nos hemos cansado de lo nuevo y volvemos a querer lo viejo, y a ser posible que parezca nuevo.

Personalmente la apuesta me parece muy atrayente porque Modern Warfare, a pesar de no ser el juego perfecto, tenía una gran historia, buenos personajes y algunas de las mejores misiones creadas hasta la fecha en un shooter en primera persona. Así que yo también estoy impaciente por ver lo que sus creadores originales han hecho, simplemente porque también me había cansado ya de tanto experimento. Resident Evil 2 Remake es un gran ejemplo de remake bien hecho. Espero que Modern Warfare sea otro de esos ejemplos.