Antes de echarle el guante a la, hasta el momento, última obra de los creadores de Age of Empires, era un poco reticente sobre lo que nos íbamos a encontrar con Halo Wars. Por un lado, la franquicia más exitosa de Microsoft convertida en un RTS o juego de estrategia en tiempo real me hacía pensar que el espíritu de la trilogía se perdería, y por otro que, desgraciadamente, el control con el controller iba a ser muy impreciso, como la mayoría de los títulos de este género en consola. Tras echar los primeros niveles, la sorpresa ha sido muy positiva, mucho más por uno de los extremos que por otro. Hablamos de la ambientación del juego y su 'espíritu', que no solamente ha quedado fielmente reflejado, sino que en mi opinión
consigue transportar al jugador a un universo mucho más rico, detallado y dinámico que el de la trilogía, lo cual es un logro a tener muy en cuenta a pesar de tener la supervisión de los creadores originales. Una escenas cinemáticas increibles y una narrativa muy superior a la trilogía FPS, además de un completo modo en el que aprenderemos (como ocurriá en AoE3, aunque en esta ocasión de ficción) algunos detalles interesantes de la historia ocurrida antes de la creación del primer Halo. Por supuesto, esto lo convierte en un referente para los amantes de la saga que no querrán perderse muchos más detalles de esta singular historia, y un gran acierto para el título.
El segundo de los puntos del que dudábamos también nos ha sorprendido, no tanto como el primero, pero sí lo suficiente como para mencionarlo. Una de las cosas más negativas de intentar trasladar la 'acción' de los RTS a una consola es el sistema de control, y hasta ahora poco o casi nada ha sido el acierto de trasladar la dualidad, teclado-ratón con un mando de consola (no contamos el control con stylus o wiimote). Curiosamente, en Halo Wars sí que se cumplen las promesas dichas inicialmente de que
todos los controles han sido optimizados para el manejo con dos analógicos y una serie de botones, al contar con un buen número de atajos y selecciones rápidas que nos hacen sentirnos bastante cómodos. Además, se ha intentado simplificar bastante otros detalles para facilitar aún más el uso, como la libertad para crear unidades y recursos donde queramos. Para ello se ha optado por una solución muy similar a la vista en otro RTS de consola (salvando las enormes diferencias, por supuesto), como es Heroes of Mana de DS, donde también contábamos con un lugar predefinido para la creación de estructuras, así como una estructura específica para la creación de recursos, por lo que podemos decir adios con la manita a picar minas y talar árboles, ya que esta unidad lo hace todo. Aún así, también queremos decir que en el momento que empieza a complicarse un poco las misiones (no hace falta irse muy lejos, con la cuarta (quinta con el tutorial) ya nos vale) y necesitamos navegar rápidamente por la pantalla empezamos a tener ciertos problemas al no poder navegar rápidamente entre las distintas posiciones, ya que no contamos con la posibilidad de hacer click en el minimapa, que para ello está, de forma que una vez que descubrimos una situación de conflicto y llegamos hasta ella, sigue resultando algo lento la selección de las unidades que necesitamos, por lo que tendremos que seleccionar todas las unidades cercanas para realizar dicha acción (que también tiene un botón definido, el gatillo derecho).
Por lo que hemos visto hasta ahora, una experiencia muy recomendable, incluso para los fans de los RTS de PC. Seguiremos evolucionando.