Halo 3 ? Análisis Xbox 360

El juego perfecto necesita grandes dosis de innovación, y aquí Bungie ha ido a lo seguro copiando trozo a trozo Halo 2 tanto en el multijugador como en el modo campaña. El resultado ha sido una ligera mejora de lo que ya conocíamos haciendo un juego tremendamente divertido, muy accesible y con un muy bien apartado técnico, pero que no pretende añadir nada al género, ni en esta consola ni en ninguna plataforma.

Como decíamos al principio, los chicos de Bungie se han propuesto hacer el título que todos los fans de esta saga deseaban, consiguiéndolo plenamente. Esto tiene un lado bueno y uno malo como todo. Por una parte, Halo 3 coge todos los ingredientes que han hecho de Halo 2 uno de los juegos más importantes de Xbox y los mejora ligeramente, lo que es muy bueno ya que convierte a este título en una mejora de otro que resultaba ser tremendamente divertido, accesible y muy bien realizado. Así, Halo 3 es, sin duda, uno de los juegos más divertidos de todo el catálogo de Xbox 360, e incluso uno de los más divertidos de cualquier consola actual. Sigue siendo muy fácil avanzar debido a la excelente selección de armas a nuestra disposición, al control tan preciso del personaje y sus posibilidades, al sistema de salud y protección utilizado que hace que se recupere con el tiempo si no recibe impactos (lo que hace más difícil que nos maten) y a otros muchos factores que pueden pasar inadvertidos pero que consiguen enganchar al jugador hasta el final. De la misma forma, los modos multijugador alcanzan los mismos propósitos incluso para aquellos que se consideren poco hábiles en estas lindes, ya que cualquiera que haya pasado algunas horas delante de la consola puede conseguir algunas puntos en cualquier partida online, lo que aumenta considerablemente su nivel de enganche con el juego. Si a esto añadimos un sistema de promoción del jugador que hace que cada vez que gane alguna partida ascienda y obtenga medallas por sus méritos, y una enorme variedad de modos distintos de juegos que aparecen de forma aleatoria (más o menos), el conjunto resultante es una adicción total que puede durar muchos meses.

Eso sí, todo esto nos resulta excesivamente similar tanto si hemos jugador a las dos entregas anteriores de esta saga como a cualquier otro título de este género en cualquier plataforma. Lo que es peor aún, Halo 3 resulta ser un calco exacto en estructura de juego, sistema de control y desarrollo de fases que Halo 2, sin añadir absolutamente nada nuevo . Podemos comparar este título con aquellas secuelas que veíamos hace muchos años, antes incluso de la época de los 8 y 16 bits, cuando muchos desarrolladores se veían incapaces de mejorar su juego y se limitaban a lanzar al mercado secuelas ofreciendo más de lo mismo con nuevos niveles, personajes y armas, y que perfectamente podía pasar por una mera expansión del original. Eso es lo que nos encontramos con esta tercera parte; más de lo mismo con alguna nueva arma, vehículo y nuevas misiones. Es más, de las nueve misiones de las que consta el modo campaña, la gran mayoría parecen rescatadas directamente de las dos entregas anteriores, con fases abiertas en las que llevamos vehículos y somos acompañados por otros marines, fases de pasillo cerradas en las que estamos completamente solos, y otras en las que tendremos que defender ciertas zonas usando la artillería pesada de la zona. Todo igual.

En realidad, todo esto no supone un grave problema para el juego en si, como de hecho se puede ver en sus índices de venta. Lo que ocurre es que a una compañía importante como esta y a una franquicia que se supone referente dentro de una consola, siempre debemos exigirles mucho más. Tendríamos que habernos encontrado, cuando menos, una estructura distinta en las misiones, distintos objetivos a realizar o nuevas posibilidades para el protagonista así como mejoras para las que conserve de los títulos anteriores, todo lo que haga que obtengamos una jugabilidad distinta y suponga un soplo de aire fresco en general. Y es que ni en algo que se supone tan básico como son los enemigos y sus comportamientos han tenido una mejora sustancial, ya que encontramos a los mismos de entregas anteriores con alguna cara nueva pero muy pocas, eso sí, con una mejora en su comportamiento gracias a la implementación de un nuevo sistema de inteligencia artificial. La única clase de enemigos que resulta ser radicalmente distinta a lo que ya habíamos visto es digna de mención por parecernos hasta divertida y que suponemos se trata de un guiño de Bungie a uno de los mejores juegos de este género al haber copiado el aspecto, el comportamiento e incluso la inteligencia artificial a ciertos enemigos de Half Life 2, tal cual. Por no haber intentado ninguno de estos cambios anteriormente mencionados, nos encontramos con los mismos ?problemas? que su antecesor, con una estructura muy lineal sin más objetivo que a realizar que el de cargarse a todo y seguir avanzando. Aprovechando la potencia de la consola, ahora encontramos algunos mapas algo más abiertos que nos permiten más de libertad de movimiento, aunque el camino siga siendo único.

Por todo ello, es muy fácil recomendar este título. Lo más importante para un juego como son su capacidad de diversión y enganche resulta total, además de un control preciso y muy manejable de todas las opciones del personaje. El apartado técnico también ha sido mejorado ofreciendo un acabado a la altura de las circunstancias aunque quede por debajo de algunas joyas vistas en esta consola. Sólo esperamos que la recientemente anunciada separación entre Bungie y Microsoft Games Studios lleve a los responsables de este Halo 3 a crear algo que no sea tan predecible y que no esté tan marcado por las necesidades del mercado, algo que los buenos desarrolladores siempre están dispuestos a crear, aunque en esta ocasión haya mandado el mercado y su situación.