Desde su nacimiento, una de la características principales de la saga <
i>Forza ha sido siempre una calidad gráfica incomparable a cualquier otro juego de velocidad en Xbox 360, y un abanico de vehículos descomunal, además de la fidelidad a la simulación.
Forza MotorSport 4 sigue a pie juntillas las claves de la saga.
Cuando el año pasado aparecieron las primera fotos del juego, todos pensábamos que Turn 10 quería colárnosla poniendo fotos reales de vehículos, para que la expectación llegase a los cielos. Qué sorpresa la nuestra cuando vimos que dichos modelados no eran vehículos reales, sino realmente diseños poligonales, que perfectamente podrían salir en las fotos de cualquier concesionario de coches.
La espectacularidad de Forza no sólo está los vehículos, este año los circuitos son espectaculares; muchos de ellos nos dejarán con la boca abierta por el número de elementos en pantalla, además de los 16 coches en carrera, y con todo
funcionando de forma fluida a 1080p, algo que parece más magia que técnica.
Sin embargo, el
hechizo no es perfecto;
los vehículos este año presentan unas deformaciones más conseguidas que el año anterior, pero dista mucho de lo que quieren los usuarios más exigentes, lo que tienen otro tipo de juegos dónde el coche puede quedar despiezado. Aquí los daños se limitan a arañazos y algunos bollos en los paragolpes o puertas, pero nada que llame la atención.
El apartado online
ha duplicado el número de jugadores respecto a Forza 3 (cosa normal por otro lado ya que la gran mayoría ya soporta 16 jugadores), además se han añadido muchos opciones online, además de una mejora considerable de los clubes que se implementó en la anterior entrega, se ha añadido
Rivals, un nuevo modo que sirve para picarnos con nuestros amigos o cualquier otro que tenga el juego, podríamos decir que hace las funciones del
autolog de Need For Speed.
¿El fallo principal del juego online? Sin duda
la tardanza a la hora de encontrar partidas (hemos llegado a tardar 4-5 minutos con la versión final del juego y pasada la fecha de lanzamiento), sin
equilibrar además la carrera y con clara descompensación entre los jugadores y los vehículos; podremos entrar perfectamente en una partida con nuestro Fiat 500, y encontrarnos coches de la categoría R1 900, con lo que no podremos ni soñar acabar la carrera. Más grave todavía es el fallo de meternos en partidas donde no podremos ni jugar, porque el anfitrión tiene alguna DLC que nosotros no; esperamos que esto se arregle en próximas actualizaciones...
A pesar de las carencias en el modo online, y de los pequeños "fallos" que hemos visto en el juego (como la falta de las deformaciones en los vehículos, o cambios climáticos), sigue siendo el mejor juego de simulación de Xbox 360, con mucha diferencia.