Valkyria Chronicles esos títulos de difícil descripción incluso cuando has tenido la oportunidad de jugarlo. Tras numerosos vídeos y textos explicativos, aún teníamos grandes dudas sobre el sistema de juego que nos íbamos a encontrar e, incluso, el género al que pertenecía, pero aún así tenía algo que atraía desde el primer instante y por ello le seguimos la pista bastante de cerca. Y hay que reconocer que
estamos ante una de las sorpresas agradables de estas próximas navidades para el catálogo de PS3, al menos a tenor de las primeras horas de juego y tras finalizar los dos primeros capítulos. Eso sí, no hay que llevarse a engaños, ya que tras su apariencia de comic y su estilo gráfico que recuerda a dibujos animados, nos encontramos ante un juego de corte adulto, con una historia bastante profunda y, en ocasiones, cruda. No en balde, todo tiene lugar en una época de enfrentamientos ambientado en una Europa ficticia que transcurre en el año 1930, donde vemos cómo la guerra entre dos grandes bandos llega a una pequeña aldea,
Gallia, que ha permanecido neutral hasta ese momento y que ambos bandos quieren controlar. Es allí donde se encuentran nuestros protagonistas y donde toda la aventura comienza.
Para empezar habría que definir qué clase de juego es Valkyria Chronicles, ya que descripciones vertidas en diversos medios (incluso la descripción oficial de SEGA) pueden llevar a confusión fácilmente. Y es que este título se presenta como una interesante mezcla entre diferentes géneros como la estrategia por turnos, la acción en tercera persona, ciertos elementos de juego de rol y la estrategia en tiempo real, todo esto junto. ¿Es posible? Los chicos de
WOW Entertainment lo han conseguido, y además, con un resultado ampliamente satisfactorio. Pongamos un ejemplo de uno de los primeros enfrentamientos: Básicamente, contamos con un número de turnos variables dependiendo del combate y del número de hombres en nuestra escuadra, donde seleccionamos a uno de ellos al que podremos mover libremente en un entorno 3D en tiempo real, mientras los enemigos se defienden de sus acciones (por regla general con disparos) contra este personaje, y no contra el resto. Cuando queramos, pausamos el juego y seleccionamos la acción que éste deberá realizar (disparar un arma, curar a un aliado, etc.), y una vez seleccionada, el personaje la realizará y la acción volverá ser en tiempo real con los enemigos defendiéndose y disparándole sin descanso hasta que decidamos terminar el turno con la pulsación de un botón, momento en el que tendremos que seleccionar a otro personaje (o al mismo nuevamente) y se repetirá todo el proceso. Una vez acabado con todos los turnos a nuestra disposición, le tocará al enemigo y el proceso será el inverso. Al principio de cada combate se asignarán los objetivos de victoria y derrota, ganando si se cumplen todos los de victoria y perdiendo se alguno de los de derrota llega a buen puerto.
Aunque llevamos bastante poco del juego, todo lo que hemos visto hasta ahora nos ha encantado. Desde el estilo gráfico a la historia pasando por la forma de contarla (simulando un libro con viñetas que podremos revivir una y otra vez, al igual que cada enfrentamiento). El único punto oscuro que, si no lo remedia SEGA, tendrá también la versión final es el idioma, y es que
el juego estará en ingles tanto las voces como los subtítulos, aparte de las voces en japonés, por lo que se convierte en una apuesta dirigida a un público que, al menos tenga unos conocimientos medios del idioma. En próximas entradas de este análisis esperamos poder contaros hasta donde llega la complejidad en la historia y, sobretodo, en el sistema de batalla.