Capcom ha decidido estrenarse en
Nintendo 3DS con
Super Street Fighter IV: 3D Edition, una
coletilla que implica mucho más que un efecto 3D para el sobresaliente apartado gráfico del juego...
Además de adaptar a la perfección la multipremiada fórmula del mejor juego de lucha
2D existente, la compañía nipona
ha conseguido el título más completo del catálogo de lanzamiento. ¿Cómo? Pues aprovechando muy bien
3 de los pilares fundamentales de la nueva portátil de Nintendo. Veámoslo en detalle:
- El 3D. Para ser un título
versionado a la consola, y estar trabajando con una máquina nueva,
Capcom ha conseguido un resultado realmente sorprendente. Los combates tradicionales de la saga quedan muy espectaculares con varios planos de profundidad y el movimiento es muy fluido... Aunque lo mejor viene con el modo
Versus 3D, que con cámara al hombro (que nos recuerda mucho a las repeticiones de la sub-saga
EX) hace la experiencia todavía más inmersiva; es cierto que no es tan competitivo como el modo normal (ya que los espectaculares ángulos dificultan calcular distancias), pero merece la pena trastear algunas partidas con él sólo para disfrutar.
- El control. Además de permitir control con cruceta (que marca muy bien pese a su tamaño) y el nuevo
stick analógico (que resulta muy preciso una vez nos acostumbramos a su sensibilidad),
Capcom ha querido hacer el juego accesible a todo tipo de jugadores, y para ello está la opción de control
Lite en paralelo a la
Pro. Jugando en
Lite los golpes especiales, super-especiales y
ultras se posicionan en la pantalla táctil como
botones (hay 4), y podemos realizar ataques muy complejos con una simple pulsación. En modo
Pro también nos sirven como atajos de combinaciones de botones (como los agarres, los 3 puños / piernas...)
- Las opciones online / inalámbricas. Puede que no tenga tantas opciones como las versiones de sobremesa,
pero hay que destacar lo fluidos, rápidos y divertidos que resultan los combates online en esta versión portátil, junto a la facilidad para añadir rivales y amigos. Por si esto fuera poco, el juego
permite combates versus locales con un sólo cartucho (ideal para competir con nuestros amigos sin juego), y aprovecha el modo
StreetPass (que busca otras consolas cercanas mientras vamos por la calle con 3DS cerrada) para
presentarnos una espectacular colección de figuras virtuales de los luchadores, y
combates virtuales entre estas figuras.
La más completa hasta la fecha - incluyendo gran parte del contenido de pago, dos trajes extra por personaje - esta
3D Edition sabe aprovechar la plataforma donde ha sido editada, pero no es perfecta... ¿El problema? Que
Capcom ya nos ha mostrado una versión superior en los arcades
con 4 nuevos personajes - Yun, Yang, Oni Akuma y Devil Ryu - , luchadores que también deberían haberse incluido en esta versión portátil.
Siguiendo con los
fallitos del juego tenemos que destacar
que en esta versión, los escenarios son completamente estáticos, en lugar de presentar gente o elementos en movimiento. Más que una limitación del
software, todo apunta a
Capcom ha tomado la decisión de renunciar a la espectacularidad de los escenarios para potenciar la experiencia 3D, eliminando las zonas móviles que podrían distraer / confundir al jugador. Lo que sí es una limitación confesa del
hardware - o más bien, del soporte de la consola - es el espacio en cartucho, el causante de que el juego sólo tenga un juego de voces (las americanas), perdiendo las originales japonesas (que sí están en PS3 y X360).
Por último, y centrándonos en la versión española, hay que destacar la traducción de textos del juego y
mencionar el bonito manual, completamente en color y con la lista de movimientos especiales de cada personaje, un detalle que siempre le da
empaque al lanzamiento.