Análisis Super Mario RPG - La aventura más mágica de Mario vuelve a cobrar vida en Switch

Terminar Super Mario RPG nos llevará en torno a las 11-12 horas de juego en nuestra primera partida, aunque hay contenido suficiente para ampliar y casi duplicar esa duración inicial gracias al post-game ampliado que han añadido Nintendo y Square Enix. Así, tendremos la opción de enfrentarnos a la versión más poderosa de los jefes para poner a prueba nuestras técnicas más letales, y conseguir de una forma fácil y divertida las valiosas monedas verdes, que en el original nos obligaban a dominar los minijuegos incluidos a la perfección. Y es que además del toque rolero, el uso del equipo de batalla, afinidades, combos... Hay mucho salto y exploración en los escenarios, homenajeando a las aventuras plataformeras del fontanero.

Es cierto que, incluso con el final ampliado / postgame, la duración del RPG no es especialmente alta dentro del género (es más, es un tanto escasa), y no le hubiera sentado nada mal algún extra adicional, al estilo de los capítulos adicionales que hemos visto en juegos como Mario y Luigi. Los que quieran rentabilizar al máximo el juego, más allá del desafío de los jefes tienen la opción de experimentar con distintos items y equipos de personajes en una segunda vuelta... y poco más.

A nivel jugable Super Mario RPG apuesta por el rol por turnos típico en los 16/32 bits, pero con un divertido twist, la opción de controlar a nuestros personajes durante sus turnos de ataque o defensa para multiplicar del daño que causan o para reducir el que reciben. Se trata de algo muy básico, seguir pulsando el botón con una cadencia exacta o hacerlo en el momento justo, pero hace que los típicos combates contra los enemigos menores se hagan mucho más intensos y divertidos, ya que no podemos bajar la guardia del todo en ningún momento, y hacerlo todo perfecto da una agradable sensación de recompensa.

En el juego hay también cierta afinidad con los elementos y tipos de ataque (físicos/mágicos), aunque lo cierto es que el nivel de dificultad es tan bajo que tampoco es muy necesario explotarlo (es mucho más útil aprender a maximizar/minimizar el daño conociendo los patrones de ataques enemigos, ya que incluso podremos dañar a varios enemigos con la onda de nuestros golpes). Para hacer la fórmula más atractiva se ha incluido además un potente ataque triple que se va cargando con los combos, y que tiene un resultado devastador en toda la pantalla; eso sí, esto hace que el nivel de reto baje todavía más (y ya es bajo en nivel normal), ya que además se ha facilitado la mecánica de golpes encadenados añadiendo frames...

Puede que la mayor debilidad de Super Mario RPG en Switch sea su capacidad para innovar y sorprender si ya hemos jugado al título original, algo que no es tan común en Europa (donde nunca se distribuyó la entrega de Super Nintendo, aunque ya se había lanzado como descarga digital en Wii en 2008 y Wii U en 2015). Hablamos de un gran RPG que causó sensación en su época, cargado de detalles, que ampliaba muchísimo la historia del universo Mario (y en el que hasta encontrábamos cameos de Samus o Link); eso sí, para esta versión remake se ha optado por un salto visual y algunas mejoras en el sistema de juego, pero poco más, hay pocos extras y contenido realmente inédito...

Yendo un poco más lejos, si bien es cierto que Super Mario RPG fue totalmente revolucionario en su lanzamiento en 1996, su semilla ha sido la que ha dado vida a las sagas Paper Mario y Mario y Luigi, en los que la fórmula de exploración y - sobre todo - combate se han explotado mucho más a fondo. De esta forma, si bien resulta todo un puntazo poder disfrutar de un clásico de este calibre en nuestras consolas, que su historia es muy divertida - y adictiva -, y que sus personajes son inolvidables (especialmente, Geno), como título rolero en sí se ha quedado un pasito atrás.

Sin duda, el aspecto que más ha ganado con el remake de Super Mario RPG es el visual, ya que se han rehecho todos los modelados de personaje (ahora completamente 3D) y escenarios del juego, siendo un importante salto gráfico con respecto al acabado isométrico original. Así, el estupendo nivel de detalle de los escenarios, las animaciones de los personajes (aliados y enemigos), la puesta en escena... Todo resulta mucho más espectacular y brillante, pero respetando el arte original de Hideo Minaba, Kiyofumi Kato y Yuko Hatae. Mención especial merecen los nuevos ataques triples (no incluidos en el original, siendo una combinación única para cada trío) y el funcionamiento a 1080P (dock) y 720P (modo portátil), con un rendimiento muy estable a 60FPS.

La banda sonora remasterizada es una delicia, resaltando todavía más el increíble trabajo que hizo Yoko Shimomura adaptando la base de algunas melodías clásicas de la saga pero creando piezas mucho más épicas, que encajan a la perfección con cada nivel y batalla. Mención especial merece la posibilidad de jugar con la banda sonora retro, todo un regalito para los fans más nostálgicos. Además, el juego nos llega con textos en castellano (no hay voces) en una estupenda y divertidísima traducción, perfectamente localizada.