A nivel visual
Sand Land cumple con nota, con una propuesta muy colorida y elaborada para adaptar este mundo de desiertos, demonios y tanques. No sabemos si es por haber dejado a
Switch fuera y optimizar más - y mejor - para el resto de plataformas, pero lo cierto es que el
cel-shading y la puesta en escena están un paso por encima de juegos como
One Piece Odyssey, especialmente en el uso del color y el sombreado. Lo más destacable es la calidad de los modelados, la atención al detalle (especialmente en los vehículos, todo un homenaje al genio creador de
Dragon Ball) y un rendimiento sin problemas demasiado destacables. Es cierto que la cámara no es perfecta y que algunas zonas están un tanto vacías, además de repetirse determinados tipos de enemigos, y que la IA podría beneficiarse de una mejora... Pero en líneas generales el juego alcanza un nivel notable, se ambienta a la perfección y nos transporta inmediatamente al mundo de fantasía creado por
Akira Toriyama.
La banda sonora también cumple con nota, con composiciones para todo tipo de situaciones, temas que - aunque se quedan en un segundo plano - ambientan a la perfección la acción, exploración o infiltración. El juego nos llega además con voces en inglés o japonés (y una correctísima interpretación para el doblaje, con algunos de los mismos actores que han puesto la voz al anime), y textos en castellano para que no nos perdamos ni un detalle.