Desde que lanzase la primera entrega de
Persona en
1996,
Atlus ha ido puliendo los fallos que arrastraba la saga, intentando no agobiar al jugador con un sistema excesivamente complejo o 'perderlo' en un mundo enorme... Como fruto de esta evolución nos llega
Shin Megami Tensei - Persona 3, un RPG que llega a nuestro país con un enorme retraso pero con unas estupendas cualidades intactas para auparlo al pódium de los mejores juegos de rol de
Playstation 2. ¿Estará a la altura? Veámoslo en detalle.
El sistema de combate, a pesar de tener como base los ya típicos turnos mejora potencialmente al añadir la novedad de
invocar ?personas? para que nos ayuden durante los enfrentamientos, mezlando además elementos muy distintos. Así, en el aspecto jugable habría que dividir el juego en dos etapas:
- La ?social?, en la que llevaremos a nuestro personaje al instituto; conseguir la admiración de otros alumnos, aumentar nuestra inteligencia (respondiendo preguntas correctamente en clase) y mejorar nuestra relación con otros protagonistas (incluso podremos conseguir que una chica se enamore de nosotros) es la base. Para que os hagáis una ligera idea, sería una especie de
Sims...
- La ?rolera?, en la que asaltaremos la
Torre del Tártaro. Aquí predomina la estrategia a la hora de elegir los
Persona a invocar y sus ataques, como un RPG normal. Estas entidades - a las que iremos accediendo durante la aventura ? pueden cambiar radicalmente nuestra forma de luchar, lo que unido a
los personajes no controlables que combatirán a nuestro lado - y a los que tendremos dar órdenes indirectas - le dan una gran profundidad a la mecánica del juego.
Y uno de los puntos clave del título sería como ambos aspectos interactúan; así, si todos los miembros de nuestro equipo se llevan bien con la persona que ?cura?, sus hechizos serán más útiles, y nuestro carisma ayuda a que los personajes sigan nuestras órdenes sin dudar.
Persona 3 nos sumerge en su sórdido mundo desde los primeros minutos de juego; aquí hay que destacar una genial puesta en escena y unos personajes interesantes y llenos de matices como reclamo principal para el jugador. La trama ? muy elaborada ? juega al despiste y nos obliga a suponer muchas situaciones, por lo que las sorpresas están garantizadas según avanza la historia...
De esta forma, si caéis presas de la magia de
Persona es casi seguro que vais echar las más de 50 horas que os separan del final del juego, incluyendo decenas de posibilidades gracias al gran número de protagonistas incluidos o la opción de ?fusionar?
Personas, lo que da lugar a centenares de criaturas... Ahora bien, si el juego no consigue engancharos, elementos como
las continuas cargas (especialmente pesadas en el instituto) y un sistema de menús muy mejorable harán la experiencia ardua...
Sin duda uno de los puntos más fuertes de
Persona 3 es su estupenda ambientación, que junto a una estética única lo convierte en una experiencia inolvidable para el jugador,
y lo que es aún más complicado, consigue que el juego brille con luz propia en el difícil catálogo de RPGs de Playstation 2
A nivel técnico nos encontramos con un apartado gráfico sobresaliente gracias a un sabio uso del
cel-shading para animar a nuestros héroes. Mención especial merecen los modelados de personajes y enemigos - tan originales como trabajados - y los escenarios - amplios y llenos de detalle.
El apartado sonoro también es brillante, destacando una banda sonora muy convincente, unos
FX demoledores y un sólido doblaje americano. Eso sí,
al juego le pasa factura la falta de traducción, especialmente en los vídeos donde ni siquiera encontraremos subtítulos en inglés, y que pueden resultar un poco confusos (incluso anticlimáticos) si no dominamos el idioma...