Publicado el , por José Carlos Fernández Jurado
Quizá muchos de vosotros hayáis estrenado consola estos días, o estéis a punto de comprar una nueva máquina con el dinero recaudado en las fiestas. Aunque siempre es una experiencia genial estrenar una máquina y un jugón de pro siempre va a disfrutar del estreno, nosotros hemos querido reflexionar un poco, después de ver muchas compras impulsivas durante el periodo navideño. ¿Realmente es un buen momento para comprar?
Por un lado están Xbox One y PS4, que ahora mismo tiene un repertorio de juegos a medio cocer, pocas exclusivas interesantes y toneladas de remakes y versiones mínimamente mejoradas de los juegos de Xbox 360 y PS3. Ya dejamos claro en otro artículo que ambas consolas se presentaban con unas propuestas muy parecidas el pasado año, y que estaban muy, muy igualadas, más todavía de lo que a muchos les gustaría comprobar. Xbox One y PS4 son, actualmente, grandes promesas de futuro con un catálogo de juegos muy interesantes en el horizonte - Uncharted 4, Halo 5, Batman Arkham Knight, The Witcher 3... Y un larguísimo etcétera -, pero esos juegos no están todavía en el mercado, y a veces el destino es caprichoso. Si os dejáis guiar por promesas os puede pasar como a una amiga mía, que se decidió por PS3 en lugar de Xbox 360 porque quería jugar a The Last Guardian y Final Fantasy Versus XIII, y ahora tendrá que comprarse otra nueva consola para hacerlo (y eso, con suerte). Hoy por hoy, ambas máquinas están todavía muy desaprovechadas.
La imagen es preciosa, pero de 2011... Y seguimos sin saber cuándo lo cataremos
Y justamente en el lado contrario está la Wii U, una consola que durante 2014 puede presumir de tener 3 de los mejores juegos que hemos podido probar - Bayonetta 2, Mario Kart 8 y Super Smash Bros. - 3 joyazas redondas, que exprimen el hardware de la máquina y que no podríamos jugar en ninguna otra consola... Una consola para disfrutar ahora (además, con el catálogo de Wii, es la única retrocompatible), pero tiene una enorme interrogación en su futuro, un futuro que cada vez nos resulta más similar al de Gamecube: todo apunta a que vamos a seguir teniendo grandes juegos de Nintendo - como el nuevo episodio de The Legend of Zelda - y alguna que otra colaboración third party brillante, pero el grueso de juegos multiplataforma va a establecerse en PS4-Xbox One-PC, dejando la máquina con importantes periodos de escasez - obviamente, la Gran N no puede abastecer sola a la consola y al mismo tiempo mantener el catálogo 3DS/New 3DS - y haciéndola cojear en determinados géneros.
Diversión inmediata... ¿Y sin futuro?
Entonces, la pregunta es clara... ¿Qué consola nos deberíamos comprar? Pues, lo cierto es que a día de hoy, y salvo que seamos realmente fans de alguna saga (especialmente de Nintendo) la respuesta más lógica sería no comprar NINGUNA, armarnos de paciencia y esperar. De esta forma podremos conseguir 3 importantes ventajas:
- Una ahorro gracias a la bajada de precio de la máquina. Desde el año pasado hemos visto un recorte importante en el valor de Xbox One (más de 100 euros), además de lanzar un modelo sin Kinect (que muchos jugadores no queríamos utilizar y venía impuesto), y distintos packs con juegos de regalo (en el caso de la consola de Microsoft, por valor de más de 100 euros). En PS4 las rebajas no han sido tan espectaculares (las ventas son más altas), pero sí hemos visto juegos y contenido extra de regalo... Y en Wii U la cosa ha sido todavía más radical, en dos años casi puede encontrarse la consola por la mitad de su precio de lanzamiento original.
- Un ahorro adicional en los juegos. Si tenemos un poco de paciencia, entre las rebajas naturales de juegos y el mercado de segunda mano (ahora es el momento de volver a celebrar que no se apostase por el formato digital o la copia única) podemos hacernos con una interesante colección de juegos por menos de la mitad del precio de lanzamiento. Igualmente interesante resulta mantener nuestra consola (Xbox 360/PS3) y suscribirnos a los servicios Gold / Plus para ir descargando juegos de Xbox One/PS4 a través de las tiendas del PC. De esta forma, esperando un año, cuándo estrenemos consola lo haremos con más de 12 juegos...
It's free!.
- Tener una versión mejorada de la máquina, a nivel de hardware y software. Lo primero es que sean otros los que se preocupen por saber si One/PS4/Wii U sufren de luces rojas, amarillas o fuxia, que paguen ellos la novatada. Por otra parte, el firmware de las máquinas ha ido avanzando mucho en estos meses (especialmente en One), y ahora tenemos interfaces más intuitivas, menos problemas de actualizaciones continuas (aunque siguen siendo una de las lacras de esta generación) y nuevas aplicaciones disponibles, como la posibilidad de reproducir vídeos... También hemos visto ya modelos mejorados, como la Xbox One de 1TB, que a la larga puede ser muy de agradecer.
Como conclusión, no estamos diciendo que no compréis nunca la nueva generación, pero salvo que os sobre el tiempo y el dinero, que seáis pacientes y lo hagáis en el mejor momento, aprovechando mientras para disfrutar al máximo de vuestras consolas actuales. Hacedlo cuando los juegos que queréis ya estén en el mercado, y así no os frustrarán retrasos y/o cancelaciones. Y si habéis perdido el tren de las navidades no os preocupéis, todo apunta a que en las próximas vamos a encontrar - por fin - un catálogo que justifique la existencia de las nuevas máquinas, y empiece a exprimir de verdad su potencial.
Por un lado están Xbox One y PS4, que ahora mismo tiene un repertorio de juegos a medio cocer, pocas exclusivas interesantes y toneladas de remakes y versiones mínimamente mejoradas de los juegos de Xbox 360 y PS3. Ya dejamos claro en otro artículo que ambas consolas se presentaban con unas propuestas muy parecidas el pasado año, y que estaban muy, muy igualadas, más todavía de lo que a muchos les gustaría comprobar. Xbox One y PS4 son, actualmente, grandes promesas de futuro con un catálogo de juegos muy interesantes en el horizonte - Uncharted 4, Halo 5, Batman Arkham Knight, The Witcher 3... Y un larguísimo etcétera -, pero esos juegos no están todavía en el mercado, y a veces el destino es caprichoso. Si os dejáis guiar por promesas os puede pasar como a una amiga mía, que se decidió por PS3 en lugar de Xbox 360 porque quería jugar a The Last Guardian y Final Fantasy Versus XIII, y ahora tendrá que comprarse otra nueva consola para hacerlo (y eso, con suerte). Hoy por hoy, ambas máquinas están todavía muy desaprovechadas.
La imagen es preciosa, pero de 2011... Y seguimos sin saber cuándo lo cataremos
Y justamente en el lado contrario está la Wii U, una consola que durante 2014 puede presumir de tener 3 de los mejores juegos que hemos podido probar - Bayonetta 2, Mario Kart 8 y Super Smash Bros. - 3 joyazas redondas, que exprimen el hardware de la máquina y que no podríamos jugar en ninguna otra consola... Una consola para disfrutar ahora (además, con el catálogo de Wii, es la única retrocompatible), pero tiene una enorme interrogación en su futuro, un futuro que cada vez nos resulta más similar al de Gamecube: todo apunta a que vamos a seguir teniendo grandes juegos de Nintendo - como el nuevo episodio de The Legend of Zelda - y alguna que otra colaboración third party brillante, pero el grueso de juegos multiplataforma va a establecerse en PS4-Xbox One-PC, dejando la máquina con importantes periodos de escasez - obviamente, la Gran N no puede abastecer sola a la consola y al mismo tiempo mantener el catálogo 3DS/New 3DS - y haciéndola cojear en determinados géneros.
Diversión inmediata... ¿Y sin futuro?
Entonces, la pregunta es clara... ¿Qué consola nos deberíamos comprar? Pues, lo cierto es que a día de hoy, y salvo que seamos realmente fans de alguna saga (especialmente de Nintendo) la respuesta más lógica sería no comprar NINGUNA, armarnos de paciencia y esperar. De esta forma podremos conseguir 3 importantes ventajas:
- Una ahorro gracias a la bajada de precio de la máquina. Desde el año pasado hemos visto un recorte importante en el valor de Xbox One (más de 100 euros), además de lanzar un modelo sin Kinect (que muchos jugadores no queríamos utilizar y venía impuesto), y distintos packs con juegos de regalo (en el caso de la consola de Microsoft, por valor de más de 100 euros). En PS4 las rebajas no han sido tan espectaculares (las ventas son más altas), pero sí hemos visto juegos y contenido extra de regalo... Y en Wii U la cosa ha sido todavía más radical, en dos años casi puede encontrarse la consola por la mitad de su precio de lanzamiento original.
- Un ahorro adicional en los juegos. Si tenemos un poco de paciencia, entre las rebajas naturales de juegos y el mercado de segunda mano (ahora es el momento de volver a celebrar que no se apostase por el formato digital o la copia única) podemos hacernos con una interesante colección de juegos por menos de la mitad del precio de lanzamiento. Igualmente interesante resulta mantener nuestra consola (Xbox 360/PS3) y suscribirnos a los servicios Gold / Plus para ir descargando juegos de Xbox One/PS4 a través de las tiendas del PC. De esta forma, esperando un año, cuándo estrenemos consola lo haremos con más de 12 juegos...
It's free!.
- Tener una versión mejorada de la máquina, a nivel de hardware y software. Lo primero es que sean otros los que se preocupen por saber si One/PS4/Wii U sufren de luces rojas, amarillas o fuxia, que paguen ellos la novatada. Por otra parte, el firmware de las máquinas ha ido avanzando mucho en estos meses (especialmente en One), y ahora tenemos interfaces más intuitivas, menos problemas de actualizaciones continuas (aunque siguen siendo una de las lacras de esta generación) y nuevas aplicaciones disponibles, como la posibilidad de reproducir vídeos... También hemos visto ya modelos mejorados, como la Xbox One de 1TB, que a la larga puede ser muy de agradecer.
Como conclusión, no estamos diciendo que no compréis nunca la nueva generación, pero salvo que os sobre el tiempo y el dinero, que seáis pacientes y lo hagáis en el mejor momento, aprovechando mientras para disfrutar al máximo de vuestras consolas actuales. Hacedlo cuando los juegos que queréis ya estén en el mercado, y así no os frustrarán retrasos y/o cancelaciones. Y si habéis perdido el tren de las navidades no os preocupéis, todo apunta a que en las próximas vamos a encontrar - por fin - un catálogo que justifique la existencia de las nuevas máquinas, y empiece a exprimir de verdad su potencial.
47
Click aquí para ver todos los comentarios de este juego^ Volver arriba