El juego nos propondrá una situación que mezclará elementos reales vistos en la Primera Guerra Mundial combinándolos con otros sacados totalmente de la fantasía. No obstante, la historia se desarrolla en un futuro alternativo durante el año 1960, como si dicha “Gran Guerra” no hubiese acabado aún en ese periodo de tiempo y tras 50 años. Nosotros tomaremos el papel de James Anderson, teniente en un consorcio occidental formado con la intención de acabar con los planes del Baron Ugenberg, que planea construir un inmenso imperio ruso-mongol, aplastando así a los bolcheviques.
Con esta historia como telón de fondo, el título nos propondrá hasta 16 niveles de acción en primera persona (la versión aparecida en USA permitía el cambio entre primera y tercera persona) en las que veremos una ambientación más típica de la Primera o Segunda Guerra Mundial, aunque nuestros personajes usarán unas armas mucho más avanzadas para esta época (la única arma de la primera guerra mundial son las conocidas granadas de humo), creando un ambiente muy original no visto hasta ahora en títulos del género. Además de las numerosas fases de acción de disparos pura y dura que serán las predominantes, también nos encontraremos con otras en las que deberemos resolver ciertos “puzzles” simples cuya resolución suele consistir en la búsqueda de ciertos objetos que deberemos llevar a ciertos puntos concretos. Para la resolver dichos puzzles, deberemos leer las pistas que nos iremos encontrando en escritos y ordenadores las cuales nos ayudarán a encontrar la localización exacta de los objetos que buscamos. Gracias a este punto y en la mayoría de las ocasiones, deberemos re-visitar en más de una ocasión las mismas zonas para realizar distintas acciones en ellas, En este sentido, la resolución de las misiones que se nos encomendarán no será en su mayor parte lineales, teniendo distintas formas de acometerlas con distintas finalizaciones según nuestra forma de realizarlas.
También contará el juego con ciertas fases de “sigilo”, en las que la vista en tercera persona nos será de mucha más ayuda que las de primera persona, al tener que infiltrarnos y pasar desapercibidos por cierta zona usando las “clásicas” técnicas de pasar agachados o en cuclillas para no ser vistos. La inteligencia artificial enemiga también ha sido tenida en cuenta en estas y otras ocasiones y nos encontraremos con unos comportamientos bastante reales de los soldados, tanto en la zona de combate (intercambio de ráfagas, ocultarse o cubrirse, etc.) como su comportamiento cuando estamos pasando desapercibidos a sus ojos.
En definitiva, nos encontramos ante un título de acción distinto que combinará acción en primera y tercera persona con otros elementos de infiltración y algunos ligeros toques de aventura. Una de sus grandes bazas residirá en su ambientación y la historia que se nos narra, la cual combina elementos clásicos sacados de la Gran Guerra con otros muy originales y la combinación de armas y vehículos futuristas. Técnicamente, no estará a la altura de las últimas joyas aparecidas en el género para PC pero si podemos ver en las imágenes un engine muy completo con gran cantidad de detalles y efectos de luces y sobras así como un buen modelado en escenarios y enemigos. Sólo falta por ver que han sido capaz de hacer en Rebellion con este planteamiento y si, como parece, nos encontramos ante un título divertido, original y distinto a otros. En un mes, saldremos de dudas.
