¡Bienvenido a la isla del pez del viento!
Creado como una aventura aparte de la saga principal, The Legend of Zelda: Link's Awakening da un paso más allá y nos lleva fuera del Reino de Hyrule, a una misteriosa isla en la que nada es lo que parece. Nintendo quiso de esta forma diferenciar la primera aventura portátil de Link de las entregas anteriores, pero sin renunciar a los puntos más fuertes de A Link to the Past. Así, la exploración, los puzles, las mazmorras llenas de secretos y las luchas contra los jefes finales están a la orden del día.
La Isla Koholint - que es dónde ha naufragado nuestro héroe - es el punto de partida, y donde transcurrirá toda la aventura. Link tiene que investigar este misterioso lugar y sus secretos si quiere escapar, ya que no todo es lo que parece... Un punto muy divertido son los habitantes, que además de recordarnos caras conocidas de la saga a veces rompen sutilmente la cuarta pared para darnos información sobre cómo jugar, de una forma amena y divertida.
La aventura de Link le llevará a misteriosos calabozos en busca de unos poderosos objetos musicales mágicos, la clave para liberarse... Y vosotros vais a disfrutar cada paso de su viaje.
Mejoras jugables en Switch
Uno de los puntos que más nos ha gustado de este The Legend of Zelda: Link's Awakening son las novedades de control. El título original de Gameboy se controlaba solo con 2 botones, lo que nos obligaba a estar continuamente cambiando las armas y artilugios asignados a A y B, incluyendo la espada y el escudo... En esta nueva versión tenemos dos botones dedicados para la espada y el escudo, y los artilugios - los Polvos Mágicos o la Pluma de Roc - la podemos asignar a los otros dos, X e Y, dejándonos así mucha más flexibilidad y libertad para jugar (sin tener que recurrir continuamente al menú de armas).
Más allá de ello, del control analógico (y muy preciso) de Link y de una mayor fluidez en el desarrollo del juego no notamos grandes diferencias con el original, aunque hay que reconocer que éste estaba muy optimizado para la época. Por supuesto ahora algunos enemigos son más inteligentes (como los soldados), los jefes han ganado en tamaño y ferocidad, y si no vamos con cuidado vamos a ver a Link quedarse rápidamente temblando sin corazones. Algunos de nuestros compañeros de prensa incluso murieron en la demo, y aquí vimos un paso bastante curioso, y es que en lugar del Game Over, Link volvía a un punto cercano con más de la mitad de la vida... De ser así en la versión final, el juego será mucho más fácil y accesible que el original.
En la demo no pudimos disfrutar de una de las grandes novedades del título, la opción de crear (y compartir) mazmorras de juego con distintos elementos de las ya creadas (puzles, monstruos, cofres ocultos...). Bien aprovechado, puede sumar un montón de horas de juego.
A nivel técnico...
Hay dos cosas que sorprenden de The Legend of Zelda: Link's Awakening desde los primeros minutos de juego. La primera es lo bien que se ha remasterizado el título, artísca y visualmente es impresionante, ya que los distintos elementos (árboles, rocas, construcciones...) se han renderizado con todo lujo de detalles. El colorido, la puesta en escena de cada lugar, la iluminación... Todo es un precioso espectáculo, y creednos si os decimos que al natural el juego gana mucho sobre las fotos mostradas por Nintendo.
La segunda sorpresa, lamentablemente, no es tan positiva. La zona inicial, y alguna más abierta (como el pantano) se muestran con importantes ralentizaciones y perdidas de framerate, forzando la consola incluso en modo sobremesa. Evidentemente lo que hemos visto es una beta y es de esperar que la mayoría de fallos - o, al menos, los más graves - estén solucionados de cara al lanzamiento de la versión definitiva... pero aún así, sorprende ver que la consola que mueve Breath of the Wild o Mario Odyssey tenga problemas con un título remasterizado con cámara fija y vista cenital.
La experiencia mejoraba - mucho - en las mazmorras y zonas más cerradas, y ahí es donde más disfrutamos, re-explorando el mapa. Aunque como decimos muchos elementos están puestos como renders sobre los diseños originales, para no variar en demasía los mapas o las estancias el resultado es muy bueno, y la sensación mejora todavía más en las zonas abiertas, más naturalmente comunicadas.
La banda sonora sí es un sobresaliente a todas luces, y aunque no hemos escuchado voces (después del paréntesis de Breath of the Wild volvemos a los ruiditos-vocecillas>/i> típicas de la saga) las composiciones remasterizadas y reorquestadas sonaban estupendamente, mostrando lo mejor del trabajo de Kazumi Totaka, Minako Hamano y Kozue Ishikawa.
Esperamos impacientes el lanzamiento de The Legend of Zelda: Link's Awakening el próximo 20 de Septiembre, acompañando a la nueva Switch Light, el rediseño - solo portátil - de la última máquina de Nintendo.