Hablamos de un juego de rol táctico muy al estilo de los clásicos Ogre Battle o Final Fantasy Tactics en el que tendrermos que luchar contra ejércitos de no-muertos y toda clase de criaturas en un intento por salvar el planeta, y cuando decimos ejércitos queremos decir precisamente eso, cientos de criaturas a la vez lo que hará que nos recuerda a los juegos de estilo Dynasty Warriors (denominados popularmente como lucha de uno contra miles), pero en formato táctico. ¿Suena interesante?
La historia se presenta también muy curiosa, y en ella se nos cuenta cómo en un afán por crear la más mortífera de las armas máginas, la raza humana ha conseguido levantar a los no muertos con tal mala fortuna que parece haberlos levantado a todos a la vez, y además a nadie le hace gracia que los despierten de una siesta eterna, así que están más que cabreados. Este hechizo calamitoso envolvió la tierra en una niebla llena de monstruos infernales. Todo y todos los tocados por la niebla fueron asesinados, enloquecidos o transformados en abominaciones y la única solución es lanzar un último hechizo para erradicar por completo toda la magia de los reinos.
Para lanzar este hechizo final, los que quedan vivos deben unirse para proteger a los magos mientras intentan romper los sellos que protegen a los monstruosos jefes. Y es aquí donde entramos los jugadores en un juego de rol táctico con toques de tower defense en la construcción y colocación de trampas y defensas, reemplazando a los magos devorados por las bestias y equipando armas. Los personajes sin clase del último hechizo tienen un alto grado de personalización: las armas determinan sus habilidades y cada héroe puede equipar dos instrumentos de muerte.
Todo esto ocurre por el día, mientras que por la noche seremos testigos de avalanchas de monstruos con ataques devastadores de área de efecto y hechizos antes de que puedan alcanzar a los magos. Cientos de enemigos pueden enjambrar a los héroes todas las noches, por lo que tendremos que hacer gala de todas nuestras dotes de mando con nuestras tropas.
Como vemos en las imágenes y el vídeo, The Last Spell tiene una estética muy cuidada a pesar de su estilo retro pixelart, con una bonita animación y unos personajes y escenarios detallados. La banda sonora no iba a quedar atrás, y curiosamente para un juego de estas características escucharemos una banda sonora de toque electrónico y heavy metal con sintetizadores, una mezcla más que curiosa y que funciona muy bien.
En 2020 para PC y Switch.
